Apocalipsis 16: 8-9 dice:
8 Y el cuarto ángel derramó su copa sobre el sol; y le fue dado quemar a los hombres con fuego. 9 Y los hombres se quemaron con el calor feroz; y blasfemaron el nombre de Dios que tiene poder sobre estas plagas; y no se arrepintieron para darle gloria.
El sol representa el liderazgo civil y religioso. Esta cuarta copa del juicio (vino) está dirigida al liderazgo civil y religioso. Notamos esto anteriormente en nuestro estudio de la Cuarta Trompeta de Apocalipsis 8: 12. Pero es claro por el versículo 9 anterior que no se arrepentirán en el momento en que se derrame la copa. Aun así, la mano del juicio de Dios comienza a llevarlos a rendir cuentas por sus pecados. Según mi revelación personal, el Ángel del Aliento que Todo lo Consume es el que vierte la cuarta copa de vino.
Cuando se derramaban las cuartas copas de agua y vino en el altar el Cuarto Día de la Fiesta de Tabernáculos, los sacerdotes cantaban el Salmo 94: 16-23. Los versículos 20 y 21 hablan de tronos injustos, es decir, líderes injustos y sus leyes:
20 ¿Puede un trono de destrucción estar aliado contigo, uno que trama el mal por decreto? [¿Se aliará contigo el tribunal inicuo,que hace agravio bajo forma de ley?] 21 Se unen contra la vida de los justos y condenan a muerte a los inocentes.
Los hombres sin Ley apelan hipócritamente a Dios en busca de apoyo cuando declaran guerras injustas, porque las personas religiosas requieren oración para hacerles creer que Dios está de su lado, ya sea que sus guerras estén justificadas o no. Pero el salmista concluye que su maldad volverá para perseguirlos. El Salmo 94: 23 dice:
23 Y él ha hecho volver sobre ellos su maldad, y los destruirá en su maldad; el Señor nuestro Dios los destruirá.
Esta, entonces, es la profecía dada en el momento del cuarto cuenco de vino derramado en la Fiesta de Tabernáculos.
Las cuartas copas derramadas en 2003
Del 14 al 17 de octubre de 2003, llevamos a cabo una conferencia de Tabernáculos en Chandler, Arizona, al sur de Phoenix, en el “Valle del Sol”. En la última tarde (17 de octubre) el grupo de unas 80-90 personas se reunió en el estacionamiento de un centro comercial cercano para verter las cuartas copas de vino y agua en el suelo. Antes de que pudiéramos hacerlo, algunos guardias del centro comercial se abalanzaron sobre nosotros de manera amenazante, diciéndonos que estábamos en una propiedad privada y que no podíamos reunirnos allí.
No discutí con ellos ni desafié su autoridad, pero les pregunté si podía tener solo 15 segundos. Ellos estuvieron de acuerdo. Ese fue todo el tiempo que nos tomó completar nuestra obra. Entonces apareció el jefe de guardia (una mujer), y algunas de las personas le explicaron nuestro propósito. Le dijimos que nos estábamos reuniendo para la Fiesta de Tabernáculos y que nuestro propósito era orar una bendición sobre esta área. Luego se disculpó por los guardias demasiado entusiastas, que habían asumido que íbamos a causar un motín.
Encontré significativo que al derramar las copas sobre el “sol” (liderazgo), fuéramos desafiados por los guardias (figuras de autoridad). Pero cuando llegó el momento, nos permitieron llevar a cabo nuestro testimonio en la Tierra, y luego nos fuimos en paz.
Comienzan las señales en el sol
Casi inmediatamente después de que el ángel derramó la copa sobre el sol, los científicos comenzaron a ver enormes erupciones solares ("manchas solares"). La primera fue vista el 22 de octubre y sus efectos golpearon la Tierra el 24. El día 28 , se vio la tercera llamarada solar más grande jamás registrada, y golpeó la Tierra al día siguiente. La velocidad del viento solar fue de 5,6 millones de millas por hora, más del doble de la velocidad de cualquier tormenta solar registrada en los últimos 40 años.
El Washington Post publicó un artículo sobre esto el 30 de octubre, diciendo:
“Una segunda gran tormenta solar magnética golpeó la Tierra el jueves, solo un día después de que una anterior se precipitara contra el planeta en lo que un astrónomo llamó un doble golpe sin precedentes.
“Es como si la Tierra estuviera mirando a través del cañón de un arma gigante apuntándonos por el sol... y nos ha dado dos tiros importantes, dijo John Kohl...
“Kohl, el investigador principal de un instrumento a bordo de la nave espacial SOHO de observación del sol de la NASA, dijo que la probabilidad de que dos enormes llamaradas dirigidas directamente a la Tierra se acerquen tanto, como lo han hecho esta semana, no tenía precedentes… tan baja, que es una anomalía estadística.
“La aurora boreal se vio tan al sur como El Paso, Texas, en la frontera con México”.
Dos semanas después, el 2 y 3 de noviembre hubo tres erupciones solares “extremas” más. El escritor científico principal, Robert Roy Britt, dijo:
"… los astrónomos nunca han sido testigos de una serie de actividades como esta".
También cita a Paul Brekke, subdirector de proyectos de la nave espacial SOHO, diciendo:
“Creo que la última semana pasará a los libros de historia como uno de los períodos de actividad solar más dramáticos que hemos visto en los tiempos modernos”.
Luego, el 4 de noviembre, se midió y registró una gran llamarada solar como Categoría X-20. Esta fue, con mucho, la más grande jamás registrada, y los científicos se sintieron aliviados de que no se encendiera directamente hacia la Tierra. Más tarde, como pudieron analizar, esta se actualizó a un X-40, el doble de grande de lo que se pensaba originalmente.
Todo esto fue tan inusual que la edición de primavera de National Geographic presentó estas erupciones solares en su portada y tenía un gran gráfico desplegable a todo color para acompañarlo. No hay duda de que los científicos quedaron bastante impresionados con el espectáculo solar de Dios.
Por supuesto, el espectáculo literal del sol fue solo una señal en los cielos para dar testimonio de la Cuarta Copa derramada sobre el sol. Daba testimonio del hecho de que este era ciertamente el momento de la Cuarta Copa de Apocalipsis 16: 8-9.
En cuanto a su significado real, que es mucho más importante, fue un llamado celestial para que los líderes, incluido el presidente George W. Bush, se arrepintieran en nombre de la nación por sus guerras injustas.
El llamado al arrepentimiento (cambio)
Fuimos llevados a derramar las cuartas copas de agua y vino en octubre de 2003. A principios de ese año, Estados Unidos y sus “fuerzas de la coalición” habían invadido Irak con el pretexto de que Saddam Hussein estaba tratando de construir armas nucleares. Esa excusa, por supuesto, resultó ser una mentira descarada. Así que se dio una segunda excusa para justificar la guerra: exportar la democracia occidental a Oriente Medio.
Sin embargo, el general Wesley Clark testificó en muchos discursos que el verdadero plan era derrocar a siete naciones del Medio Oriente en cinco años, y nadie en el Pentágono parecía saber por qué, aparte de que el plan era “desestabilizar el Medio Oriente”. Irak fue sólo uno de los cinco. Egipto y Siria eran otras grandes potencias programadas para la desestabilización.
Para 2015, finalmente se reveló el propósito oculto de esta desestabilización, aunque algunos pueden argumentar que fue una “consecuencia no deseada”. De cualquier manera, esta política de guerra inundó Europa y América con innumerables refugiados musulmanes que huían de la violencia y la perturbación, lo que provocó el caos y la ruptura total de los controles de inmigración que se habían establecido. Ciertamente, las agencias de inteligencia sabían los problemas que esto causaría, pero esos agentes de poder de Babilonia que gobiernan en secreto tienen la intención de despertar el resentimiento y la ira en Occidente para desencadenar la Tercera Guerra Mundial.
Los principales agentes de poder de Babilonia son satanistas y luciferinos. Los líderes mundiales visibles deben hacer lo que se les dice, o sus propias indiscreciones se filtrarán a la prensa. Algunos han sido asesinados. Estos líderes saben que la gente misma es demasiado ignorante de la verdad para apoyarlos en cualquier intento de oponerse a estos líderes satanistas ocultos. La gente ha sido embrutecida en las escuelas y su moral ha sido corrompida.
Estos satanistas entienden la Ley bíblica mejor que la mayoría de los cristianos. Saben que si pueden aumentar el pecado en una nación, entonces el juicio divino permitirá que estos oligarcas babilónicos continúen gobernando el mundo. Lo que más temen, con razón, es un arrepentimiento nacional genuino que se produce por un derramamiento del Espíritu Santo. Esto es algo que está más allá de su control, pero hacen todo lo que está a su alcance para evitarlo dando a las personas la libertad de pecar e incluso haciendo que las personas piensen que el pecado es bueno.
Así que Apocalipsis 16: 9 dice “no se arrepintieron para darle gloria a Él”. El arrepentimiento da como resultado que Dios reciba la gloria. En parte, el verdadero arrepentimiento viene cuando los hombres reconocen a Jesucristo como Aquel que tiene el derecho de gobernar como Rey de la Creación. En otras palabras, los hombres deben respetar sus Leyes y Mandamientos, en lugar de ignorarlos.
En segundo lugar, debemos entender que los hombres son incapaces de arrepentirse sin un acto soberano de Dios. Pablo nos dice en Rom. 2: 4, “la bondad de Dios os guía al arrepentimiento”. La carne es indefensa aparte de la obra del Espíritu Santo. Dios inicia, y el hombre responde. “Amamos, porque Él nos amó primero”, dice 1ª Juan 4: 19. El salmista ora en el Salmo 80: 17-19,
17 Sea tu mano sobre el varón de tu diestra, sobre el hijo de hombre que para ti fortaleciste, 18 entonces no nos volveremos atrás de ti; vivifícanos, e invocaremos tu nombre. 19 Señor, Dios de los ejércitos, restáuranos; haz resplandecer tu rostro sobre nosotros, y seremos salvos.
Parece que en la providencia del plan de Dios para la nación, debemos ser llevados a las profundidades de la degradación y el pecado para conocer por experiencia los resultados de andar por ese camino. Pero en algún momento Dios volverá nuestros corazones, para que podamos ser restaurados. Entonces el pueblo aceptará gustosamente a Jesucristo como Rey.
Las copas de vino, pues, van acompañadas de las copas de agua. Éstas apelan a la Corte Divina, no sólo para el juicio sobre Babilonia y su reino injusto, sino también para la intervención divina del Espíritu Santo, para que el Reino de Dios se establezca en la Tierra. Por lo tanto, cuando derramamos las copas entre 2000 y 2006, apelamos a la Corte Divina no solo para derribar Babilonia, sino también para enviar la lluvia de su Espíritu para hacer que los hombres se arrepientan.
Juan el Bautista, el “Elías” de su tiempo, profetizó del Espíritu Santo que vendría a través del Mesías. En Mat. 3: 11-12 dijo:
11 … Él os bautizará en Espíritu Santo y fuego. 12 Y su aventador está en su mano, y limpiará completamente su era; y recogerá su trigo en el granero, pero quemará la paja en fuego inextinguible.
El Espíritu Santo se representa como un fuego que todo lo consume porque consume la paja, que es “la carne”. La palabra hebrea para espíritu es ruach, que también es “aliento”. Cuando el Espíritu Santo desciende sobre nosotros, el soplo de Dios consume las impurezas de la carne y da al mismo tiempo soplo de vida. Esto nos cambia por dentro, escribiendo sus Leyes en nuestro corazón, para que podamos ir más allá de la obediencia y llegar a estar de acuerdo con la naturaleza y la Palabra de Dios.
Por lo tanto, el Ángel del Aliento que Todo lo Consume es enviado en el cuarto juego de copas de agua y vino para hacer que las naciones se arrepientan.
https://godskingdom.org/studies/books/the-revelation-book-6/chapter-5-the-all-consuming-breath-angel
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