Les
presentamos un muy bueno y pertinente artículo de nuestros queridos
hermanos de Mensaje de Paz en Colombia, corroborando lo que ya nos
anticipó vía e-correo, al compartirnos lo que el Señor estaba
ministrando a su corazón. Entre otras cosas dice el hermano:
"Hemos
vivido para nosotros mismos y verdaderamente no hemos estado
enfocados en los deseos del Señor; hemos incluso deseado ser
"bendecidos" pidiendo que nos vaya bien en el mundo.
Nuestro intento ha sido salvar nuestras vidas y conformarnos a este
siglo, pero eso sí, decimos Señor Señor".
Al respecto nosotros queremos hacer notar que hemos estado observando
un patrón subyacente en los últimos artículos publicados en
el blog, casi al tiempo del inicio de la actual Campaña de Oración
"Descartar a Todos los que Atan". El patrón es que el
señor quiere un pueblo sellado con Su marca: dependencia y total
confianza en Él para nuestro sustento y ministerio. Esto en
oposición a la marca de la bestia: el dinero, persiguiéndolo
en todo lo que hacemos (manos) y en todo lo que maquinamos para
conseguirlo (frentes o mentes).
Recordamos lo que el Señor nos decía en los artículos se Stephen
Jones sobre Apocalipsis y la marca y número de la bestia, de tener
un enfoque como pueblo de Dios no en el dinero sino en el Señor. Por
contra, la marca de la bestia claramente señala a la Prosperidad
(enfoque en las necesidades materiales), que tanto hoy persiguen, a
cual más, el mundo y Laodicea. Mensaje de Paz nos dice lo mismo al
hablarnos del ojo sencillo de la pureza de intención y de
buscar primeramente el Reino y su justicia y no orar porque
nos vaya bien en este mundo con las añadiduras.
En otro artículo de Jones, "La Lección del Joven Rico en Clave
de Vencedor", intuíamos que muy posiblemente la piedra de
toque del Vencedor sea desposeernos de todo y vivir
exclusivamente bajo Su palio sustentador. Más tarde o más temprano
el Señor, no nosotros, nos encerrará en ese valle de decisión,
"cul de sac" o callejón sin salida. A unos más a trancas
y barrancas que a otros, pero que todos, como hizo a la postre el
joven rico, deberemos de atravesar si es que vamos a vivir la vida en
clave de Vencedor. Nos hacíamos eco de esto mismo allá por el mes
de marzo cuando comentábamos esto con Mauricio y Rafael en nuestro
artículo "La Clave de los Vencedores (Fieles)...":
http://josemariaarmesto.blogspot.com.es/2013/10/la-clave-de-los-vencedores-fieles-vi.html
También hemos advertido últimamente entre varios hermanos que el Señor está transformando en Guerreros que pelearán la Batalla
Final en Su Ejército, tratos especiales y restricciones,
principalmente en el aspecto económico (porque estamos
observando también aflicciones en el aspecto de salud), pues el
amor al dinero es la raíz de todos los males. El objetivo es que
aprendamos la difícil lección de la dependencia exclusiva en
Yahweh Jireh (en palabras de Teresa de Ávila: el desasimiento), buscando solamente Su Reino y Su justicia, sin
preocuparnos por nada más; es decir, nosotros ocupándonos de los
asuntos de nuestro esposo y confiando que Él lo hará de los
nuestros. Es cierto, llevamos mucho tiempo a pan y agua en la cueva
como los profetas que Abdías escondió de Jezabel; o como Elías en
Querit, sustentados por los cuervos (solo por oficio de la oración, pidiéndole a Dios y no a los hombres)
y un arroyuelo que solo fluye cuando a Dios le place hacer llover, sea poco, mucho o nada; o como después solo con pan en la casa de la
viuda pobre, antes de estar en condiciones de poder partir a
ungir a reyes y profetas en las naciones.
Mientras redactamos esto el Señor nos lleva al pasaje de
Deuteronomio 11: 10-32, que es una semblanza maravillosa de la vida
en el espíritu, en la que las lluvias de bendición son precedidas
de la obediencia y el alejamiento de toda idolatría del corazón,
versus la vida en la carne de Egipto, donde uno se la busca en la
fuerza natural, representada por el riego artificial con el pie, que
dirige el agua del río a los surcos o parcelas de tierra deseados.
Para mi sorpresa, ¡es el mismo pasaje donde vemos la marca del
Señor en la frente y en la mano!:
18
Por
tanto, pondréis estas mis palabras en vuestro corazón y en vuestra
alma, y las ataréis como señal en vuestra mano, y serán por
frontales entre vuestros ojos.
Por tanto, ¿Cruzaremos la línea? ¿Oraremos para que Dios nos lleve al lugar donde estemos dispuestos a saltar al vacío, sabiendo que es el vacío del hueco entre las manos de Dios?
Marcos 10:21
Por tanto, ¿Cruzaremos la línea? ¿Oraremos para que Dios nos lleve al lugar donde estemos dispuestos a saltar al vacío, sabiendo que es el vacío del hueco entre las manos de Dios?
Marcos 10:21
Entonces Jesús, mirándole, le amó, y le dijo: UNA COSA TE FALTA: anda, vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme, tomando tu cruz.
No se pierdan pues el
artículo referenciado de Mensaje de Paz en el siguiente enlace:
Amen. Gracias. A veces lo difícil es saber cual es la voluntad de Señor, porque en todo caso, el Señor utiliza la cotidianidad de las circuntancias para enseñarnos lecciones. Lo cierto es que hay un llamado a través dd varios ministerios por todo el mundo, para que despertemos, como esta escrito en Zacarias 1, para que entremos por la puerta de un nuevo ámbito espiritual, de un lugar muy diferente al que conocemos, las tribulaciones actuales hacen parte del ciclo y de la puerta que estamos dejando atrás y que se esta cerrando. Muchas bendiciones.
ResponderEliminarMauricio Sánchez
Gracias Mauricio.
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