eManá
La Palabra de Dios diariamente enviada por correo electrónico
3 de noviembre de 2021
Creemos al imitar un ejemplo adecuado (1)
Versículos de la Biblia
1ª Tesalonicenses 1: 6 Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor...
1ª Tesalonicenses 2: 9 Porque os acordáis, hermanos de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os proclamamos el evangelio de Dios. 10 Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes.
1ª Tesalonicenses 1: 6 Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor...
1ª Tesalonicenses 2: 9 Porque os acordáis, hermanos de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os proclamamos el evangelio de Dios. 10 Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes.
Palabras del ministerio
[Parte 1 de 2]
Si analizan la situación que impera entre los creyentes hoy en día, se darán cuenta que muchos cristianos no tienen ninguna dirección. La razón por la que les falta dirección es que no tienen un modelo apropiado. Debemos ser un modelo para otros y fomentar su crecimiento cuidándolos con ternura como madres y exhortándolos como padres a andar como es digno de Dios.
En 1ª Tesalonicenses 2, Pablo da un testimonio claro de cómo vivió entre los tesalonicenses. Les recuerda de la venida de los apóstoles y de la manera en que vivieron entre ellos. ¿Por qué Pablo enfatizó esto? Él lo enfatizó porque quería presentarle a los santos jóvenes un modelo de una vida adecuada. Espero que todos los ancianos y los que presiden vean, del ejemplo de Pablo, que debemos ser un modelo para los santos.
La imitación está ligada al crecimiento. De hecho, en muchos casos imitar es crecer. En una familia, los niños imitan a sus padres y a sus hermanos y hermanas mayores. Los pequeños no inventan nada; más bien, imitan a otros. Un buen ejemplo de esto es el uso del idioma. El niño aprende el idioma que hablan sus padres. El habla el mismo idioma y con el mismo acento. Un niño aprende el idioma y el acento imitando. Esto muestra el hecho de que los niños crecen al imitar a sus padres. Por lo tanto, en una familia, imitar en realidad significa crecer. Los padres son ejemplos, modelos, para sus niños.
Si analizan la situación que impera entre los creyentes hoy en día, se darán cuenta que muchos cristianos no tienen ninguna dirección. La razón por la que les falta dirección es que no tienen un modelo apropiado. Debemos ser un modelo para otros y fomentar su crecimiento cuidándolos con ternura como madres y exhortándolos como padres a andar como es digno de Dios.
En 1ª Tesalonicenses 2, Pablo da un testimonio claro de cómo vivió entre los tesalonicenses. Les recuerda de la venida de los apóstoles y de la manera en que vivieron entre ellos. ¿Por qué Pablo enfatizó esto? Él lo enfatizó porque quería presentarle a los santos jóvenes un modelo de una vida adecuada. Espero que todos los ancianos y los que presiden vean, del ejemplo de Pablo, que debemos ser un modelo para los santos.
La imitación está ligada al crecimiento. De hecho, en muchos casos imitar es crecer. En una familia, los niños imitan a sus padres y a sus hermanos y hermanas mayores. Los pequeños no inventan nada; más bien, imitan a otros. Un buen ejemplo de esto es el uso del idioma. El niño aprende el idioma que hablan sus padres. El habla el mismo idioma y con el mismo acento. Un niño aprende el idioma y el acento imitando. Esto muestra el hecho de que los niños crecen al imitar a sus padres. Por lo tanto, en una familia, imitar en realidad significa crecer. Los padres son ejemplos, modelos, para sus niños.
Creemos al imitar un ejemplo adecuado (2)
Versículos de la Biblia1ª Tesalonicenses 2: 7 Antes, fuimos tiernos entre vosotros, como nodriza que cuida con ternura a sus propios hijos. 10 Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes. |
Palabras del ministerio
[Parte 2 de 2]
El dar a los creyentes nuevos y jóvenes mucha enseñanza no es la manera adecuada de cuidarlos. La manera adecuada de criarlos es mostrarles un modelo. Al mostrarles un ejemplo, los regamos, los suministramos, los nutrimos y los cuidamos con ternura. Esto es lo que significa un cuidado como a hijo. Si se dan cuenta que su experiencia es algo deficiente, dirija a los nuevos creyentes a diferentes personajes de la Biblia, por ejemplo, a personas como Enoc, Noé, Abraham y David, en el Antiguo Testamento, y a Pedro, Juan, Pablo y Timoteo, en el Nuevo Testamento. Podemos presentarles las vidas de personajes bíblicos de tal forma, que fomentemos el crecimiento de los nuevos.
Cada madre sabe que una de las cosas más importantes en la crianza de los hijos es darles una alimentación adecuada. El noventa por ciento de la crianza de los hijos depende de la alimentación, y el diez por ciento, de la enseñanza. Esta también debe ser nuestra práctica al cuidar de los nuevos creyentes en la Iglesia. Debemos aprender a alimentar, el noventa por ciento, y a enseñar, el diez por ciento. La alimentación incluye el presentar modelos ya sea de la Biblia o de la historia de la Iglesia. Al leer biografías de los santos que han vivido a lo largo de los siglos, nos nutrimos a nosotros mismos y experimentamos una especie de cuidado como a hijo. Lo que queremos decir con esto es que la mejor manera de alimentar a los demás y fomentarles, es ofrecerles un ejemplo adecuado. Si no hay un ejemplo, no se producirá el cuidado como a hijos. Solamente teniendo un ejemplo adecuado podemos alimentar a otros.
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