Publicado el 23 de noviembre de 2018 por Jill Steele
Tengo un buen sentido de la dirección. Estoy orgullosa de eso, nunca puedo admitir que estoy perdida. Simplemente, te diré que encontré una nueva forma de llegar a algún lugar. Pero no, no estoy perdida. ¡Yo no! Pero algo sucedió mientras estaba cruzando desde la última temporada. No puedo explicarlo exactamente, pero simplemente no pude encontrar mi camino de regreso a Dios. Este es mi intento de disculparme, explicarme y volver a empezar. Estamos en una nueva temporada, por cierto.
Cruzar puede ser difícil, pero hoy tenemos una pequeña victoria al volver a las raíces y decir: “¡Hey, lo siento! Estoy volviéndome a Ti. Me perdí".
Llámenlo como quieran. Perdida o redirigida, el hecho es que he estado desaparecida. Con suerte, me perdonarán. Y oro por no haberlos perdido en el proceso. Tengo algunas palabras importantes que compartir con ustedes de este momento de cruzar.
Nuestra pregunta hoy es esta: ¿estamos cruzando o dando vueltas en círculos?
En Josué 3, los sacerdotes llevaban el Pacto. Llevando el Arca de Su Presencia y cruzando sobre y por las aguas; los sacerdotes caminaban en obediencia, y bajo la fe y dirección de Josué. Sin su dirección, no lo habrían logrado. Sin embargo, hicieron lo que Josué ordenó y vieron el milagro de las aguas separadas. El camino se abrió ante ellos.
“Y Yahweh dijo a Josué: "Hoy comenzaré a exaltarte ante los ojos de todo Israel, para que sepan que estoy contigo como yo estaba con Moisés. Díles a los sacerdotes que llevan el arca del pacto: 'Cuando lleguéis a la orilla de las aguas del Jordán, os detendréis en el Jordán' ”. Josué dijo a los israelitas: 'Venid aquí y escuchad las palabras del Yahweh vuestro Dios' ". Josué 3:7-9.
La clave en esta fase del viaje fue "quedarse quietos" en el agua. Escuchen, entren y esperen.
En nuestro momento de cruzar, podemos pasar por alto la necesidad de "quedarnos quietos" y esperar que el SEÑOR haga el trabajo por nosotros. Esta es la pieza más importante, el acto que le da gloria a Él en nuestra situación. Nuestras tentaciones de adelantarnos o no intervenir son actos de la voluntad que actúan en contra de la dirección de Dios y su deseo de mostrar su gloria y mostrar su bondad hacia nosotros.
En Isaías 22:22, la conexión comienza a ser revelada.
“La llave de la casa de David la pondré sobre sus hombros; así abrirá y nadie cerrará, y cerrará y nadie abrirá".
Encontramos en Isaías 9:6 esta referencia a Cristo.
Porque un niño nos ha nacido, un hijo nos ha sido dado, y la soberanía reposará sobre sus hombros; y se llamará su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
A medida que el Espíritu Santo me guió a través de estas escrituras, me mostraba que el cambio se ha hecho EN Él, ya que NOSOTROS (con ÉL) somos la LLAVE de la Casa de David. Él abre lo que nadie puede cerrar, separando las aguas ante nosotros, tal como lo hizo entonces. Mientras Él nos transporta, nosotros también estamos en Él, en el Arca, ¡llevándonos DESCANSANDO sobre sus hombros! Ya no necesitamos que los sacerdotes traigan Su presencia ante nosotros, porque Él mismo se ha convertido en nuestro Sumo Sacerdote;
“Tenemos esta esperanza como ancla para el alma, firme y segura. Entra en el santuario interior detrás del velo, donde nuestro precursor, Jesús, ha entrado en nuestro nombre. Se ha convertido en sumo sacerdote para siempre, del orden de Melquisedec”. Hebreos 6:19-20.
... y es Jesús quien nos transporta en el ARCA de SU propia Presencia.
Cuando nosotros estamos descansando sobre sus hombros, somos llevados fácilmente a través. Estamos gobernando con Él, llevados por Él, y descansando en Él.
Según Jesús en Juan 17:20-23, se ha hecho de esta manera,
“Mi oración no es solo por ellos. También oro por aquellos que creerán en mí a través de su mensaje, para que todos puedan ser uno, Padre, así como Tú estás en Mí y YO ESTOY en Ti. Que también ellos estén en nosotros para que el mundo crea que tú me has enviado. Les he dado la gloria que me diste, para que sean uno como nosotros, Yo en ellos y Tú en mí, para que puedan ser llevados a la unidad completa. Entonces el mundo sabrá que me enviaste y los has amado tal como me amaste".
Al convertirnos en uno con Dios en Cristo, estamos EN el Arca con Él para siempre. ¿Qué podría ser más glorioso que eso?
Él quiere que el mundo lo conozca, esta es nuestra unidad, EN CRISTO. Su amor es para todos. Su deseo es que todos nos volvamos uno con Dios, en Cristo, confiando en Él en completo descanso.
Oro para que cuando crucen hacia esta nueva estación, descansen en Él y dejen que Él les lleve a través. ¡Alabado sea Dios, somos uno con Él para su gloria y para nuestro bien! El es fiel.
Padre, cuando nos atascamos o extraviamos nuestro camino, te agradecemos que nos lleves a través. Estamos agradecidos de que Tú abres camino a través de cada estación de nuestras vidas. Tú eres nuestro Sumo Sacerdote, nuestro Arca, nuestro Descanso. Ayúdanos a compartir estas buenas noticias con todos. En el bello nombre de Jesús. Amén.
Jill Steele. En verdad, no es 'Acerca de mí', sino que siempre ha sido sobre Él. Soy un recipiente agradecido, dispuesto, roto para ser utilizado. Mi pasión cobra vida por escrito, ofreciendo ánimo, compartiendo la perspectiva de la vida y señalando a otros en la dirección del Padre Celestial.
También puedes seguir a Jill en su blog: SteeleFaith.com y GODsip.net
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