El 26 de junio de 2015, la Corte Suprema de los Estados Unidos legalizó el matrimonio homosexual. Ese día, América se convirtió en el equivalente bíblico de Sodoma y Gomorra, que habían hecho lo mismo en los días de Abraham y Lot.
WASHINGTON, 26 de junio (Reuters) - La Corte Suprema dictaminó el viernes que la Constitución de Estados Unidos otorga a las parejas del mismo sexo el derecho a casarse, lo que le otorga un triunfo histórico al movimiento estadounidense por los derechos de los homosexuales.
El tribunal dictaminó 5-4 que las garantías constitucionales del debido proceso y la igualdad de protección bajo la ley significan que los estados no pueden prohibir los matrimonios entre personas del mismo sexo. Con el histórico fallo, el matrimonio homosexual se vuelve legal en los 50 estados…
El presidente Barack Obama, que se presentó en el Jardín de Rosas de la Casa Blanca, elogió el fallo como un hito en la justicia estadounidense que llegó "como un rayo".
"Este fallo es una victoria para Estados Unidos", dijo Obama, el primer presidente en funciones que apoya el matrimonio homosexual. "Esta decisión afirma lo que millones de estadounidenses ya creen en sus corazones. Cuando todos los estadounidenses son tratados como iguales, todos somos más libres".
Durante aproximadamente dos décadas, me había estado preguntando cuándo llegaríamos a este punto de la historia. Estados Unidos está directamente vinculado al antiguo Israel, como la mayoría de ustedes saben, por el ciclo de “siete tiempos” o 2.520 años. Estados Unidos se fundó en 1776, precisamente 2.520 años después de que Asiria comenzara a deportar a las primeras tribus de Israel en el 745 aC. La capital de Estados Unidos, Washington DC, se construyó en 1800, que fue 2.520 años después de la caída de Samaria, la capital de Israel, en el 721 aC.
En otras palabras, Estados Unidos representa la reforma de Israel después de que las “tribus perdidas” fueran exiliadas y dispersadas por los asirios. Es por eso que, creo, Estados Unidos comenzó con 13 colonias, que se correlacionan con las 13 tribus de Israel (Leví incluida). En un nivel terrenal, carnal y profético, Estados Unidos es el líder del verdadero Israel de Dios en el mundo de hoy. Predicadores prominentes como Timothy Dwight (presidente de Yale de 1795-1817) proclamaron que Estados Unidos era el quinto reino (el reino de la Piedra) profetizado en Daniel 2: 34-35.
Creo que tenía razón y que Estados Unidos tenía un llamado importante, un papel vital que desempeñar, en el derrocamiento de los cuatro imperios bestias. Sin embargo, a pesar de todo el optimismo a fines del siglo XVIII, a pesar de haber producido los documentos más importantes y radicales de libertad desde los días de Moisés, América todavía se fundó durante la época de los Imperios Bestias, cuyo gobierno no terminaría hasta el 2017 y más allá. Por lo tanto, aún no era el momento de la venida de Cristo.
El llamado de Estados Unidos se retrasaría hasta el momento del fin, donde hoy tenemos la tarea de este llamado. Debemos completar lo que se inició en 1776-1800.
Mientras tanto, debido a las imperfecciones de Estados Unidos, la nación se ha degenerado y finalmente ha llevado al mundo a la inmoralidad y la anarquía, bíblicamente hablando. Nuestra tarea, entonces, es abrumadora, pero afortunadamente, no tenemos que depender del brazo de carne. Estamos llamados a estar de acuerdo con la Palabra de Dios, lo que significa que también nos oponemos a los decretos inmorales del gobierno.
Las profecías de Isaías sobre América
Isaías es el profeta de la salvación universal. Sus profecías comienzan con un lamento por Israel a causa de su inmoralidad, la misma condición que se ve hoy en Estados Unidos. Isaías 1: 2-9 dice:
2 Oíd, cielos, y escucha, tierra; porque el Señor dice: “Hijos he criado y los hice crecer, pero se han rebelado contra mí. 3 El buey conoce a su dueño, y el asno el pesebre de su señor, pero Israel no sabe, mi pueblo no entiende. 4 ¡Ay, nación pecadora, pueblo abrumado por la iniquidad, descendencia de malhechores, hijos corruptos! … 9 Si el Señor de los ejércitos no nos hubiera dejado unos pocos sobrevivientes [un remanente vencedor], seríamos como Sodoma y semejantes a Gomorra. 10 Oíd la palabra del Señor, gobernantes de Sodoma; escuchad la instrucción de nuestro Dios, pueblo de Gomorra”.
Aquí el profeta cambia el nombre de Israel, según sus hechos, llamándolos Sodoma y Gomorra. Por esta razón, Dios levantó a los asirios para destruir la nación y exiliar al pueblo a "Halah y Habor, en el río Gozán y en las ciudades de los medos" (2º Reyes 17: 6).
Estados Unidos también se convirtió en Sodoma y Gomorra bajo el presidente Obama, en 2015, justo antes del final del tiempo asignado a Babilonia para gobernar la Tierra. La legalización del matrimonio homosexual puede verse como el pináculo de la inmoralidad babilónica, descrita en Apocalipsis 18: 2-3,
2 Y él [el ángel] clamó con gran voz, diciendo: “¡Caída, caída es Babilonia la grande! Ella se ha convertido en morada de demonios y prisión de todo espíritu inmundo, y prisión de toda ave inmunda y aborrecible. 3 Porque todas las naciones han bebido del vino de la pasión de su inmoralidad, y los reyes de la tierra han cometido inmoralidades con ella, y los mercaderes de la tierra se han enriquecido con la riqueza de su sensualidad”.
En cuanto a nosotros, "el remanente" (como nos llama Isaías), estamos llamados a ponernos de acuerdo con Dios, en lugar de con los hombres. El Remanente escucha la voz del Cielo que dice: “Salid de ella, pueblo mío, para que no participéis en sus pecados y recibáis de sus plagas” (Apocalipsis 18: 4). Seguimos un camino diferente al del ciudadano promedio de Sodoma. Así como el “justo Lot” (2ª Pedro 2: 7) fue llevado a salir de ella (es decir, Sodoma), así también nosotros somos guiados a salir de Babilonia.
También debería hacer una distinción entre ser gay y practicarlo. Hay casos en los que uno no puede evitar ser gay. La Ley de Dios regula el comportamiento y establece el estándar de acuerdo con el orden de Dios; pero la Ley no puede cambiar la naturaleza de uno. Solo el Espíritu Santo puede hacer eso. Incluso las personas homosexuales pueden estar de acuerdo con la naturaleza (Ley) de Dios y, por lo tanto, ser parte del Remanente Vencedor. Lo mismo ocurre con todos los que somos llamados a crucificar la carne (viejo hombre). Todos somos llamados a estar en desacuerdo con el "viejo hombre" y sus deseos carnales. Podemos ser parte de este Remanente sin habernos perfeccionado aún en nuestra naturaleza. El acuerdo es la clave.
Campaña de Oración El Clamor de Sodoma
El 30 de junio de 2015 fuimos guiados a realizar una campaña de oración llamada El Clamor de Sodoma, basada en la palabra del ángel a Lot en Génesis 19: 13,
13 porque estamos a punto de destruir este lugar, porque su clamor ante el Señor se ha vuelto tan grande que el Señor nos ha enviado a destruirla.
En otras palabras, la destrucción de Sodoma se produjo porque la gente de la ciudad había pedido justicia al Tribunal Divino. El problema era que aquellos que habían apelado a Dios también eran sordos espiritualmente y por eso no “salieron de ella” cuando Lot salió. Por lo tanto, murieron en la conflagración junto con los malvados. Los acusadores murieron con los acusados. Las personas deben tener cuidado con la forma en que apelan a la Corte Divina. Asegúrese de conocer la decisión del juez para saber qué curso de acción debe tomar.
Ahora que la Corte Suprema ha emitido su fallo, todos los estadounidenses viven en Sodoma, les guste o no. No nos gusta vivir en Sodoma, pero vivir aquí nos da ciertos derechos. Tenemos el derecho de apelar al Tribunal Divino, así como lo hizo el pueblo de Sodoma en su tiempo. Es por eso que fuimos llevados a apelar al Tribunal Divino en la campaña de oración El Clamor de Sodoma.
La principal diferencia es que nuestro clamor fue que Dios enviara el Bautismo de Fuego (Espíritu Santo) para consumir la carne y cambiar los corazones de la gente (Mateo 3: 11-12). No podemos dejar Sodoma, porque no hay lugar adonde ir donde Sodoma / Babilonia no tenga control. Para nosotros, salir de la ciudad significa estar de acuerdo con Dios como ciudadanos del Reino. Nuestra lealtad es a Jesucristo, no a los gobiernos de los hombres.
Como Santos que se preparan para gobernar, somos más que simples ciudadanos del Reino. Estamos preparando nuestros corazones como Vencedores, es decir, como "el remanente". Este Remanente toma la iniciativa para que los ciudadanos sepan qué hacer y cómo ser guiados por el Espíritu.
La oración
Nuestra oración fue la siguiente:
Padre Celestial Nuestro, venimos ante tu Corte Divina en el nombre de Jesús y bajo su sangre. Gracias por el privilegio de venir ante Ti con confianza, para que podamos pedirte de acuerdo a tu voluntad, y sabiendo que recibiremos todo lo que pidamos.
Apelamos a Ti como los que viven en Sodoma y Gomorra, porque somos los profetizados por Isaías. Te pedimos que envíes tu Bautismo del Espíritu Santo y Fuego, que Juan el Bautista profetizó según tu voluntad. Oramos para que limpies nuestros corazones personalmente y limpies nuestra propia nación. Quita la paja de nosotros y de nuestra nación.
Te pedimos que pronuncies un veredicto de acuerdo con los juramentos de tu Nuevo Pacto, mediante los cuales prometiste hacernos tu pueblo y ser nuestro Dios. No nos trates según nuestra locura, sino según tu gran misericordia y amor.
Elimina también todos los obstáculos que puedan impedir o retrasar el derramamiento de tu Espíritu.
Ven pronto, Señor Jesús.
Gracias, Padre Celestial, por escuchar nuestra oración y petición. Gracias por responder de acuerdo a Tu perfecta voluntad.
Amén.
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