Por el Dr. Stephen Jones - 12/10/2020
Regresé a casa anoche después de un viaje muy importante y productivo. Lamento no poder darle un informe de viaje, ya que gran parte de lo que se logró fue altamente confidencial. Si ha realizado pedidos de libros la semana pasada, se enviarán hoy. Mis hijos normalmente hacen el correo, pero vinieron conmigo en este viaje, así que cerraron la oficina durante una semana. De lo contrario, generalmente enviamos los pedidos de libros el mismo día en que se reciben. Gracias por su paciencia.
Si ha seguido mis weblogs o leído mi libro, Las Guerras del Señor, recordará que mi vida cambió el 4 y 5 de diciembre de 1981. Antes de esa fecha, para mí, es BC (antes del cambio). Después de esa fecha, para mí, es AD (después de la muerte). Morí en esa fecha y resucité un año después en la misma fecha en 1982.
En 1981 fui crucificado en Las Cruces, y esto fue un tipo de Pascua profética para mí, ya que Jesús fue crucificado en la Pascua. El patrón, como todos saben, comenzó con la primera Pascua bajo Moisés, cuando se sacrificaron los primeros corderos para la Pascua. Luego, Moisés llevó a Israel al desierto durante 40 años, y terminó cuando Josué los condujo a través del Jordán en el momento de la Pascua.
Tuvieron la oportunidad de entrar a la Tierra Prometida en Cades-barnea, pero diez de los doce espías dieron un informe negativo que mostraba su falta de fe, y la gente creyó este informe maligno. Entonces leemos que tuvieron que pasar otros 38 años en el desierto (Deuteronomio 2: 14). En mi propio viaje, han pasado 38 años desde mi resurrección el 4 y 5 de diciembre de 1982.
El año pasado me pregunté si podríamos presenciar algo en el 38 aniversario de mi experiencia de muerte en 1981, pero no ocurrió nada notable. Eso fue bueno, porque el punto final actual se basa en la resurrección, más que en la muerte. Aun así, la muerte y la resurrección nos llevan a algo nuevo, como todos hemos experimentado cuando nos convertimos en “nuevas criaturas” en Cristo. Este tipo de transición nos lleva a un plano superior y deberíamos estar preparados para los cambios. Para mí es evidente que mi vida ha establecido un patrón profético para el Cuerpo de Cristo, al menos para los vencedores.
El ministerio en sí está cambiando a medida que avanzamos. El año pasado escribí mucho sobre el ministerio de “Puertas Abiertas” y cómo esto traería grandes cambios al ministerio. Creo que ahora estamos allí, o al menos al comienzo del cambio. Tenga en cuenta que todavía estamos en dos ciclos de limpieza de 76 días que no llegarán a su fin hasta principios de abril. Sin embargo, parece que hemos cruzado el Jordán y estamos listos para tomar la Tierra de la herencia.
Si todo va como creo que será, es poco probable que haga más comentarios. Terminaré la serie sobre Isaías, y eso debería concluir mi plan de estudios. Los 5 libros sobre el Evangelio de Juan estarán listos para su distribución en la próxima semana. Entonces, lo último que se necesita para atar los cabos sueltos será probar el comentario sobre Isaías para que podamos publicarlo.
Espero viajar mucho en los meses y años venideros. A veces podré dar un informe de viaje, otras veces no. Pero de cualquier manera, sepan que el Reino se acerca y que todos los que han apoyado este ministerio de alguna manera son accionistas de sus recompensas. Por necesidad, el próximo año estaré a menudo fuera de la ciudad y no podré escribir weblogs, pero los mantendré informados tanto como pueda.
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