01 de junio 2015
La
estructura del libro de Daniel se presenta en un quiasma típico
hebreo o paralelismo, donde los capítulos se mueven a un clímax y
luego vuelven a salir en un patrón inverso. El quiasma en
Daniel muestra que Daniel 6 corre paralelo a Daniel 3.
A.
El cautiverio de Judá (Capítulo 1)
B.
El sueño de Nabucodonosor, (Capítulo 2)
C.
Compañeros de Daniel en el horno de fuego (Capítulo 3)
D.
El primer rey de Babilonia (capítulo 4)
D.
El último rey de Babilonia (capítulo 5)
C.
El mismo Daniel en el foso de los leones (capítulo 6)
B.
El Sueño y la visión de Daniel (capítulos 7, 8)
A.
Las desolaciones de Jerusalén (capítulos 9-12)
De
esto vemos que con el fin de comprender Daniel 6, debemos estudiarlo
junto con el tercer capítulo. La principal diferencia es que
los tres amigos de Daniel en el capítulo 3 son echados en el horno
de fuego por orden del rey de Babilonia, mientras que en el capítulo
6 el propio Daniel es arrojado al foso de los leones por orden del
rey persa.
Tal
vez la profecía más notable en Daniel 6 es el hecho de que
había sido arrojado al foso de los leones después de la caída de
Babilonia. Si bien esto puede esperarse cuando vemos a Persia
como el segundo reino de la bestia, normalmente no esperamos que
tal evento ocurra en nuestro tiempo después de la caída de Misterio
Babilonia.
Sin
embargo, ya hemos visto un doble papel que se estaba reproduciendo
con Medo-Persia (en la época de Daniel) y los reyes del oriente (en
nuestro tiempo). Isaías 44, 45 profetiza que el rey Ciro de
Persia sería un "Mesías" que liberaría al pueblo y daría
órdenes para reconstruir el templo de Dios. Sin embargo, su
papel como "Mesías" fue limitado como un tipo profético,
y al final, Persia fue sólo el segundo imperio de "los tiempos
de las naciones".
Al
final de la edad, los reyes del oriente son agentes de Dios en el
derrocamiento de Misterio Babilonia y financian el templo del Nuevo
Pacto de Dios. Sin embargo, aun así, todavía son reinos
terrenales derrocando al sistema
monetario basado en la deuda occidental. Como
entidades carnales, son capaces de ser engañados para que persigan a
los vencedores, como Darío se vio obligado a tirar a Daniel al foso
de los leones.
¿Qué
nos dice esto acerca de las condiciones en el fin del mundo?
Persecución
en el Fin de los Tiempos
Daniel
representa a los santos del Altísimo, a quien se pasará el dominio
cuando "los tiempos de las naciones" hayan pasado ( Daniel
7:27 ). Así
que Daniel fue nombrado el comisario superior en el régimen de Darío
( Daniel
6: 3 ). En
nuestro tiempo, llegamos al final del dominio de Misterio Babilonia
hacia el final de 2014,
y luego la corte divina falló a favor de los santos del Altísimo
según Daniel
7:22.
Sin
embargo, un fallo en la corte divina es distinto de las sentencias de
los tribunales terrenales. Por otra parte, los tribunales de los
hombres normalmente no reconocen las resoluciones de la corte
divina. Cuando la profecía de la caída de Babilonia al final
de su mandato de 70 años de gobernar se cumplió, Jeremías
50:33 nos
dice específicamente que "se
han negado a dejarlos ir".
Es decir, Babilonia se negó a liberar al pueblo de Judá.
De
hecho, si cualquiera de los imperios bestia hubieran cumplido con las
sentencias judiciales divinas en todo el pasado, no habría habido
necesidad de que sus sucesores los derrocaran por la fuerza. Su
derrocamiento violento fue el resultado de su incumplimiento de las
sentencias judiciales divinas, puesto que Dios levantó a otras
naciones para hacer cumplir Sus decretos.
Así
es hoy, una vez más. Misterio Babilonia también se ha negado a
liberar a la gente en su fecha límite del 16 de octubre de 2014. Y
así, los reyes del oriente están llamados a hacer cumplir, lo que
significa que habrá
un "terremoto" financiero y político, una vez más,
como fue profetizado en Apocalipsis
16 : 18, 19.
El
punto es que los reyes del oriente de Apocalipsis
16:12 son
designados como agentes de Dios para derrocar Misterio Babilonia en
los versículos 18 y 19. Al mismo tiempo, los santos del Altísimo
les ha dado el mandato de dominio sobre la tierra. Así
que hay tanto una autoridad carnal y otra espiritual operando
simultáneamente, al menos por una temporada. Es durante esa
temporada que los santos (representados por Daniel) deben ir al foso
de los leones de alguna manera por el decreto de los reyes del
oriente. Como
veremos, este decreto vendrá por el engaño, porque el mismo Darío
no quería llevar a cabo el decreto. Su mano se vio obligada por
el hecho de que el rey estaba obligado por la ley en una Monarquía
Constitucional. Si hubiera sido Babilonia, que fue gobernada por
una monarquía absoluta, podría haber cambiado la ley a su
antojo. Pero Darío no era Belsasar, ni Babilonia era Persia.
La
Trama
4 Entonces
los funcionarios y sátrapas empezaron tratando de encontrar un
motivo para acusar a Daniel en lo que respecta a los asuntos de
gobierno; mas no podían hallar ningún motivo de acusación ni
evidencia de corrupción, por cuanto él era fiel, y ninguna
negligencia o corrupción se encontraba en él. 5 Entonces
estos hombres dijeron: "No hallaremos ningún motivo de
acusación contra este Daniel a menos que la hallemos contra él en
relación con la ley de su Dios".
Después
de no haber encontrado evidencia de corrupción en Daniel, los
conspiradores concluyeron que tendrían que acusarlo por motivos
religiosos, es decir, "con
respecto a la ley de su Dios".
Tales acusaciones siempre se pueden organizar en un sistema bestia,
porque las leyes de los hombres siempre van a encontrar alguna
contradicción con las leyes de Dios. En Daniel 3 los tres
vencedores fueron arrojados al horno de fuego porque se negaron a
inclinarse ante la imagen del rey. Como esclavos del imperio,
podían cumplir con la mayoría de los decretos del rey, pero cuando
el rey decretó que todos los funcionarios del gobierno debían
violar directamente el primer mandamiento, no podían cumplir con la
ley del rey.
En
Daniel 6 nos encontramos con una situación similar, donde, como
veremos, el rey prohibió toda oración. En el libro de los
Hechos, los apóstoles se les ordenó dejar de enseñar o hablar en
el nombre de Jesús ( Hechos
4:18 ). Pero
en Hechos
4:19, 20 leemos:
19 Entonces
Pedro y Juan, respondiendo, les dijeron: "Juzgad si es justo
delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios, que es el
juez; 20 porque no podemos dejar de hablar de lo que hemos
visto y oído".
Hay
una línea que no se puede cruzar. Podemos llevar a cabo malas
políticas que tienen el mandato de los hombres en la autoridad, pero
cuando nos dicen de adorar a otro dios o desobedecer al Dios
verdadero, entonces es mejor obedecer a Dios antes que a los hombres.
Así
los acusadores de Daniel formularon un plan para meterlo en problemas
con el nuevo gobierno al enfrentar la ley del hombre contra la ley de
Dios. Daniel
6: 6-9 dice,
6 Entonces
estos funcionarios y sátrapas vinieron de común acuerdo al rey y le
hablaron de la siguiente manera: "El rey Darío, para siempre
vive. 7 Todos los comisionados del reino, los prefectos y
los sátrapas, los altos funcionarios y los gobernadores han acordado
por consejo que el rey debe establecer un estatuto y hacer cumplir
una orden judicial, que cualquier persona que haga una petición a
cualquier dios u hombre fuera de ti, oh rey, durante treinta días,
sea echado en el foso de los leones. 8 Ahora, oh rey,
confirma el mandamiento judicial y firma el documento de manera que
no se pueda cambiar, de acuerdo con la ley de los medos y los persas,
que no puede ser revocada". 9 Por lo tanto, el rey
Darío firmó el documento, esto es, la medida cautelar.
Tenga
en cuenta que este documento "no se podía cambiar", y
también "no podía ser revocada". Se basaba en la santidad
de la ley de contratos, y en su Monarquía Constitucional, incluso el
rey estaba obligado por la ley y no podía alterarla una vez que
fuera firmada. La trampa se tendió.
10 Y
Daniel, cuando supo que había sido firmado el documento, entró en
su casa (ahora en su sala de la terraza que tenía ventanas abiertas
en dirección a Jerusalén); y continuó orando y dando gracias
delante de su Dios de rodillas tres veces al día, como lo había
hecho anteriormente. 11 Pero aquellos hombres vinieron de
común acuerdo y encontraron a Daniel orando y rogando delante de su
Dios.
El
decreto del rey no alteró el comportamiento de Daniel en lo más
mínimo. No dejó de orar y dar gracias a Dios, es decir, que no
dejó de peticionar a Dios, ni tampoco dejó de dar gracias por las
oraciones contestadas. Ni siquiera cerró las ventanas para
ocultar su oración de sus enemigos. Es
prácticamente seguro que sabía que sus enemigos lo verían
orando. Pero él fue motivado por la fe, no por el miedo. Su
oración fue un acto deliberado de desobediencia, y no hay duda de
que sus oraciones del día estarían centradas sobre sí mismo y el
decreto insensato del rey.
12 Entonces
se acercaron y hablaron delante del rey acerca requerimiento del
rey. "¿No has confirmado una orden judicial de que
cualquier hombre que haga una petición a cualquier dios u hombre
fuera de ti, oh rey, durante treinta días, debe ser echado en el
foso de los leones?" Respondió el rey y dijo: "La
declaración es cierta, de acuerdo con la ley de los medos y los
persas, que no puede ser revocada". 13 Entonces
respondieron y hablaron ante el rey, "Daniel, que es uno de los
deportados de Judá, no presta atención a ti, oh rey, o a la medida
cautelar que tú firmaste, sino que se mantiene haciendo su petición
tres veces al día".
Los
conspiradores primero maniobraron al rey para que confirmara
verbalmente que había firmado la orden y, a continuación,
presentaron la acusación contra Daniel. Su acusación se centró
en la posición de Daniel como "uno
de los exiliados de Judá",
en lugar de como el alto comisionado con un récord impecable. Porque
recordar a Darío que Daniel era su miembro más alto del gabinete
sólo habría enfurecido a Darío.
Tal
vez deberían haber reconocido que si Darío podía decretar que se
prohíbiera hacer una oración, también podría hacer un decreto
contrario que habría puesto sus vidas en peligro. Pero eran
ciegos a ese resultado, porque no podían ver más allá del éxito
de su trama. Daniel
6:14 dice,
14 Cuando
el rey oyó el asunto, le pesó en gran manera, y resolvió librar a
Daniel; y hasta la puesta del sol estuvo haciendo esfuerzos por
librarle.
El
rey trató de rescatar a Daniel por el resto del día "hasta la
puesta del sol". Pero la ley le ató las manos y los acusadores
de Daniel sabían que su trampa había funcionado sin problemas. Sin
embargo, ellos
no entendían que Dios mismo había diseñado esto con el fin de
convertir el imperio víbora en el Reino de Dios. Si
bien esto
se hizo como un tipo profético, que se cumplirá en los próximos
días,
cuando los reyes del oriente cumplan las profecías de Isaías de una
manera completa.
Etiquetas: Enseñanza Series
Categoría: Enseñanzas
Dr. Stephen Jones
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