09 de enero 2015
Jesús fue azotado, después de su juicio ante Pilato ( Mateo 27:26; Marcos 15:15; Juan 19: 1 ). Lucas dice solamente que Jesús fue castigado ( Lucas 23:16 , 22 ), el uso de la palabra griega paideuo, que a menudo habla de castigar a un hijo. Su raíz es pais, "hijo." Hebreos 12: 5-8 usa el término paideuo en relación con los padres disciplina a sus hijos. De hecho, Hebreos 12: 6 dice:
6 Para aquellos a quienes el Señor ama, disciplina [ paideuo ] , y Él azota a cada hijo que recibe.
Con el fin de tomar la responsabilidad por nuestro pecado sobre sí mismo, Él tuvo que ser azotado, así como morir. La flagelación fue el castigo por los pecados menores (delitos menores) que no implican el pago de restitución ( Deuteronomio 25: 3 ). La pena de muerte se aplica en los casos en que la restitución no era posible (como en el asesinato premeditado), o incluso cuando un hombre se negaba a pagar una indemnización según lo prescrito por la ley ( Deuteronomio 17:12 ).
Cuando Isaías describe los sufrimientos y la muerte del Mesías, habló tanto de la pena de muerte como de la flagelación. Isaías 53: 5 dice, "por su llaga fuimos nosotros curados". Isaías 53: 8 dice, además, que como un cordero fue llevado a la masacre, "Porque fue cortado de la tierra de los vivos y por la rebelión de mi pueblo a quien correspondía la herida". En Isaías 53:12 leemos que "cuanto derramó su vida hasta la muerte" y por sí mismo "llevó el pecado de [la] muchos".
Con su llaga, Jesús trajo la curación de las enfermedades. En su muerte Jesús trajo la curación de la muerte misma, es decir, Él nos trajo la inmortalidad.
En la película de Mel Gibson, La Pasión, Jesús fue azotado más de 60 veces, presumiblemente por los soldados romanos que no conocían la ley. Pero yo creo que la ley es profética y que se le dieron cuarenta azotes de acuerdo con la limitación de la ley en Deuteronomio 25: 3. La ley no especifica quién debe administrar los azotes, así que desde ese punto de vista puede no importar quien realmente azotó a Jesús. Ninguna profecía específica se le atribuye.
Era una tradición que la flagelación debe limitarse a 39 azotes, de modo que en caso de un cuenta mala, no violaran la ley involuntariamente. Pero más tarde evitaron este problema mediante el uso de un látigo con trece filamentos conocidos como un flagelo. Cada cadena tenía piezas de metal o hueso incrustadas, capaces de desgarrar la carne de uno de manera espantosa. Al azotar a alguien tres veces, las pestañas sumaban 39 en total.
Por extraño que parezca, también parece que muchos de los judíos o eran ignorantes de la ley o simplemente no se preocupan por su limitación a cuarenta latigazos. Josefo atestigua que él mismo sacó algunos rebeldes sin tener en cuenta esta limitación, diciendo:
Ocasión en la que Josefo utiliza de nuevo una segunda estratagema para escapar de ellos [2.000 hombres que estaban fuera de su sede, amenazándolo]; porque él se subió sobre la parte superior de la casa y ... dijo que iba a cumplir con todas sus demandas en el caso, pero que enviaran a algunos de ellos que pudiera hablar con él al respecto. Y cuando el principal de ellos, con sus líderes, oyó esto, entraron en la casa. A continuación, les llamó a la parte más retirada [privada] de la casa y cerró la puerta de esa sala donde los puso, y luego los azotó hasta que cada una de sus entrañas apareció desnuda. Mientras tanto, la multitud se puso de pie alrededor de la casa y suponían que estaban teniendo un largo discurso con los que habían entrado, sobre lo que decían de él. A continuación, abrieron el juego de puertas de inmediato y envíaron a los hombres todos ensangrentados, que tan terriblemente espantaron a los que antes le habían amenazado, que tiraron sus armas y huyeron".[Josefo, Guerras de los Judíos, Libro II, 21: v]
Josefo era un sacerdote y un descendiente de la dinastía Hasmonean, que había gobernado Judea 163-63 aC. Como un hombre educado, debería haber tenido conocimiento de la ley de Dios, pero al parecer no la siguió en este caso.
Las víctimas de esta paliza, sin embargo, no estaban cumpliendo con la profecía bíblica. Yo creo que la ley profetiza de Jesucristo, y sobre esa base, creo que Jesús fue azotado con cuarenta azotes con el fin de tomar sobre sí la pena completa de nuestras "enfermedades".
Simón de Cirene
Después de la paliza, Jesús fue enviado a la cima del Monte de los Olivos para ser crucificado en un lugar público, donde todos los que vinieran a Jerusalén a lo largo de ese camino podrían verlo y someterse a las autoridades. En ese momento Jesús estaba muy debilitado por la flagelación. Así que un hombre fue puesto en servicio para llevar a la viga transversal que iba a ser clavada en el madero vertical que se mantenía permanentemente en la Montaña. Lucas 23:26 dice,
26 Y cuando lo llevaban, echaron mano de un cierto Simón de Cirene, que venía del campo, y le colocaron encima la cruz para que la llevara detrás de Jesús.
Al parecer, Simon había pasado la noche fuera de Jerusalén (tal vez en Betania). Él acababa de llegar de la Montaña en su camino a Jerusalén para adorar en el templo. Llegó justo cuando parte del público estaba caminando en la dirección opuesta, hacia el monte. Simon luego llevó a la traviesa hasta la Montaña, donde Jesús fue crucificado. No sabemos a ciencia cierta si Jesús cayó bajo el peso de la viga, pero el acto de Simon que sigue el espíritu de la ley que se encuentra en Deuteronomio 22: 4,
4 No verás el asno de tu compatriota, o su buey, caído en el camino, y no prestarás atención a ellos; sin duda le ayudará a levantarlos.
Su nombre, Simon, probablemente indica que era un judío que vivió en Cirene. Cirene fue una colonia griega situada en la costa occidental mediterránea de Egipto, en Libia. Había sido fundada en el año 630 aC y en 323 aC se convirtió en parte de Egipto. Por el tiempo de Jesús, Cirene había pasado a formar parte del Imperio Romano, aunque mantuvo su autogobierno. Había suficientes judíos de Cirene que incluso tenían su propia sinagoga en Jerusalén ( Hechos 6: 9 ). Vemos su presencia también en el día de Pentecostés en Hechos 2:10.
Cirene era famoso por su Escuela de cirenaicos, fundada hace cuatro siglos como una hedonista escuela de filosofía. De acuerdo con esta filosofía, especialmente el placer-físico era el objetivo más importante en la vida. El placer era lo único bueno en la vida, y el dolor era lo único malo. Por lo tanto, evitar el dolor era una característica importante de esta filosofía. Su filosofía hedonista fue sustituida más tarde por el epicureísmo, que modificó algo la filosofía hedonista y sin embargo aún conservaba sus características más importantes.
No sabemos si Simón de Cirene había sido un estudiante (o profesor) en esta escuela, pero lo cierto es que estaba muy familiarizado con su filosofía. Para Simon, entonces, ser llamados para presenciar el dolor y el sufrimiento de Jesús de primera mano debe haber sido una experiencia que cambió la vida para él.
Marcos 15:21 nos da más detalles, diciendo:
21 Y obligaron a un transeúnte que venía del campo, Simón de Cirene (el padre de Alejandro y de Rufo), a llevar su cruz.
Marcos implica que él conocía bien a Simon en el momento que escribió su evangelio. Sin duda, él se convirtió en cristiano, y Marcos incluso sugiere que sus hijos, Alejandro y Rufo, eran bien conocidos por sus lectores. Simon y Marcos pueden haberse conocido antes:
De acuerdo con la tradición de la Iglesia Ortodoxa Copta, su fundador, San Marcos era natural de Cirene, y fue ordenado el primer obispo de Cirene.
Es poco probable, sin embargo, que el hijo de Simón, Rufo, era el mismo hombre mencionado en Romanos 16:13. Ese Rufo era al parecer un medio hermano de Pablo, como él dice,
13 Saludad a Rufo, escogido en el Señor, y a su madre y mía.
Si se tratara del mismo Rufo, indicaría que la madre de Pablo y Rufo estaba casada con Simón de Cirene. Pero sabemos que el Rufo romano tenía por sobrenombre Pudentius, una familia senatorial rica en Roma. Así que Pablo llama a Rufo también por su apellido Pudente en 2 Timoteo 04:21, mientras saludó también a la esposa de Pudente Claudia y su hermano Linus (el primer obispo de Roma).
No tengo ninguna duda de que Simón de Cirene era de una familia diferente. Su formación filosófica como de Cirene estaba destinada a presentar el contraste con la filosofía de Dios, donde el dolor y el sufrimiento del Mesías traería verdadero placer y felicidad al mundo. La solución a todo el dolor y el sufrimiento causado por el pecado de Adán no era para participar en el placer o para evitar el dolor, sino para revertir las consecuencias del pecado pagando efectivamente la pena del pecado de Adán.
Profecías en el camino
Juan 19:14 nos dice,
14 Y era el día de preparación para la Pascua; porque era como la hora sexta. Y dijo a los judíos, "He aquí, vuestro rey". 15 Por lo tanto, gritaron: "¡Fuera con él, fuera con él, crucifícale!" Pilato les dijo: "¿He de crucificar a vuestro rey?" Los principales sacerdotes respondieron: "No tenemos más rey que el César". 16 Así que entonces lo entregó a ellos para que fuese crucificado.
La sexta hora era el mediodía. En ese momento toda la ciudad estaba llena de vida, y los seguidores de Jesús se habían enterado de la noticia de su arresto. Lucas 23:27 dice,
27 Y le estaban siguiendo una gran multitud del pueblo, y de mujeres que lloraban y se lamentaban de Él.
El juicio nocturno de Jesús ante Caifás se había llevado a cabo mientras la mayoría de la gente estaba dormida, pero no hay duda de que en la mañana la noticia se habría extendido rápidamente, mientras que Jesús estaba en el pretorio. Lucas 23: 28-31 dice:
28 Pero Jesús se volvió y les dijo: "Hijas de Jerusalén, no lloreis por mí, sino llorad por vosotras y por vuestros hijos. 29 Porque he aquí, vienen días en que se dirá: ¡Dichosas las estériles, y los vientres que nunca concibieron y los pechos que no criaron!". 30 Entonces comenzarán a decir a los montes: "Caed sobre nosotros", ya las colinas: "cubrirnos". 31 Porque si hacen estas cosas en el árbol verde, qué sucederá en el seco? "
El versículo 29 se refiere de nuevo a Lucas 21:23, donde Jesús había explicado a sus discípulos acerca de la venida de la desolación de Jerusalén. Aquí Jesús citó Oseas 10: 8-10, donde el profeta había profetizado el juicio divino a la Casa de Israel a causa de su adoración del becerro de oro en Betel,
8 Entonces dirán a los montes: "Cubridnos!" Y a las colinas, "Caed sobre nosotros!" ... 10 Yo voy a castigarlos, y los pueblos se reunirán contra ellos cuando yo los ate por su doble crimen.
Es evidente que el rechazo de Jesús como el Mesías de Jerusalén estaba vinculado directamente a la venidera desolación de Jerusalén. Al citar Oseas 10: 8, Jesús recordó a las "hijas de Jerusalén" que Judá era tan culpable como Israel había sido en los días de Oseas. Por lo tanto, el mismo juicio caería sobre ellos.
De Lucas 23:31 , El Wycliffe Bible Commentary dice:
"Él citó un proverbio actual. La aplicación significaba que si esa injusticia podía ser perpetrada contra un hombre inocente en momento de paz, ¿qué sucedería a la gente de la ciudad en tiempo de guerra?
Jesús, pues, estaba lleno de vida, siendo el "árbol verde". Judá era el árbol "seco", es decir, el árbol marchito que Jesús ya había maldecido ( Mateo 21:19 ). En la declaración de Jesús en Lucas 23:31 veo también el cumplimiento de la profecía de Jeremías 11:16,
16 El Señor llamó a su nombre, "Olivo verde, hermoso en fruto y forma"; con el ruido de un gran tumulto Él ha encendido fuego en él, y sus ramas son inútiles [o "infructuosas"].
En ese contexto, nos encontramos con que Jeremías, también, era un tipo de Cristo perseguido por los sacerdotes del templo corruptos. El profeta nos dice en Jeremías 11:19, 20,
19 Pero yo era como un cordero inocente que llevan a la masacre; y yo no sabía que habían ideado planes contra mí, diciendo: "Destruyamos el árbol con su fruto, y cortémoslo arrancándolo de la tierra de los vivos, que de su nombre no haya memoria". 20 Pero, Oh Señor de los ejércitos, que juzgas con justicia, que tratas los sentimientos y el corazón, vea yo tu venganza de ellos, porque a ti he encomendado mi causa.
Los sacerdotes de la época conspiraron contra Jeremías, incluso como lo hicieron con Jesús seis siglos después. La trama era "destruir el árbol con su fruto", indicando que estaban cortando un árbol vivo, verde, que daba sus frutos. Esto era ilegal según las leyes de la guerra espiritual que se encuentran en Deuteronomio 20:19, 20.
En esto vemos el contraste entre el árbol frutal y el árbol estéril en que Jerusalén se había convertido. Esto, creo, es el significado subyacente de la declaración de Jesús sobre el árbol verde y el árbol seco. Los sacerdotes estaban cortando un árbol frutal al crucificar a Jesús, al igual que ellos conspiraron que ver con Jeremías muchos años antes.
Jeremías apeló su caso a la corte divina en el versículo 20, diciendo: "a ti he comprometido mi causa". En los días de Jeremías la ciudad de Jerusalén sería destruida, junto con su templo, de acuerdo con el juicio divino. Lo mismo podría suceder en el siglo I, en el año 70 dC.
Dr. Stephen Jones
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