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APOCALIPSIS 14 – Parte 1: LOS 144.000, parte 1 (Apocalipsis Nuevo Estudio), Dr. Stephen E. Jones

9 de junio de 2016



Apocalipsis 13 nos dio un amplio esbozo de la historia profética. La Primera Bestia (del Mar) cubre 42 meses proféticos (1.260 años), principalmente de 529-1789 dC. A continuación, la Segunda Bestia (de la Tierra) derrocó a la primera bestia, pero luego la utilizó como un frente religioso con el fin de ocultar su verdadero poder tras bastidores. Esta bestia también ha utilizado muchas otras organizaciones (como la masonería) como fachada para ocultar sus intenciones. Mientras que la Primera Bestia es principalmente la bestia religiosa de Roma, la Segunda Bestia es la bestia secular liderado principalmente por familias de banqueros de alto nivel, visiblemente dirigida por los Rothschild.

Ya que la Bestia de la Tierra es el último poder para gobernar la Tierra antes de la época en que a los santos se les da el Mandato de Dominio, Apocalipsis 13 nos trae hasta la actualidad y a la Manifestación de los Vencedores. Es este evento que va a destruir el sistema mundial de Babilonia. Los vencedores están llamados a llevar una enseñanza a todo el mundo que va a provocar un tremendo movimiento del Espíritu Santo entre las naciones. Será un movimiento de base y comenzará a partir de la parte inferior, obrando su camino hacia arriba. No va a comenzar como una conversión de los líderes mundiales, donde los líderes arrastren a Cristo a aquellos bajo su autoridad.


¿Cuáles son los 144.000?
Revelación 14: 1 comienza con una visión de los vencedores:

1 Y miré, y he aquí el Cordero estaba de pie sobre el monte Sión, y con él ciento cuarenta y cuatro mil que tenían su nombre y el nombre de su Padre escrito en la frente.

Estos son los vencedores, no la Iglesia en general. De hecho, teniendo en cuenta que Juan escribió esto sin separar su libro en capítulos, podemos ver que "el Cordero" en Apocalipsis 14: 1 está en contraste con la Bestia de la Tierra que tiene "dos cuernos semejantes a los de un cordero" (Apocalipsis 13: 11). El verdadero Cordero (arnion), que sustituye a la falsificación no es solamente Jesucristo (la cabeza), sino que también incluye Su cuerpo de vencedores.

En cuanto a qué tribu de Israel, cada persona pertenece, apenas hay una manera hoy en día que cualquiera pueda decirlo por medios naturales. Apocalipsis 7 nos dice que hay 12.000 de cada tribu. A menudo se asume que la única manera de ser un miembro de una tribu de Israel es siendo un descendiente genealógico de uno de los 12 patriarcas de Israel. Sin embargo, este no es el caso, porque cuando Dios echó a Israel de la Tierra en el 721 antes de Cristo, Él les despojó del derecho al nombre de Israel, porque el pueblo no estuvo a la altura de ese nombre.

Cuando Dios se divorció de la Casa de Israel la echó fuera de la casa, de acuerdo con la Ley en Deuteronomio 24: 1-5. La única manera para cualquier ex-israelita de volverse a casar y recuperar el estado de "elegido" es a través de la Nueva Alianza. Incluso esto es un proceso de dos pasos, primero a través de Judá y luego a través de Israel.

Pablo nos dice en Romanos 2:28,29 que "no es judío el que lo es exteriormente", y, por el contrario, "es un judío el que lo es interiormente". Pablo estaba hablando legalmente, no genealógicamente. También puede decirse que Pablo estaba hablando espiritualmente, ya que "la ley es espiritual" (Romanos 7:14). Lo que es verdaderamente espiritual no es distinto de la Ley, sino que en realidad está destinado a la Ley. En los ojos de Dios no hay tal cosa como espiritualidad sin Ley. Sólo cuando los hombres no entienden la Ley su práctica se vuelve legalista. La verdadera espiritualidad es lícita o legal.

La Ley siempre triunfa sobre la genealogía. Había auténticos miembros de las tribus de la casa de Israel, que podían ser expulsados de Israel si cometían ciertos pecados y no se arrepentían. La Ley dice que un hombre así debía ser "cortado de entre su pueblo" (Levítico 17: 4). Por otra parte, los extranjeros siempre tenían la opción de ser objeto de la Alianza de Israel y convertirse en ciudadanos de Israel (Isaías 56: 6-8).

El primer paso es convertirse en un "judío", que es ser parte de Judá, por la fe en Su verdadero Rey y por la que se declara lealtad solo a Él. La ceremonia de bautismo en esencia es la ocasión en la que el testimonio o voto abierto de la gente expresa la fe y la lealtad, dándoles la ciudadanía en la tribu de Judá. Los que hacen esto son generalmente conocidos como "la iglesia".

Segundo paso es llegar a ser un israelita, y se le da este título a los que llevan Su testimonio. Israel significa "Dios gobierna" (aceptar la soberanía de Dios). En la Companion Bible el Dr. Bullinger nos dice en sus notas de Génesis 32:28,

"Israel -'Dios manda, ordena o gobierna'. El hombre lo intenta pero siempre, al final, falla. De los cerca de cuarenta nombres hebreos compuestas con "El" o "Jah", Dios siempre es el hacedor de lo que significa el verbo (cp. Dani-el, Dios juzga).

Jacob no se convirtió en un israelita hasta que tuvo cerca de 98 años de edad. Hasta ese momento, sin duda era un creyente en el Dios de sus padres, pero aún no había entendido la soberanía de Dios. Por esta razón, trató de ayudar a Dios a cumplir la profecía dada antes de nacer (Génesis 25:23), engañando a su padre (Génesis 27:19,24). Por su ingenio Jacob se sobrepuso a su padre, a su hermano y a su tío Labán. Luego luchó con un ángel, y cuando perdió la pelea, se sobrepuso. Ganó por la pérdida, o más bien, ganó llegando a la conclusión de que en todo su esfuerzo hasta ese momento, había estado luchando contra Dios sin saberlo. Finalmente se dio cuenta de que Dios no necesitaba su ayuda carnal para cumplir Sus promesas. Esa es la verdadera fe, y que es lo que lo hizo un vencedor.

Jacob, entonces, es un tipo de la Iglesia; Israel es un tipo del vencedorNo todos los jacobitas son israelitas. La mayoría de los cristianos tienen fe insuficiente para ser un vencedor, y por esta razón es por la que todavía se esfuerzan, sin saber cómo entrar en el reposo de Dios (Hebreos 4: 9-11). Hay otras características de un vencedor, lo que dije en mi libro, Cómo ser un vencedor (http://josemariaarmesto.blogspot.com.es/2014/04/cuatro-lecciones-de-como-ser-un.html).

Concluimos, pues, que los 144.000 vencedores no son exclusivamente genealógicos israelitas, sino que incluyen personas de todas las naciones que califican como vencedores. Ciertamente, no es el caso que se trate de 144.000 personas a quienes los hombres hoy en día llaman "judíos". Es absurda la idea popular de que "gentiles" serán arrebatados de la Tierra, dejando 144.000 evangelistas judíos predicar el Evangelio a los que de todas formas no se puede convertir, porque el Espíritu Santo se ha quitado de la Tierra.

No, este capítulo de los 144.000 viene naturalmente al cierre del dominio de la Bestia de la Tierra. Sabemos por Daniel 7:21,22 que el Cuerno Pequeño "hacía guerra contra los santos y los vencía, hasta que el Anciano de días vino, y el juicio fue pasado a favor de los santos del Altísimo, y llegó el tiempo, y los santos tomaron posesión del reino". Estos santos que han recibido el Mandato de Dominio son los 144.000 de Apocalipsis 14, que surgen después del final del tiempo del Cuerno Pequeño en Apocalipsis 13.


Su nombre en sus frentes
Revelación 14: 1 nos dice que los vencedores tienen "Su nombre y el nombre de su Padre escrito en sus frentes". Dios ha puesto Su nombre en muchos lugares a lo largo de la historia. Vemos Su nombre puesto por primera vez en el Tabernáculo en la ciudad efrainita de Silo (Josué 18: 1). Más tarde, debido a la corrupción, Dios quitó el nombre de aquel lugar y lo movió al Templo de Salomón en Jerusalén (Salmo 78: 60-68).

Unos siglos más tarde, Dios quitó Su nombre de Jerusalén, como lo había hecho antes con Silo (Jeremías 7: 12-15; 26: 6; Ezequiel 10,11). Dios entonces empleó al rey de Babilonia para destruir ese templo. Setenta años más tarde, cuando el segundo templo fue construido en los días de Esdras y Zorobabel, la gloria no llenó ese templo, porque Dios no hizo habitar allí su nombre, ni podía, porque había abandonado ese lugar "como Silo". Nunca volvió a Silo, sino que se pronunció "Icabod" sobre ella, se había apartado la gloria. Estaba esperando por un mejor templo hecho de piedras vivas. Se llenó este nuevo templo en el día de Pentecostés en Hechos 2. A partir de entonces, Su nombre fue escrito en la frente, y no en cualquier templo externo hecha de madera y piedra. Apocalipsis 3:12 dice,

12 Al que venza, yo le haré columna en el templo de mi Dios, y no saldrá de él más; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo.

Dios ya no escribe Su nombre en casas hechas de madera y piedra. Finalmente “se ha comprado la casa de Sus sueños”: los vencedores; pues Él siempre ha anhelado residir en carne humana y glorificarse a Sí mismo en nosotros. Así Revelación 22: 4 dice,

4 y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes.

Esto no es una situación temporal. Esto no va a terminar con la construcción de un tercer templo de Jerusalén. Cristo no tiene intención de abandonar la “casa de Sus sueños” y volver a un edificio mundano, en el lugar que se contaminó en los días de Jeremías. Los hombres pueden construir una estructura allí, pero nadie puede obligar a Dios a vivir en ella. Él hará lo que ha dicho en Su Palabra.


Los 144.000 Arpistas

2 Y oí una voz del cielo, como el estruendo de muchas aguas, y como sonido de un gran trueno, y la voz que oí era como el sonido de arpistas tocando sus arpas. 3 Y cantaban un cántico nuevo delante del trono y delante de los cuatro seres vivientes y de los ancianos; y nadie podía aprender el cántico, sino los ciento cuarenta y cuatro mil que habían sido comprados de la tierra.

Esta descripción es bastante diferente a la de atrás en Apocalipsis 7, que describe a los vencedores en términos militares. Allí los 144.000 son "sellados" en sus frentes. En la antigüedad, un general que revisaba las tropas después de una batalla, colocaba una marca en la frente de cada uno que regresó de la batalla ileso. Significaba que éste había sido divinamente protegido. Pero aquí en Apocalipsis 14 vemos una imagen diferente de los vencedores, donde son representados como músicos tocando arpas y cantando "una nueva canción". ¿Son los vencedores de Revelación 14 como los de Revelación 7? , pero. . .

La mejor manera de entender el Nuevo Testamento es entender el Antiguo Testamento. Se confirman entre sí y se explican mutuamente. En la mayoría de los casos, el Antiguo Testamento tiene dichos oscuros que se escriben como los tipos y sombras, y que necesitan un conocimiento del Nuevo Testamento. Pero a veces el Nuevo Testamento está claro sin conocer los tipos y sombras del Antiguo Testamento. En este caso, el libro de Apocalipsis está retratando aspectos del emergente Reino de Dios en la Tierra. En el Antiguo Testamento esto se representa en el reino de David, especialmente en lo que se contrasta con el Reino de Saúl. En el reino de David nos encontramos con que tenía tanto un ejército como un coro, y éstos eran tipos y sombras de los vencedores representados en Apocalipsis 7 y 14. En 1 Crónicas 27: 1 leemos,

1 Ahora bien, esta es la enumeración de los hijos de Israel, jefes de casas paternas, los jefes de millares y de centenas, y sus oficiales que servían al rey en todos los asuntos de las divisiones que entraban y salían cada mes a lo largo de todos los meses del año, cada división siendo de 24.000.

El resto del capítulo se explica cómo cada tribu era responsable de un mes al año para abastecer a los 24.000 hombres para el servicio militar. Las tropas rotaban cada mes durante 12 meses. Esto significa que David tenía un ejército de 288.000 hombres (24.000 x 12 = 288.000). Curiosamente, este es el doble de 144.000. Pero esta coincidencia es aún más sorprendente cuando leemos acerca del coro de David en 1 Crónicas 25: 7,

7 Y ellos fueron instruidos en el canto al Señor, con sus parientes, todos los que eran hábiles, era de 288.


Así que David tenía un coro de 288, y un ejército de 288.000. ¿Puede ser sólo una coincidencia? ¿Por qué es el número doble de 144 o 144.000? Creo que indica dos grupos de vencedores, cada uno con 144.000 en ellos. Soy consciente de que el número puede ser simplemente puramente simbólico, más que literal. Sin embargo, ya que estos son los números dados a nosotros, a continuación hablaremos de ellos como si fueran números literales de personas.

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