La Guerra del Dragón fue principalmente una guerra entre Miguel y el Dragón Rojo, como vemos en Apocalipsis 12: 7. Los dos son lo que yo llamo "enemigos naturales". En otras palabras, Miguel es el ángel que está llamado a vencer al Dragón Rojo, así como Peniel está llamado a vencer al Príncipe de Persia.
Miguel también es el ángel asignado para proteger y luchar por la tribu de Judá y la Casa de David, si se sirven de su fuerza. En el pasado, Judá cayó en el pecado y la corrupción, por lo que Miguel se volvió contra ellos y se convirtió en su enemigo (Isaías 63: 10). Pero al final, el Tabernáculo de David fue reconstruido y la Casa de David derrocó al Dragón Rojo con la ayuda de Miguel.
El ascenso de la Casa de David de 1993-2000 fue necesario para sentar los cimientos del levantamiento de la Casa de José-Efraín. En la profecía a largo plazo, vemos esto manifestado con las dos venidas de Cristo, quien vino la primera vez de Judá para reclamar el Cetro, y quien viene la segunda vez de José para reclamar la Primogenitura. La victoria de Cristo a través de la muerte y la resurrección -que es lo que corresponde a Miguel, sentó las bases necesarias para la Segunda Obra de Cristo a través de Peniel.
Vemos que este patrón emerge una vez más a corto plazo al final de la Era. La Casa de David surgió primero para participar en una guerra espiritual contra el Dragón Rojo en la Guerra del Dragón de finales de la década de 1990. La victoria final de Miguel le permitió a Peniel comenzar la segunda fase de esta obra del Reino después del cambio de siglo.
De cara al futuro, esperamos ver esta secuencia repetida en el cumplimiento a corto plazo de los días festivos. Cuando Miguel se ponga de pie, los vencedores se levantarán al ser resucitados de entre los muertos (Daniel 12: 1-2). Esto ocurrirá en la Fiesta de las Trompetas de algún año, porque los muertos serán resucitados “a la final trompeta” (1ª Corintios 15: 52), es decir, la séptima trompeta, que es el primer día del séptimo mes.
1ª Tesalonicenses 4: 16 dice que "los muertos en Cristo resucitarán primero". Por lo tanto, la Fiesta de las Trompetas es la primera de las Fiestas de Otoño. Dos semanas después, Peniel, el ángel de Tabernáculos, “cambiará” (transformará) a los vencedores vivientes a la semejanza de Cristo, para que los dos grupos puedan unirse plenamente como un solo Cuerpo.
¡Miguel y Peniel forman un gran equipo! Cuando su obra esté terminada, las Fiestas de Otoño se cumplirán, y los Hijos de Dios serán revelados (desvelados, manifestados) a la Creación (Romanos 8: 19) en los siglos venideros.
También vemos que Miguel fue asignado principalmente a Judá y la Casa de David, mientras que Peniel fue asignado a Efraín y la casa de José.
Año 3000 del reinado de David (1996)
El gobierno israelí aprobó una ley en 1993 pidiendo una celebración en 1996 marcando el 3000º aniversario de la coronación del rey David en el año 1004 aC.
https://mfa.gov.il/mfa/mfa-archive/1993/pages/jerusalem%203000-%20city%20of%20david%201996.aspx
El momento de eso concuerda con la cronología que expuse en Secretos del Tiempo . Celebramos esto declarando el Jubileo, como dije antes. Los israelíes no lo hicieron, porque no fueron llamados a hacerlo, ni recibieron ninguna revelación al respecto. Por lo tanto, su "Declaración de propósito" al final del artículo anterior no dice nada sobre la declaración de un Jubileo.
El Jubileo Israelí (1998)
Los israelíes intentaron celebrar un Jubileo parcial dos años después, en 1998, que era el 50º aniversario de la condición de Estado (1948-1998). Celebraron su Jubileo recortando las sentencias de algunos palestinos encarcelados en un diez por ciento, siempre que ya hubieran cumplido el 60 por ciento de sus sentencias. Esto afectó a unos 800 prisioneros.
En contraste, se suponía que un jubileo bíblico cancelaría todas las deudas para que cada hombre pudiera regresar a su familia y propiedad. Esta es la verdadera gracia, mientras que la “amnistía jubilar” de los israelíes fue muy limitada y solo redujo su deuda en un diez por ciento.
Aun así, las Escrituras muestran que Dios les da crédito a los hombres por cualquier bien que puedan hacer. Yo discerní que su diez por ciento de extensión de gracia también se les acreditaría cuando ocurra la profecía de Jeremías sobre la destrucción final de Jerusalén. Parece que Dios les perdonará un "diezmo" del diez por ciento.
La revelación de 1998 se centró en la idea de hacer las cosas a la manera de Dios. Aunque la mayoría de la gente siguió haciendo las cosas a su manera, la Casa de David se centró en hacer las cosas a la manera de Dios.
La 32° Super Bowl (25 de enero de 1998)
Se sabe que las Super Bowls contienen señales proféticas de la época. Algunos han seguido estas señales de cerca cada año. La 32ª Super Bowl se jugó mientras estaba en Australia en un viaje de enseñanza, pero oí de ella más tarde.
https://www.cbsnews.com/news/broncos-win-super-bowl-xxxii/
John Elway llevó a los Denver Broncos a una victoria por 31-24 sobre los Green Bay Packers. El significa Dios en hebreo, por lo que El-way significa "camino o manera de Dios".
Unos meses más tarde, en el Jubileo de Israel (14 de mayo de 1998), Frank Sinatra murió. Fue mejor conocido por su canción de 1968, My Way (A mi manera). Sinatra era italiano pero también judío, lo que relacionaba su muerte con el jubileo israelí.
https://www.history.com/this-day-in-history/frank-sinatra-dies
Segunda ronda de la Guerra del Dragón (1998)
La segunda ronda de la Guerra del Dragón mostró el conflicto entre la Manera de Dios y la mía. Esto se basó en el tema anterior en 1997, cuando establecimos el matrimonio del Nuevo Pacto. En otras palabras, el Antiguo Pacto hace las cosas por el poder de la voluntad del hombre, mientras que el Nuevo Pacto hace las cosas por el poder de la voluntad de Dios (Juan 1: 13).
La segunda ronda de la Guerra del Dragón puede ser entendida solo por aquellos que estudian y creen la exposición de Pablo en Gálatas 4. Allí aprendemos que Abraham tuvo dos esposas. Agar era una esclava correspondiente al monte Sinaí y la Jerusalén terrenal. Sara era una mujer libre correspondiente a la Jerusalén celestial y, por extensión, al monte Sión (Hermón), donde Jesús se transfiguró.
El desacuerdo entre Agar y Sara y el conflicto resultante entre sus hijos ha continuado durante miles de años desde la época de Abraham hasta el día de hoy. No es simplemente un conflicto entre árabes y judíos, como muchos piensan. Es un conflicto entre los dos pactos y la salvación bíblica. ¿Qué pacto tiene el llamado de salvarnos? ¿Es por la voluntad del hombre o por la voluntad de Dios? ¿Es carne o espíritu? ¿Quiénes son la simiente de Abraham, aquellos con genealogía carnal o aquellos que tienen la fe de Abraham que se define en Romanos 4: 20-22?
20 Sin embargo, con respecto a la promesa de Dios, él [Abraham] no vaciló en la incredulidad, sino que se fortaleció en la fe, dando gloria a Dios, 21 y estando plenamente seguro de que lo que Dios había prometido, también podía cumplirlo. 22 Por tanto, también le fue contado por justicia.
El camino del hombre es salvarse al decidir por el poder de su propia voluntad seguir a Dios. Esto solo puede tener éxito si la persona puede cumplir su voto. El problema es que “todos pecaron” (Romanos 3: 23), y esto incluye a aquellos que deciden seguir a Jesús.
Dios tiene otro plan para la salvación, uno que realmente funciona. Se basa en el Nuevo Pacto, que es la promesa de Dios a la humanidad. Aquellos que creen que Dios “también puede realizar” o cumplir su promesa, confiesan que no han puesto confianza en la carne. Esta es la fe abrahámica, y es una de las claves para ser la verdadera simiente de Abraham (Gálatas 3: 7) y también un vencedor.
El conflicto entre el hijo de Sara y el hijo de Agar es una “alegoría”, dice Pablo, que manifiesta una disputa milenaria sobre quién está verdaderamente llamado a llevar la bendición de Abraham a todas las familias de la Tierra.
Los hijos de Agar son aquellos que basan su salvación en el Antiguo Pacto, es decir, sus propias decisiones-votos de seguir a Cristo. Los hijos de Sara son aquellos que basan su salvación en el Nuevo Pacto, teniendo fe en que Dios puede cumplir su promesa.
Los hijos de Agar incluyen a aquellos que afirman que la Jerusalén terrenal es su madre y la madre de la Iglesia en su conjunto. Tales personas promueven a Jerusalén como la capital del Reino y que se restablecerá un templo físico con sacerdotes levitas y sacrificios de animales en la Era Venidera.
Los hijos de Sara reclaman la Jerusalén celestial como su madre (Gálatas 4: 26, 28), creyendo que Agar-Jerusalén debe ser "echada" (Gálatas 4: 30) y que la profecía de Jeremías se cumplirá (Jeremías 19: 10-11).
Todo esto llegó al centro del escenario en 1998, como mostraré pronto.
https://godskingdom.org/blog/2021/04/the-rise-of-the-house-of-david-part-16
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