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Por: Dr. Stephen JonesPublicado el: 29/09/2021
Ayer, el Año Profético 2020-21 terminó el Octavo Día de Tabernáculos, como todos los años. Ahora esperamos el comienzo del próximo Año Profético después de un breve período intermedio.
El Llamado al Arrepentimiento fue la culminación del Año Profético 2020-2021, que comenzó el 4 de noviembre de 2020. Este fue el día después de las elecciones fraudulentas del 3 de noviembre. Creo que nuestro Llamado al Arrepentimiento incluye un llamado al arrepentimiento del fraude electoral, que subvierte la voluntad del pueblo mismo. En esencia, nuestro llamado ha advertido a estos criminales, de modo que no tendrán excusa si no se arrepienten.
En una nota más positiva, en la noche del 17 de enero de 2021 fui ungido con una comisión como embajador de Cristo ante las naciones. Esto también tuvo implicaciones de “elección”, pero difería del tema político en que se trataba de la elección de Dios, no del hombre. Cualquier cosa que hagan los hombres, Dios no se ve impedido ni obstaculizado. Su Reino continúa avanzando, independientemente de la voluntad del hombre.
Encontré significativo el momento de mi comisión porque cayó el mismo día (38 años después) en que me uní conscientemente a la Red de Oración el 17 de enero de 1983. Esa conexión muestra una progresión en mi propia vida de novicio a embajador.
En última instancia, las aparentes demoras que todos hemos experimentado a lo largo de los años se han debido en gran parte a la misericordia de Dios dando tiempo a la gente para que se arrepienta. La gracia de Dios es mucho mayor de la que nosotros mismos extendemos a los pecadores. También vemos en las Escrituras cómo Dios fue paciente durante siglos antes de finalmente juzgar a Israel y Judá.
Al mismo tiempo, Dios también usa el tiempo para llamar y entrenar a aquellos que ha elegido para varios llamamientos y ministerios. Hasta el día del juicio, los llamados al arrepentimiento continuaron durante mucho tiempo, tanto en los días de los profetas bíblicos como en nuestro propio tiempo.
Nuestra principal esperanza hoy es que de nuestro estudio del tiempo, veamos que el tiempo que Dios dio a las naciones para gobernar la Tierra (es decir, "los tiempos de los gentiles") terminó el 12 de octubre de 2017, que fue el Octavo Día de Tabernáculos de ese año. Ahora estamos en medio de un período de siete años desde 2017-2024 donde estamos viendo el colapso de Babilonia. Nuestro Llamado al Arrepentimiento bien pudiera ser el llamado final antes de que veamos algún juicio importante que traiga cambios permanentes a la Tierra, que marcarán el comienzo del Reino.
Cuando Dios ejerce presión sobre una nación para motivarla a arrepentirse, o para que se den cuenta de que el status quo no está funcionando, lo llamamos "juicio". Según una revelación reciente, parece que el "juicio" de Estados Unidos, es decir, la presión divina, puede comenzar mañana, 30 de septiembre. Si es así, esto se correlacionaría con el 1 de octubre, que es el comienzo del año fiscal estadounidense.
¿Qué podría suceder? Parece que el Congreso no va a aumentar el "techo de la deuda", al menos no de inmediato. Los departamentos de gobierno ya están haciendo preparativos para cerrar por falta de fondos. En el pasado, el Congreso siempre ha capitulado y ha votado para aumentar el techo de la deuda una vez más, de modo que la Fed pueda crear más dinero de la nada para pagar las facturas. ¿Harán lo mismo una vez más? ¿O revocarán la Ley de la Reserva Federal de 1913 y pondrán fin a la locura monetaria del sistema de usura de la deuda?
Tendremos que ver qué pasa, pero no esperemos ver un cambio inmediato. Cualquier cambio a mejor será muy reñido, porque los babilonios no quieren ceder el poder ni cambiar el sistema que se lo da. Tenga en cuenta que solo estamos a la mitad de este período de siete años.
Parece cada vez más que 2017-2024 sea el clímax del largo ciclo de tribulaciones desde la caída de Jerusalén en el 604 aC. Uno podría incluso verlo como "la tribulación" en sí. ¿Recuerda todas las disputas entre aquellos que creen en un rapto antes de la tribulación, un rapto en mitad de la tribulación y un rapto después de la tribulación? Los tres puntos de vista se basan en fundamentos defectuosos, pero sin embargo, hay algunos granos de verdad incrustados allí en alguna parte.
Sabemos que los ciclos de siete años son comunes en la profecía a corto plazo. También sabemos que los puntos medios también son importantes. El actual período de siete años comenzó con el eclipse solar del 21 de agosto de 2017 y terminará con un eclipse solar el 8 de abril de 2024. El punto medio entre estos dos eclipses cayó el 14 de diciembre de 2020, con un eclipse solar visible en el sur de Chile y Argentina. También fue el día en que el Colegio Electoral se reunió para elegir a Biden (de manera fraudulenta).
Desde ese punto de vista, Estados Unidos se encuentra ahora en la segunda mitad de un período de tribulación que termina en 2024.
Los luciferinos ocultistas insertaron en la Iglesia su propia comprensión del libro de Apocalipsis hace más de un siglo. Esa visión es ahora la corriente principal, y eso ha preparado el camino para que los satanistas cumplan con su visión de la "marca de la bestia" a través de la vacuna. Pocos entienden que los satanistas se esfuerzan por cumplir la profecía, pero primero la malinterpretan de acuerdo con su propia mente carnal. Por la misma razón, planean producir su "Anticristo", que la Iglesia misma está esperando.
Pero sabemos que sus planes se desmoronarán. Dios los ha obligado a apresurar su agenda. Han estado “hirviendo la rana” lentamente durante mucho tiempo, pero ahora se han visto obligados a subir el fuego demasiado rápido. La rana está notando el calor y se está alarmando. Creo que la rana saltará de la olla antes de que sea demasiado tarde.
Aun así, se ha subido la temperatura y la olla podría calentarse bastante durante un tiempo. La mayoría no está muy bien preparada, porque a los cristianos se les ha enseñado que escaparán de la tribulación en un rapto. Del mismo modo, los cristianos se han centrado tanto en evangelizar a los incrédulos que no se han fundamentado adecuadamente en la Palabra. Por lo tanto, se rigen más por el miedo que por la fe y en gran medida desconocen el problema.
Pero ustedes, que han estado estudiando la Palabra con nosotros y que comprenden el plan divino en la profecía, tienen una ventaja sobre los que no saben lo que Dios está haciendo en la Tierra. Han tenido la oportunidad de prepararse espiritualmente y quizás también materialmente, para que este día no les llegue como un ladrón. 1ª Tesalonicenses 5: 4-5 dice:
4 Pero vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que el día os sorprenda como un ladrón; 5 porque todos sois hijos de la luz e hijos del día. No somos de la noche ni de las tinieblas.
Así que les animo a que se regocijen en lo que Dios está haciendo. Recuerde la lección de Pedro, cuando caminó sobre el agua para encontrarse con Jesús en la tormenta. Cuando apartó los ojos de Jesús y miró el viento y la tormenta, tuvo miedo y comenzó a hundirse. No sigamos el ejemplo de Pedro en esa historia, sino mantengamos nuestros ojos enfocados en Jesucristo, quien es el único capaz de salvarnos.
