SALIENDO DE LA OSCURIDAD II
Gary E. Sigler
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EFESIOS 4:17-18"Esto, pues, es lo que les digo y les encargo en el nombre del Señor: que ya no vivan más como los paganos, los cuales viven de acuerdo con sus inútiles pensamientos y tienen oscurecido el entendimiento. Ellos no gozan de la vida que viene de Dios, porque son ignorantes a causa de lo insensible de su corazón”
La
alienación o separación de la vida de Dios en nosotros es un gran
problema dentro de la Iglesia. Todos nosotros estamos, todavía, en
un grado u otro, alienados de esta vida que poseemos internamente. Y
lo único que nos va a traer dentro de un mayor entendimiento sobre
esa vida, y nos va a preparar para lo que Dios está haciendo en la
tierra es derribar la mayoría de nuestros conceptos sobre Dios, los
cuales nos han sido enseñados en el pasado por nuestros antecesores
en la iglesia. Estos tienen que ser desarraigados, porque lo que Dios
quiere traer a la tierra a través de Su gente es el Evangelio
de Reconciliación.
Este es el único evangelio que Pablo siempre nos dijo que
necesitábamos predicar. A la gente en la tierra se le debe explicar
la magnitud de la victoria del Calvario.
Muy
poca de la gente de Dios está consciente de la “Proclamación
de la Emancipación del Calvario”. Pienso probablemente que la
mayoría de nosotros conocemos lo que fue la Proclamación de la
Emancipación; fue la proclamación que liberó a los negros de la
esclavitud. Y ¡Oh, si conociéramos los beneficios de está
proclamación del Calvario! Esa es la razón por la que no nos
estamos moviendo en el poder de Dios. La Iglesia tiene tan poco del
poder de Dios, y el poder fluye a través de tan pocas personas en
los dones del Espíritu. Sin embargo, no hemos visto nada aún,
porque cuando Dios por Su Espíritu llegue a la madurez dentro de la
Iglesia, veremos el poder de Dios como nunca se ha visto antes.
En
estos días debemos entender el corazón de Dios. Está llegando un
poder tan sorprendente de Dios que si tú no entiendes SU corazón, y
no caminas en el amor de Dios, tomarás Su poder y traerás juicio a
Su gente, la causarás daño y perjuicio. Dios está trayendo juicio
a Su gente, pero es un juicio justo. Tienes que conocer el corazón
de Dios. Has escuchado decir que la unción apostólica y profética
de la iglesia primitiva va a ser restaurada, y ¡hoy hay muchos
hombres de Dios que están profetizando y enseñando, que la Iglesia
va a ser restaurada a como fue conocida en sus primeras etapas! ¡Sin
embargo, la Iglesia no lo logró la primera vez! Y no estoy tan
seguro de que si la unción y el poder
apostólico regresaran como fue en los primeros tiempos, la misma
situación no acontecería de nuevo, a no ser que la gente de Dios
comience a comprender el corazón del Padre. No creo que esa
restauración sea la respuesta. Pienso que la única
respuesta hoy para la gente de Dios es realmente comprender el
corazón de Dios y tenerlo descubierto para ellos.
En el
primer mensaje, compartí contigo un pasaje el cual se ha vuelto muy
controversial en la Iglesia, y quiero retomar eso de nuevo. Ese es 1
Corintios capítulo 15, comenzando en el versículo 20 y llegando
hasta el versículo 23: “Pero lo cierto es que Cristo
ha resucitado. El es el primer fruto de la cosecha: ha sido el
primero en resucitar. Así como por causa de un hombre entró la
muerte en el mundo, también por causa de un hombre entró la
resurrección de los muertos. Y así como en Adán todos mueren, así
también en Cristo todos tendrán vida. Pero cada uno en el orden que
le corresponda: Cristo en primer lugar; después cuando Cristo
vuelva, los que son suyos”.
Recuerdas
que pregunté el tema anteriormente, ¿Es el “todo” en Cristo
algo menos que el “todo” en Adán? Porque si podemos tomar ese
versículo literalmente, así mismo como se habla, “Como
en Adán todos mueren, así en Cristo todos serán hechos vivos”,
la pregunta es respondida, y para entender como pudiera
ser eso posible, como podemos todos morir en Adán, y ser hechos
vivos en Cristo necesitamos regresar al mismo inicio de la creación
para ver cual fue el propósito original de Dios al crear al
hombre.
Sé
que todos hemos escuchado esto, pero el diseño, intento y propósito
original de Dios fue crear a la humanidad para contener y expresar Su
vida en la tierra. Esa era Su intención desde el mismo inicio.
“Hagamos al hombre a nuestra imagen y
semejanza, y dejémosle tener dominio sobre la tierra”.
Así que el hombre fue creado para tener la misma vida, naturaleza y
carácter de Dios, y de esta forma poseer y dominar sobre la tierra.
Pero todos sabemos lo que ocurrió: Porque
en Adán todos murieron… ¿Qué le
provocó la muerte a Adán? Cada uno de ustedes pudiera
decirme que cuando Adán escogió la fuente incorrecta para su vida,
el trajo sobre él la muerte, y de este modo la muerte pasó a toda
la humanidad, porque todos procedemos de Adán. Esto es lo que la
Palabra dice. Así que esto significa que tú no tienes ningún
control sobre esta vida de pecado y muerte cuando llegas a este
mundo. Cuando viniste de la matriz, no tenías ningún tipo de
control sobre la vida que Adán te dio. Ahora la religión nos brinda
una fotografía totalmente diferente. La religión nos dice que tú
eres un agente moral libre para escoger lo correcto y lo incorrecto;
que tienes la posibilidad para escoger tanto a Dios, como a la vida
del yo; tienes la capacidad y la libre voluntad para escoger.
Nosotros
tenemos la libertad de escoger, pero como lo veremos, nuestra
voluntad está atada a la caída de Adán.
Cuando
era un cristiano luchador con muchas ataduras en mi vida, se me dijo,
“El diablo no te lleva a hacer las cosas que tú haces. Tienes una
alternativa, y si tú escogieras hacer lo que es correcto, entonces
ello habilitaría a Dios a través de Su Espíritu para trabajar en
tu vida. Pero, tienes que hacer las decisiones correctas”. ¿Y
sabes qué? ¡Nunca hice las decisiones correctas! Frecuentemente
trate de hacer la elección correcta, pero, encontré que rara vez
tuve el poder para hacerla. Ahora se que mucha gente lo hace, pero yo
no tuve ni el carácter ni la fuerza. Deseaba a Dios,
pero también quería la vida que tenía, la cual, no era
compatible con la vida cristiana.
Sé que mucha gente vive en ese punto donde yo estaba. Pero todo lo
que me decían era, “Gary, depende de ti. Tienes la libre voluntad
para hacer la elección correcta”.
¡Entonces
un día Dios me reveló que mi elección fue hecha por
Adán! Romanos 5:12 dice, “Así pues, por medio de un
solo hombre entró el pecado en el mundo y trajo consigo la muerte, y
la muerte pasó a todos porque todos pecaron”. Ahora te tengo
que volver a preguntar otra vez: ¿Qué trajo a Adán a la muerte?
¿Qué fue lo que él hizo en el mundo que lo llevó a
morirse y me llevó a que yo muriera con él? Dios lo
colocó en un jardín con varias cosas para comer y le dio muy pocas
instrucciones. Cuando Dios creó a Adán no le dio un libro de
reglas, él tan solo le dio un par de palabras. El dijo, “De
todos los árboles en el jardín puedes comer libremente, pero el día
que comas del árbol del conocimiento del bien y del mal, morirás”.
Esto es lo que trajo muerte a la humanidad. He estado enseñando esto
por años, y todavía no tengo la total comprensión de ello; Ni
tengo todavía la plena experiencia de ello; pero te diré esto, que
la raíz de la oscuridad, y la
alienación en nuestras mentes de la vida de Dios, es el fruto de
este árbol del conocimiento del bien y del mal.
Ahora
considera: “Conocimiento
del bien y del mal”.
Piensa sobre las enseñanzas del cristianismo, o cualquier otra
religión en el mundo. ¿Cuál es la base de sus enseñanzas, si esto
no está basado en el conocimiento del bien y del mal? No
conozco religión en el mundo, incluyendo el cristianismo, que no se
base casi toda en la elección del bien y del mal. Sin embargo, Dios
dice “el mismo día, Adán, que tú comiences a comer esa fruta, el
mismo día que comiences a discernir la diferencia entre lo
bueno y lo malo, es el día que morirás”.
¿Por
qué Dios lo llamó muerte? Es porque Dios creó a Adán, El le dio
aliento, y sabemos que la palabra “aliento” es la misma que
“espíritu”, así que lo que Dios sopló en Adán fue su propia
Vida y su Naturaleza. Se
dice que había un Árbol de La Vida en el medio del Jardín, el cual
simplemente significa que Adán pudo haber escogido depender total y
únicamente de la vida de Dios que residía en él, la vida que Dios
literalmente había soplado en Adán era sencillamente todo lo que él
era. El sopló en él Su Vida energizante y
vivificante.
El sopló dentro de él Su poder, Su autoridad; Adán es un ejemplo
de todo lo que Dios quería sobre la tierra. Y Dios le dijo a él,
“No participes del conocimiento del bien y del mal, porque en el
momento que comiences a comer del fruto de ese árbol, morirás”
Serás arrancado de Mi vida. Tu conciencia será separada, y te
volverás en tu conciencia apartado de Mí, como una entidad
separada. Y empezarás, entonces, a vivir tu vida no por el
conocimiento de la vida que coloqué dentro de ti, porque será
cortada, y no tendrás nada sino un conocimiento del bien y el mal.
Lucharás toda tu vida tratando de discernir y tratando de
escoger lo bueno sobre lo malo, pero serás apartado de Mi vida. Y de
este modo tomarás esta naturaleza que está separada de
Mí, y producirás hijos en tu propia imagen. Esto es lo que ocurrió
en la caída, y eso es lo que la Biblia dice. Adán y Eva entonces
produjeron hijos de acuerdo a su imagen. Ellos perdieron la imagen de
Dios.
¿Cuál
fue la primera cosa que Jesús hizo en el día de la resurrección?
La Palabra dice en Juan 20:22 que en la tarde de Su resurrección El
se apareció. Las puertas estaban cerradas, pero, El se apareció en
medio de los discípulos, y la primera cosa que El hizo, dice, fue
que sopló sobre ellos diciéndoles, “reciban
el Espíritu Santo”.
¡Ese acto restauró de nuevo a aquellos hombres a lo que Adán
perdió en el jardín!
Jesús una vez más, de la misma forma que Dios hizo en el inicio,
sopló Su vida en ellos. 1 Co. 15:45 dice, “Cristo
fue hecho espíritu vivificante”.
Y esa es la razón por la que Jesús dijo: “Yo
soy el Pan de Vida”
¿Tú realmente quieres vivir por Dios? Entonces, tienes que aprender
como comer de Mí. ¿Realmente quieres vivir, realmente quieres Vida?
El dijo : “Como
el Padre me ha enviado, y yo vivo por El Padre, quien quiera que me
coma vivirá por Mí”.
Esa es la promesa -Si comes de Mí, si aprendes a asimilar de Mi
vida, vivirás por mí.
Esto
es lo que Pablo dijo, “No seáis como los gentiles, caminando en
la vanidad de su mente, teniendo el entendimiento oscurecido, siendo
alienados de la vida de Dios”. Ser alienado de la vida de Dios
significa que crees en tu conciencia que tú y Dios son dos entidades
separadas. Estar muerto simplemente significa que tú no puedes ni
siquiera imaginar que tú y Dios no son dos entidades, sino una.
Pero, así es como fue en el principio; Adán era una replica
completa de lo que Dios quería en la humanidad. Esa es la razón por
la que él fue llamado “el primer Adán,” y Jesús es llamado “el
segundo Adán” y “el último Adán” . Jesús
realizó aquello que Adán falló en hacer. Jesús restauró al
hombre otra vez al Árbol de la Vida. La humanidad puede una vez más
vivir por la vida de Dios, en vez de tratar de escoger lo bueno y lo
malo.
Ahora,
no solamente Adán hizo una elección fatal, sino aquí es donde El
cristianismo como un todo ha cometido el mismo error. Dentro de los
primeros años de la iglesia -de hecho aún comenzando dentro del
tiempo de la vida del apóstol Pablo-, los hombres comenzaron a
regresar atrás al conocimiento del bien y del mal, más que aprender
a como discernir y vivir a través de esa vida que fue soplada dentro
de ellos por el nuevo nacimiento. La religión nos dice esto: “Dios
te amó tanto que El envió a Su propio Hijo para morir por ti en la
cruz”. Y se nos ha dicho que por el gozo que fue puesto delante de
él, Jesús soportó la cruz. Pero, la magnitud de esa victoria, a
los ojos de los cristianos, está muy limitada, debido a que hemos
sido alimentados por dos mil años del árbol del conocimiento del
bien y el mal. “Si tú eres bueno, Dios te bendecirá; si tú no
eres bueno, Dios no te bendecirá”. La magnitud de la victoria del
Calvario, de acuerdo a los ojos religiosos, es que, sí, Jesús murió
por el mundo, El sufrió en la cruz, pero Su victoria está limitada
solamente a aquellos a quienes, primero que todo, lo
reciben como Salvador, y entonces después de esto aprenden a vivir
por Su libro de reglas.
El
libro de Efesios habla sobre el propósito eterno de Dios. El eterno
propósito de Dios es que el hombre viviera del flujo de la vida de
Dios dentro de él. Pablo menciona algunas veces en el Libro de
Efesios, especialmente en el capítulo 3, el “misterio” del
evangelio. Todos sabemos que si algo es un misterio, a veces no es
tan fácil de imaginarlo. El Evangelio es un misterio profundo y
escondido, especialmente de los ojos religiosos, especialmente de la
gente que ha sido entrenada toda su vida a discernir la diferencia
entre el bien y el mal. Ahora sé que hay un versículo en la Biblia
el cual dice que algunos han ejercitado sus sentidos para discernir
tanto lo bueno como lo malo. ¡Dice que han aprendido a discernir lo
bueno y lo malo, incluso aunque ambos son de la misma fuente! No es
muy difícil discernir el mal, pero es muy, muy difícil discernir la
verdad sobre lo bueno a veces. La verdad es que tú puedes ser muy
bueno, y todavía no tener el carácter de Dios y Su sustancia
formada en tu vida.
Si lo
que la Palabra nos enseña es verdad, así como el pecado
entró al mundo por un hombre, y a través de ese pecado la muerte
pasó a todos los hombres, entonces lo que pasó a todos los hombres
fue esa semilla que Adán tomó del árbol del conocimiento de lo
bueno y lo malo y puso dentro de él. Hemos nacido a esta vida con
esa semilla en nosotros. Sé que esto es una repetición, pero
debemos escuchar esto y claramente tener el entendimiento de ello.
Antes que el pueblo de Dios pueda comprender totalmente la
reconciliación que El quiere traer a través de ellos, ellos tienen
que entender Su corazón, por que si no entiendes el
corazón de Dios, y te llenas de Su autoridad y Su
poder, lo usarás para juzgar y no
juzgarás justamente.
Dios
esta viniendo a juzgar la tierra, pero El es un juez justo. Dios
sabía y no fue una sorpresa para Él, que Su creación iba a caer.
Todo hombre que nació por Adán fue separado en su conciencia y su
conocimiento de esa vida que estaba en su espíritu, y cada hombre
fue dejado con nada excepto el discernimiento de escoger entre el
bien y el mal. El hombre fue apartado en su espíritu del
conocimiento y la vida de Dios, y debido a ello él no tiene nada
excepto el conocimiento de lo bueno y lo malo. La gente del mundo
como un todo, ve solamente a través de los ojos de lo bueno y lo
malo, concluyendo que hay un grupo de gente buena y hay un grupo de
gente mala, imaginándose que toda la gente mala es la que necesita a
Dios, mientras que toda la gente buena se encuentra en una condición
mucho mejor. ¡Pero, escucha! A los ojos de Dios, cada hombre que
nace, nace muerto. Está alienado y separado en su mente de la vida
de Dios que está en su espíritu. Solo le queda el conocimiento del
bien y del mal.
Juan
1:9 dice que Jesús era “La
luz verdadera que alumbra a cada hombre que viene al mundo”.
Proverbios llama a la luz del hombre, el espíritu, “el candelero
del Señor”. Así que cada hombre que viene a este mundo tiene un
espíritu, tiene ese candelabro escondido profundamente en su ser ,
ese espíritu del Señor es el que necesita ser encendido. Y podemos
ir a los hombres, podemos hablarles del Evangelio; podemos
convertirlos e incluso podemos llevarlos a creer intelectualmente que
Jesús es el Hijo de Dios. Sin
embargo, entonces empezamos a enseñarles como vivir de acuerdo a la
Biblia, es decir, escoger entre lo bueno y lo malo, y por lo tanto
hemos hecho la misma cosa que Adán hizo en el mismo comienzo.
Incluso dentro de nosotros tratamos de escoger el bien y el mal, más
que aprender como contactar y vivir por El Espíritu Santo de Dios
que ha sido colocado dentro de nosotros.
¿Podemos
todos ver esto? ¡Esto es lo que está ocurriendo! No tenemos,
especialmente en la Iglesia de América, mucha gente santa que estén
manifestando la vida y el carácter de Dios a un mundo perdido y
muerto. Tenemos mucha gente buena. Y muchos de ellos piensan que
porque ellos son buenos, están bien, y están tratando siempre de
convencer a aquel que es malo de cambiar sus caminos para que Dios lo
pueda ayudar ---no dándose cuenta que el bien y el mal son del
mismo árbol. ¡Necesitamos la luz de Dios para ver esto! Ya sea,
sea buena o mala, es la misma fuente de vida que está amputada de la
vida de Dios.
Veamos
de nuevo en Efesios 4:17-18 “Esto, pues, es lo que les digo y
les encargo del Señor: que ya no vivan más como los paganos, los
cuales viven de acuerdo con sus inútiles pensamientos y
tienen oscurecido el entendimiento. Ellos no gozan de la
vida que viene de Dios, porque son ignorantes a causa de lo
insensible de su corazón”. Esta
es la situación hoy. Tenemos gente alrededor de todo el mundo que
han sido regenerados por el Espíritu del Dios Viviente, que no han
aprendido nunca otra cosa que la diferencia entre lo bueno y lo malo.
Regresemos
y echemos una mirada de nuevo al Calvario. Dios se dio cuenta que por
causa de Adán, toda la humanidad se levantaría con un concepto de
conocer únicamente lo bueno y lo malo. Y Él sabía que esto era
absolutamente desesperanzador. Pablo le dijo a los efesios que antes
de Cristo, ellos estaban alienados. No eran miembros de la misma
familia. Pero, a través de la cruz, Dios colocó en UNO tanto al
judío como al gentil. Ahora, uno tiene que entender la mentalidad de
aquellos días, la cual era que el judío era muy piadoso y el gentil
era impío. Así Pablo dice que Dios por una ofrenda puso a ambos al
judío y al gentil dentro de un cuerpo, trayendo paz por ello. La
Palabra dice que Jesús era “El
cordero de Dios matado desde la fundación del mundo”.
La pregunta que tenemos que hacer -y este es un punto difícil de
aceptar: ¿Está la magnitud de la victoria del Calvario limitada
solamente a aquellos que están en capacidad de escoger lo bueno
sobre lo malo?
Yo
cuestioné a Dios por años sobre esto, antes que entrará al
entendimiento que estoy compartiendo contigo. ¡Cuestionaba a Dios,
porque estaba muy lleno de la lujuria de la carne, como una persona
joven, e incluso como cristiano! Yo amaba a Dios. Acostumbraba a
llorar en la noche sobre mi condición. Pero yo deseaba las cosas de
este mundo. Quería todas las cosas que suponía no debía querer. Y
pasé por el infierno en la tierra como un hombre viviendo a un nivel
pleno, la experiencia de Romanos capítulo 7. Y la única razón por
la que atravesé esto es por causa de tener un entendimiento
oscurecido, siendo alienado de la vida de Dios que está en nosotros,
debido a la ceguera que hay en nuestros corazones. Tenemos que darnos
cuenta la magnitud de la victoria del Calvario. La Proclamación de
la Emancipación de la cruz del Calvario dice que tú no eres
culpable.
Estás
viviendo tu vida por el conocimiento del bien y el mal si no
eres uno que tiene la habilidad y que has aprendido a ejercitar tu
ser espiritual para que de esta forma puedas vivir por la vida de
Dios. No importa que tan bueno seas, o que tan malo seas, tu fuente
de vida procede todavía del lugar equivocado. A los ojos de Dios, no
hay diferencia. En el hombre o mujer que no está viviendo por la
vida de Dios, no hay diferencia entre lo bueno y lo malo. Viene todo
del árbol errado. Y todo lo que hemos tenido por dos mil años, en
el cristianismo, es enseñanza religiosa, tratando de enseñarnos
como ser santos, tratando de enseñarnos y advertirnos como escoger
lo bueno sobre lo malo.
Tenemos
que leer otra vez Romanos 5:12-21. Tú ves, Dios entiende nuestra
condición; nosotros no. Debido
a nuestras tradiciones religiosas, pensamos que merecemos toda la
culpa, merecemos toda la vergüenza. Pero yo no pedí nacer teniendo
toda la lujuria y deseando todas las cosas incorrectas. Yo no pedí
eso. Ese fue el regalo de Adán para mí. Y por consiguiente debido a
que Adán cometió un error, la religión me dice que vine a este
mundo establecido y lleno con el carácter y la naturaleza que ama
pecar, o quizás soy afortunado y he nacido con un carácter el cual
es bueno. Pero la religión me dirá que porque he heredado una vida
que ama al pecado, y ama hacer todas las cosas que se supone no deba
hacer, yo en alguna parte tengo que encontrar dentro de mí mismo el
poder para derrumbar eso y escoger vivir correctamente, a fin de que
Dios me pueda bendecir y yo pueda algún día morir e ir al
cielo. Con todo, la primera cosa que dijo Juan de Jesús
fue “Contemplad
al Cordero de Dios que quita el pecado del mundo”.
¡Te puedo testificar que si no puedes vencer el pecado no importa
cuán fuerte trates, si continuas buscando a Dios, El finalmente
crecerá dentro de ti, y tú vencerás! La vida cristiana no es un
asunto de fuerza de voluntad, sino un asunto del Espíritu de Dios
fluyendo en cada área de tu ser y eso toma tiempo. Somos como recién
nacidos y demorará en alguno de nosotros muchos años ser
transformados.
La
Iglesia no es un lugar feliz hoy. ¿Por qué? Porque estamos bajo
demasiada culpa y condenación. Cuando nos reunimos juntos, hay
tiempos cuando irrumpimos y tocamos el Espíritu de Dios, y hay algo
de regocijo, pero es tan limitado, porque cuando tienes el más
insignificante, y quiero decir el más insignificante, pedazo de
culpa en tu conciencia, te separa y no puedes abrirte paso al
Espíritu de Dios. La primera cosa que Juan dijo fue: “¡Contemplad
al Cordero de Dios que quita el pecado del mundo!”
¿No dijo él eso? Si eres religioso, tú dirás que él lo hizo pero
no lo creerás, porque tu concepto religioso dice “Si, El quito el
pecado del mundo, pero solamente para aquellos que dicen, “Jesús,
te recibo”, o solamente para aquellos que aprenden a vivir y
escoger lo bueno sobre lo malo”. El Calvario es solo beneficioso
para aquellos que sepan hacer decisiones correctas – ¡eso es lo
que la religión nos enseña! Y
así tenemos multitud de personas alrededor del mundo que
genuinamente han sido regeneradas por El Espíritu de Dios, pero no
han sido enseñadas sobre como vivir por la vida de Dios que está en
ellas. Todo lo que les ha sido enseñado es como escoger lo bueno
sobre lo malo. Y cuando tú haces eso, te aliena de la vida de Dios
en ti, y te conviertes como un no creyente, teniendo tus
ojos enceguecidos.
Ves,
un no creyente no tiene conciencia, ni conocimiento absoluto de que
ellos tienen el Espíritu de Dios en ellos, pero si has sido
regenerado, tendrás esa conciencia (???).¡Por
momentos sentirás el fluir de Dios, pero debido a tus conceptos,
cuando pecas, ello provocará un bloqueo, y por la culpa no podrás
entrar a la presencia de Dios! La única gente que entra en la
presencia de Dios y vive, es aquella que sabe como no sentirse
culpable. Mientras estés en la carne, te puedo garantizar que cada
día de tu vida vas a errar y perder a Dios (???).
Desde 1.969 ansiosamente, cada día de mi vida, he buscado y estado
hambriento de Dios. En 1.969, cuando tuve la experiencia de ser
tomado a los lugares celestiales y de experimentar a Dios fluyendo en
mí, me volví extremadamente hambriento por Dios. Y he dedicado
literalmente cientos de cientos de horas sobre mi rostro y la
Palabra de Dios, a buscar y tener hambre de Dios. He sido una de las
personas más hambrientas de Dios, aunque todavía cometo
equivocaciones cada día. Es porque aún no he aprendido como vivir
plenamente por la vida de Dios. Y,
de hecho, no es un asunto de aprender. Es un asunto de la
vida creciente de Dios, es un asunto del Espíritu de Dios madurando
dentro de mí. Es un asunto de buscar, cada día de mi vida, no algo
que está en un cielo distante, sino eso que esta dentro de mí.
Aprendiendo como contactar la realidad del Espíritu, el espíritu
energizante, vivificante de Dios, así cada día podré entrar dentro
de Su presencia y festejar con el maná espiritual (Creemos
que existe una experiencia definitiva que rompe el velo -no
simplemente energizante-, a partir de la cual ya no es cuestión de
entrar y salir de Su presencia, sino de vivir en ella sin salir.
Creemos que esta experiencia se produce con el Paso del Jordán; es
decir, con las experiencias de muerte sepultura y resurrección.
Véase
http://txemarmesto.blogspot.com.es/2010/11/ungido-para-la-sepultura-de-oruga.html
y
http://txemarmesto.blogspot.com.es/2012/01/las-experiencias-de-cruzar-los-dos.html
y si quisiera abundar más la Etiqueta del blog
“Quebrantamiento-Cruz-Rotura del Velo-Noche del Espíritu”).
Desde esa experiencia, estoy un poco más energizado y avivado y
capacitado para caminar en la vida de Dios. Pero, cuando comienzo en
mi conciencia a escoger lo bueno sobre lo malo, estoy separado en mi
conciencia de Dios, alienado de esa vida. Y soy dejado otra vez como
Adán fue, luchando alrededor, en oscuridad tratando de escoger lo
bueno sobre lo malo, tratando de poner a mi carne en raya.
Jesús
dijo, “Cualquiera
que venga a mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame”.
Pero, esto ha sido tan mal entendido en la Iglesia, debido a que no
hay forma de que Adán, tu hombre carnal, pueda ponerse a muerte por
el mismo. ¡No puede ser hecho! Y esto es la razón por la que el
apóstol Pablo dijo en Romanos capítulo 8 que si tú a través del
espíritu pones a morir las obras de la carne, vivirás. La vida
cristiana es totalmente una vida de aprender como, a través del
espíritu, vivir santamente. Nunca lo lograrás a través de tus
propias fuerzas. No vivirás lo suficiente para aprender como vivir
santamente. Todo lo que lograrás es ser condenado porque no lo
puedes alcanzar. La carne no puede vivir santamente.
¡Simplemente
necesitas contemplar al cordero que quita el pecado del mundo!
Tú
no tienes absolutamente ningún problema con Dios excepto en tu mente
religiosa. La gente de Dios tienen dificultad en creer la bondad y
belleza de Dios, porque sentimos que tenemos que ser justificados en
Su Vista por lo que hacemos, más que por lo que Él ha hecho. Sin
embargo, puedo ir a cualquiera en la calle, puedo ir a una prostituta
en los barrios bajos y puedo decirle a ella,
“Señora, Ud. no tiene absolutamente ningún problema con Dios”.
Y te garantizo que cuando comience a hablar de esta forma, las
palabras que fluyan de mi boca comenzarán a generar en ella. Le diré
a ella, “Pequeña dama, llegará un día en su vida cuando revelará
y manifestará plenamente al mundo la gloria de Dios” ¡Vendrá ese
día!
Otro
versículo que necesitamos observar dice que el último enemigo a ser
destruido es la muerte. ¿Cuál es el concepto de la muerte?
Significa no vivir a través de Su Vida, sino por la vida de lo bueno
y lo malo. El concepto que Dios tiene sobre la muerte es el de tener
una conciencia separada de Él. Si estás separado de Dios, entonces
estas muerto; así que el último enemigo, la muerte, sea destruido
significa que no habrá nada, en ninguna parte, en ningún lugar que
no esté reconciliado con Él porque si hubiera cualquier lugar en el
universo, que no este reconciliado con Dios, entonces estaría en la
muerte.
Todos
ustedes van a tener que soportar conmigo en lo que vamos a continuar,
porque puede tomar un largo tiempo enseñar y revelar todos las malas
interpretaciones en las doctrinas que hemos aprendido. Y voy a tocar
una de ellas ahora, el tema del infierno.
Cubriré esto con más detalle en la medida que avanzamos en este
trabajo.
Hay
muchos otros autores que han cubierto este tema en la luz verdadera
de la naturaleza de Dios, y sería feliz al recomendártelos.
La
mayor pregunta en la mente de la gente es la pregunta del infierno y
la enseñanza aparente en Apocalipsis sobre el tormento eterno
del infierno. Déjame darte solo un pequeño concepto de lo que el
infierno es. El infierno es un lugar literal. El infierno es un lugar
que probablemente la mayoría del mundo, e incluso probablemente la
mayoría de los cristianos, van a experimentar de una
forma u otra. Déjame darte un ejemplo del infierno. ¿Usted recuerda
hace pocos años cuando el hombre que conducía el más grande
ministerio que el mundo alguna vez haya visto, confesó públicamente,
ante el mundo, su pecado? Ese hombre se encontró en el infierno. No
solamente estuvo en el infierno porque él fue atrapado y tuvo que
confesar públicamente, sino que sufrió por las opiniones de los
demás especialmente de los cristianos. Y quiero que sepas que cuando
escuché por primera vez sobre este asunto, Dios me reveló a mí el
corazón de Jimmy Swaggart. El me mostró un hombre que no era
hipócrita, como el mundo y como la mayoría de los
cristianos asumían, sino que el estaba
atrapado en la red del conocimiento del bien y el mal. El tenía el
más grande ministerio que el mundo alguna vez haya
conocido, y probablemente haya hablado a más gente que cualquier
otro hombre en ese tiempo, pero su mensaje era muy crítico
y enjuiciador. Si alguna vez escuchaste a Jimmy predicar,
tú sabes que él era un predicador del infierno de fuego y azufre.
¿Por qué? No porque él era un hipócrita, sino porque él odiaba
tanto lo que él había heredado a través de Adán, y él luchaba
desesperadamente con esa cosa. El no quería que nadie sufriera
alguna vez lo que él sufría: y no entendía, ni siquiera sabía, lo
extenso del amor de Dios.
Hay
un libro que escribí llamado Saliendo de la Condenación. Justo
después de que esto le ocurriera a Jimmy, Dios me reveló a mí que
él necesitaba intercesión. Sollocé y gemí y sufrí por ese
hombre. Sentía sus sufrimientos. Sentí su agonía. Y Dios me dijo
“es tiempo de que Mi pueblo entienda que ellos no necesitan sentir
condenación” (escribí el libro y por favor obtenga uno, no porque
yo lo escribí, sino porque te puedo garantizar, también, que sufres
de condenación y necesitas leer ese libro). Y Dios me dijo, “Escribe
el libro, y envíaselo a Jimmy Swagggart”. Y por supuesto, tú
sabes como todos pensamos. Yo pensé, “Bueno, tú sabes, él tiene
un ministerio tan grande, y él está en el medio de esto; ¿Cómo
podré yo darle el libro alguna vez? Sin embargo, yo solo lo dirigí:
“Jimmy Swaggart, Baton Rouge, Louisiana”, y se lo
despaché. En los siguientes días, recibí una carta de Jimmy
agradeciéndome por enviárselo.
Te
diré, Cristiano, tú simplemente no has sido atrapado. Ahora me doy
cuenta que en Adán, en nuestro carácter natural, hay algunos que
son muy fuertes de voluntad, y que son capaces por propio esfuerzo de
ser muy buenas personas. Sin embargo, te condenarán de forma
vehemente, porque no eres capaz de hacer lo que ellos hacen. Y
predicarán un infierno de fuego y azufre para ti y tendrán tus
orejas humeando.
Sin embargo, Dios ha posicionado hombres y mujeres sobre toda la
tierra quienes entienden lo que estoy diciendo. El juicio esta
viniendo, y creo que esta viniendo rápidamente. El infierno esta
viniendo a la tierra. La vehemente indignación esta viniendo a la
tierra en un juicio justo, pleno. Los fuegos de Dios están viniendo,
y la Palabra dice que nuestro Dios es un fuego consumidor. He sido
juzgado por ese fuego muchas veces. ¿No piensas Tú que
Jimmy Swaggart pasó por un fuego? ¿Puedes
imaginarte como sería si tú tuvieras tus pecados más
profundos revelados ante el mundo? ¿Qué tal incluso a tu
familia? (ahora yo sé que esto no es todavía verdad para todos
nosotros. En este mismo momento yo no tengo un problema
como ese, pero años atrás, sí. Habría sido absolutamente
humillante haberle expuesto al mundo mi pecado).
Además
sabes que Apocalipsis dice que habrá un día que viene cuando todos
compareceremos ante Dios y los libros serán abiertos. ¿Tú sabes
cuál es ese libro? Pablo dice que somos unas epístolas abiertas,
escritas no con tinta, sino con El Espíritu del Dios Vivo. Cada uno
de nosotros es un libro.
Está llegando un día para cada uno cuando sus libros serán
abiertos. Pero, permíteme decirte algo: ¡El fuego de Dios, los
juicios de Dios no son nunca vengativos! Nos han enseñado una
doctrina de castigo eterno. Les proveeré de más detalle adelante.
Como se desarrolló el concepto de castigo eterno. Te diré que se
inició básicamente con La Iglesia Romana. Comenzó
por hombres, liderazgo en la Iglesia, quienes querían producir miedo
dentro de los corazones de la gente de Dios. Sabemos que La Biblia
dice que el perfecto amor expulsa todo temor, pero sin embargo las
iglesias, casi en todas partes, en todas las denominaciones y en
todas las sectas, tienen dentro de su Evangelio y su enseñanza, el
miedo.
Si necesitamos temer algo, es la vida carnal del yo que nos mantiene
separados en nuestra mente de la vida de Dios en nuestro espíritu.
Tú
has escuchado esta expresión: “Sí tu realmente amas a alguien o
algo, déjalo ir”, déjalo ir, porque si tú tratas de retenerlo,
si lo mantienes en cautiverio, no habrá amor genuino fluyendo. La
gente de Dios necesita ser libertada. ¡Mirad al Cordero de Dios que
quita el pecado del mundo! Si
el concepto religioso es verdad, la victoria en el Calvario fue una
muy, muy pequeña y muy limitada victoria. Si, el concepto religioso
es verdad, cuando toda esta cosa desaparezca, van a ver muy pocos del
lado de Dios, pero el demonio va tener las masas de la humanidad. Eso
no es una victoria grandiosa. Incluso el sentido común nos dice eso.
Dios
sabía que cuando el te trajo a ti a la vida ibas a estar
separado y alienado en tu mente de Su vida, y hay gente que vive
setenta o cien años y por una razón u otra, ellos nunca han
escuchado a nadie predicarles el verdadero Evangelio a ellos. ¡Oh,
ellos escuchan solo el evangelio religioso! Pero ellos no quieren
eso. Ellos no quieren escuchar. Tú tienes que cambiar tu vida. ¡Sí
quieres ser utilizado por Dios, no puedes hacer eso! ¿Quieres las
bendiciones de Dios? ¡No puedes hacer eso! Ellos no quieren escuchar
eso, porque ellos son como tú, ellos son egoístas. El yo quiere lo
que el yo quiere. Pero cuando Dios regenera tu espíritu, entonces tú
comienzas a querer las cosas de Dios.
Si la
gente comienza a darse cuenta de la grandeza del amor de Dios, ellos
se dirigirán a ÉL. Puedes imaginarte que es lo que
significaría para una prostituta entrar a una iglesia
donde todo el mundo sabe que ella es una prostituta, ¿Ellos aún la
amarían, la ministrarían y la dirigirían dentro de la adoración?
¿Puedes imaginarte cuanto tiempo sería una prostituta? (e incluso
sí ella lo fuera, ese es problema de Dios y no tuyo). ¿Tienes
suficiente convicción en tu conocimiento de Dios y en las palabras
que tú hablas para creer que tú le puedes hablar vida a ella?
Porque sino puedes, ella no necesita tu iglesia. Si ella solamente
escucha como necesita cambiar su vida y limpiarse ella misma, eso
resulta inútil. Ella no puede. Ella no necesita escuchar eso. Si tú
la amarás y le ministrarás vida a ella y no la letra de la Ley,
ella comenzaría a crecer y cambiar.
Vamos
a (Ro. 5:12-21) “Así pues, por medio de un solo hombre entró el
pecado en el mundo y trajo consigo la muerte, y la muerte pasó a
todos porque todos pecaron. Antes que hubiera Ley, ya había pecado
en el mundo; aunque el pecado no se toma en cuenta cuando no hay Ley.
Sin embargo, desde el tiempo de Adán hasta el de Moisés, la muerte
reinó sobre los que pecaron, aunque el pecado de éstos
no consistió en desobedecer un mandato, como hizo Adán, el cual fue
figura de aquel que había de venir. Pero el delito de Adán no puede
compararse con el don que Dios nos ha dado. Pues por el delito de un
solo hombre, muchos murieron, pero el don que Dios nos ha dado
gratuitamente por medio de un solo hombre, Jesucristo, es mucho mayor
y en bien de muchos. El pecado de un solo hombre no puede compararse
con el don de Dios, pues por un solo pecado vino la condenación,
pero por el don de Dios los hombres son declarados libres de sus
muchos pecados. Pues si la muerte reinó como resultado del delito de
un solo hombre, con mayor razón aquellos a quienes Dios, en su gran
bondad y gratuitamente, declara libres de culpa, reinarán
en la nueva vida mediante un solo hombre, Jesucristo. Y así como el
delito de Adán puso bajo condenación a todos los hombres, así
también el acto justo de Jesucristo trajo a todos los hombres una
vida libre de condenación. Es decir, que por la desobediencia de un
solo hombre, muchos fueron hechos pecadores; pero de la misma manera,
por la obediencia de un solo hombre, muchos quedarán libres de
culpa”.
¿Cómo
podemos separar aquellos dos? ¿Cómo podemos decir “En Adán todos
ellos murieron, pero en Cristo no todos van a ser avivados?
Preferiríamos leer que “la condenación fue para todos los
hombres, así que el resultado de un acto de justicia fue la
justificación para aquellos quienes recibieron a Jesús y comenzaron
a caminar en obediencia a Sus mandatos”. No dice eso. Y yo sé que
suena correcto. ¿Qué es lo que estoy diciendo? ¿Tengo yo la
libertad de vivir de cualquier manera que yo desee vivir? ¿ Me estás
diciendo que yo puedo hacer cualquier cosa que yo quiera y que
finalmente yo voy a estar todavía bien? Si tú actitud es, “si lo
que me estas diciendo es verdad, entonces voy a vivirlo”, entonces
mi respuesta a ti es esta: tú no conoces a Dios, y desesperadamente
necesitas ser salvo. Pero te diré esto. No tienes una voluntad
libre. Adán se encargo de esto por ti, y el ató a la raza humana en
la voluntad de la carne. No tienes una libertad verdadera. Podemos
obtener libertad en nuestra voluntad solamente aprendiendo como
contactar y mantener compañerismo con Dios en nuestro espíritu.
Dedicando tiempo a la Presencia de Dios, y aprendiendo a vivir allí,
Su Espíritu fluirá dentro de nuestra voluntad natural y la
transformará en la Suya.
Los
Pentecostales aman decir, “estamos llenos con el Espíritu Santo”.
Bien, déjame decirte algo: Si tú estás lleno con el Espíritu
Santo, serás una persona santa. Pero tú no puedes ser de esa forma
esforzándote por ser de esa forma. Tratar de hacer las cosas
correctas, no funciona. Si eres lleno del Espíritu Santo serás
controlado, movido y motivado por El Espíritu Santo. Pero no puedes
trabajar para ello. No puedes “vivir correctamente” por ti mismo.
Tú no puedes escoger lo bueno sobre lo malo porque eso te pone en
las obras de la carne. Tratar con la naturaleza de Adán para escoger
lo bueno sobre lo malo te pone en la categoría de estar alienado en
tu mente de esa vida que está en tu espíritu. No lo puedes hacer de
esa manera.
“Como
resultado de aquel que pecó vino la condenación a todos los
hombres, así el resultado de un acto de justicia fue justificación
que trae vida a todos los hombres”,
¿Así, puedes vivir de cualquier forma que tú quieras? Sí. Pero
aquí está el problema. Tú vas a pasas por el infierno de una forma
u otra. Dios tiene un plan desde el mismo comienzo para cada ser
humano que ha nacido, y esto es el porqué yo he
compartido tan frecuentemente que la Palabra dice que hemos sido
escogidos en Él antes de la fundación del mundo para ser santos y
sin mancha ante Él en amor. Este es el Diseño de Dios, este es Su
Plan, y este es Su Propósito, y tu pequeña voluntad no puede parar
el propósito de Dios para tu vida. ¡Absolutamente, imposible! Yo no
he hecho otra cosa en mi vida que maldecir a Dios. Le he dicho
“déjame solo”. “No lo puedo hacer más”. “No lo voy hacer
nunca más”. Y Dios solo dirá: “Demasiado malo, es demasiado
tarde para ti. Tú te consagraste a mí y no hay regreso atrás”.
Ves,
la enseñanza de la religión se ha vuelto confusa entre “voluntad”
y “elección”. Tu voluntad está atada a Adán, y no eres un
agente moral libre. Tú estás amarrado a esa voluntad de la carne.
Pero tú puedes escoger hacer lo que es correcto. Ahora otra vez.
Esto suena como el hombre en Romanos 7, el cual
escoge hacer lo que es correcto, pero encuentra en sus
miembros otra ley, luchando y trayéndolo dentro de la esclavitud de
la carne. Pasaremos por esa lucha. Esto es lo que pasa cuando escoges
vivir por el conocimiento del bien y del mal.
Otra
forma de mirar esto es a través de la ley de siembra y cosecha. La
magnitud de Dios en el Calvario quitó el pecado del mundo, así que
tú no tienes ningún problema con Dios, pero si tú siembras en la
carne tú cosecharás corrupción en la carne. Si tú estás en la
carne, y tú has estado cosechando en la carne, la
respuesta para ti es no tratar de escoger lo bueno sobre lo malo. La
respuesta para ti es aprender como alimentarte con comida espiritual.
Otra vez, como Jesús dijo, “Si tú aprendieras a comer de Mí, tú
vivirás por Mí.”
He sido tan atrevido en hacer una declaración mas allá que muy
pocos han estado en capacidad de entender. El dijo “Si
tú comes la comida que te yo doy, nunca morirás”,
y Él no estaba hablando de muerte espiritual, El dijo tus padres
comieron maná en el desierto, y ellos murieron. Él estaba hablando
obviamente sobre la muerte física. Pero Él dijo: “Si
tú comieras el Pan De Vida, no morirás”.
Tú puedes decir, “No he visto muchos ejemplos de eso”, te diré.
Hay hombres y mujeres sobre toda la tierra -que tú probablemente
nunca hayas conocido- quienes aprendieron a comer el Pan de Vida y
nunca han muerto.
No
estoy hablando sobre algunos “maestros ascendidos” o alguna de
las enseñanzas de la Nueva Era; estoy diciendo que Dios tiene gente
en la tierra que han aprendido “¿Cómo?” y están aprendiendo
“¿Cómo?”, comer El Pan de Vida. Ellos nunca morirán. Ellos
están listos para desatar (libertar) a toda la creación, y ellos
están a punto de comenzar a traer reconciliación y restauración a
toda la creación de Dios. La cosa más, más triste es que todo
el cristianismo va estar en un alboroto por un grupo de gente
manifestando la hermosura de Dios y los atributos de perdón y
reconciliación.
¿Conoces
lo que la Iglesia está esperando? La Iglesia está esperando por la
restauración de la Iglesia Apostólica, diciendo, “Mejor sean
cuidadosos, santos, porque los días de Ananías y Sáfira están
regresando de nuevo a la Iglesia”. ¿Cuántas veces has tú
escuchado eso recientemente? Si estás motivado a servir a Dios desde
el miedo, te encontrarás a ti mismo en el árbol del conocimiento
del bien y el mal. He cuestionado a Dios mucho, y deseo que el pueblo
de Dios aprenda a hacer esto. (No tengas miedo de cuestionar a Dios.
No tengas miedo de cuestionar la Palabra. Fuimos enseñados en el
Cristianismo, “!Oh, no cuestiones! Simplemente toma lo que el
hombre de Dios diga. No cuestiones a Dios”. ¡Por favor, te ruego,
necesitas retar a Dios! (El ama revelarte Sus secretos). Sin embargo,
todos nosotros necesitamos que nuestros conceptos de Dios sean
drásticamente cambiados. Nuestro país, América, no ha rechazado a
Dios; ellos han rechazado un Cristianismo que les ha dado a ellos un
concepto tan bajo de quien es Dios. Esa es la razón por la que ellos
rechazan ese concepto. Rechacé a Dios por veinte años. No he tenido
el concepto “cristiano” de Dios en veinte años. Soy un
cristiano, pero ese concepto te mataría. ¿Cómo pudieras ser un
reconciliador si tú sientes que la gente tiene que escoger el bien
sobre el mal? ¿Como puedes tú ayudar a alguien quien está
constantemente escogiendo el mal? No puedes ayudarlo a no ser que
entiendas el corazón de Dios, y puedas ser un reconciliador.
Los
reconciliadores de Dios están sobre la tierra. Él los va a desatar,
y ellos irán a las iglesias, a todas partes, trayendo reconciliación
y revelando a la gente de Dios el corazón del Padre.
¡Ese día llegará y gracias a Dios pronto! Pero si es este otoño o
el próximo, sé que está viniendo rápidamente. Tiene que ocurrir
pronto porque hay mucha revelación, y está viniendo mucho a la
iglesia que nos está hablando del corazón de Dios.
Todo lo
que ha sido escrito anteriormente puede ser resumido muy simplemente:
Dios
verdaderamente ama a la humanidad, y Él no espera que tu escojas el
bien sobre el mal, porque Él sabe que no puedes. Lo que necesitas es
descubrir el tesoro de Su vida en nosotros y aprender a vivir a
través de esa vida.
“Porque
Dios quien ordenó a la luz brillar en la oscuridad, ha
brillado en nuestros corazones, para dar la luz del conocimiento de
la gloria de Dios en la cara de Jesucristo. Pero tenemos este tesoro
en vasos terrenales, para que la excelencia del poder pueda ser de
Dios, y no de nosotros”
(2 Co. 4:6-7)
Gary
Sigler
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