UNA REUNIÓN DE REYES, Dr. Stephen Jones

 




Como escribí hace un par de semanas, estaré fuera de la ciudad en breve. Darla y yo volaremos a Sudáfrica este domingo 4 de junio para asistir a la celebración del cumpleaños de Su Majestad Real e Imperial, el Dr. Rey Letsitsa III Moloi del Reino de Bakholokoe. También es el presidente de la asociación de los 13 reyes sudafricanos. Su cumpleaños es el 10 de junio y tiene una celebración de 2 días.

El rey “Letsa” (como le llamamos) también tiene previsto aprovechar esta ocasión para anunciar el lanzamiento del Reino Unido de África, en el que ha estado trabajando durante los últimos 25 años. Por ello, habrá reyes de otros países africanos que estarán presentes en esta histórica ocasión. Aquí está la invitación: (Ver foto de Cabecera)

Llevaré mi computadora portátil conmigo y tomaré fotos que podrían publicarse aquí en lugar de los blogs regulares. Esta ocasión nos permitirá encontrarnos y desarrollar relaciones importantes en toda África, tanto para los negocios como para su empoderamiento político. 

El equipo en Sudáfrica, dirigido por John, ha estado trabajando en estas cosas durante mucho tiempo, y estos esfuerzos finalmente han llegado a buen término. 

El Reino Unido de África, desde nuestro punto de vista, es el primer paso hacia el establecimiento del Reino de Dios en África. Cuando vi la gran luz en Sudáfrica en 1984, no sabía lo que significaba, pero ahora está surgiendo una imagen más clara. Habrá mucho trabajo por hacer, por supuesto (político, económico y espiritual), y no sucederá de la noche a la mañana. 

Ore para que el Reino de Dios encuentre un punto de apoyo en Sudáfrica y desde allí se extienda al mundo.

EL PECADO DE IMPACIENCIA NOS DESCALIFICA, Dr. Stephen Jones

 



LA IMPACIENCIA DE SAÚL LO DESCALIFICA

(Porción del Cap. 2 del libro 

"El Trigo y los Asnos de Pentecostés")

Saúl reunió un ejército pequeño de 3.000 hombres cuando él había reinado apenas dos años en Israel (1º Samuel 13: 2). Él tenía otros voluntarios, pero envió al resto a sus casas para identificar esto como un ejército pentecostal; recuerde que en el día de Pentecostés, en Hechos 2, había 3.000 personas que se agregaron a la Iglesia (Hechos 2: 41). Este número se repite a menudo en las Escrituras cuando está refiriéndose a una historia sobre Pentecostés. El ejército de Saúl se reunió en Gilgal, el mismo lugar donde Saúl fue coronado rey hacía sólo dos años. Una vez más, Samuel dijo a Saúl que esperara siete días (1º Samuel 13: 8). Esta fue una virtual repetición del día de la coronación de Saúl, excepto que yo creo que esta tuvo lugar en la semana de Tabernáculos. Fue su oportunidad de mostrar que él era un Vencedor que podría cumplir con la Fiesta de Tabernáculos, pero falló.

Es mi opinión que si Saúl hubiera esperado por Samuel para hacer la ofrenda, Dios habría aceptado la ofrenda mediante fuego del Cielo, como a menudo ocurría en esos días. Sin embargo, Saúl la hizo él mismo, y él encendió el fuego con "fuego extraño" —es decir, fuego natural encendido por hombre. Eso es lo que había matado a Nadab y Abiú muchos años antes (Levítico 10). Esto es, creo yo, lo que descalificó a Saúl. Esto también es lo que ha descalificado a la Iglesia, por su impaciencia en ver el "fuego" del Espíritu Santo caer sobre ellos en un avivamiento. Esos “avivamientos” demasiado a menudo se han producido por esfuerzos carnales. 1º Samuel 13: 8-10 dice:

8 Y él esperó siete días, conforme al plazo que Samuel había dicho; pero Samuel no venía a Gilgal, y el pueblo se le desertaba. 9 Entonces dijo Saúl: Traedme holocausto y ofrendas de paz. Y ofreció el holocausto. 10 Y cuando él acababa de ofrecer el holocausto, he aquí Samuel que venía; y Saúl salió a recibirle, para saludarle.

En lo natural, uno apenas podría culpar a Saúl por esto. El ejército estaba temeroso y empezando a desertar. Así que Saúl hizo lo natural, la cosa carnal. Él mismo ofreció la ofrenda quemada.

Esta historia fue escrita para que nosotros pudiéramos saber específicamente lo que ha descalificado a la Iglesia Pentecostal para gobernar en su Reino: el pecado de impaciencia. Esto se manifiesta de varias maneras.

Primero, como ya hemos mencionado, nos ponemos impacientes por nuestra espera. Entonces concluimos, finalmente, que si nosotros no lo hacemos, nadie lo hará. Así que corremos a por los fósforos y programamos los avivamientos, para que el Espíritu Santo sepa cuándo tiene que venir. Nosotros fijamos nuestros propios tiempos señalados. Samuel dijo que esperara siete días al tiempo señalado; pero Saúl se gobernaba por el miedo de los filisteos, pensando que si él esperaba más, los filisteos lo vencerían. Del mismo modo, los pentecostales también son llevados a menudo por un oculto temor de que si ellos no ven los fuegos de avivamiento cayendo pronto en la iglesia, los filisteos (la carne) los vencerá. Tienen miedo de que las personas se esparcirán (dejarán la iglesia), si ellos mismos no ceban la bomba. Pero al ofrecer el sacrificio ellos mismos, la carne prevalece, y como quiera la misma cosa que ellos temen ocurre.

En segundo lugar, debido al miedo e impaciencia, Saúl usurpó autoridad reservada a Samuel.

En tercer lugar, Saúl ofreció fuego extraño, un avivamiento artificial.

Los días de fiesta de Israel son los tiempos señalados de Dios, cuando Él divide las Edades según el nivel del Espíritu que Él ha dado. Su Espíritu fue dado externamente (Traductor: creo que en Pascua fue internamente) a Israel en la Edad de la Pascua. La garantía, o las arras, de su Espíritu fue dada internamente (Traductor: creo que en Pentecostés fue externamente, una investidura de poder) en la Edad de Pentecostés, empezando en Hechos 2. Nosotros estamos ahora al final de esa Edad y estamos en la transición a la Edad de Tabernáculos, en que pronto Él va a derramar su Espíritu a nosotros en su llenura.

Éstos son todos los tiempos señalados. Dentro de cada uno de ellos, sin embargo, hay derramamientos más pequeños llamados "avivamientos", que son gobernados por la Edad en que ocurren y se limitan a esa Edad. Pero uno tiene que conocer la voluntad específica de Dios y los tiempos señalados de esos avivamientos más pequeños también. Uno no puede fijar un avivamiento; uno tiene que buscar su rostro para saber su tiempo señalado, a menos que nosotros ofrezcamos fuego extraño en los altares de nuestros corazones y nos encontremos bajo el juicio.

Así que no seamos como Saúl que fue impaciente y ofreció el fuego extraño en el altar pentecostal. Mejor seamos como David, que también construyó un altar a Dios en el momento designado de Pentecostés, pero él se negó a encender el fuego. 1º Crónicas 21: 26 dice,

26 Y edificó allí David un altar a Yahweh, en el que ofreció holocaustos y ofrendas de paz, e invocó a Yahweh, quien le respondió por fuego desde los cielos en el altar del holocausto.

Esta ofrenda vino en el momento de la siega del trigo, porque nosotros leemos que Ornán el jebuseo estaba trillando su trigo recientemente segado, cuando David compró la era (21: 20). Él le dio a Ornán un pago inicial de 50 siclos de plata (2º Samuel 24: 24), y después le dio el pago completo de 600 siclos de oro (1º Crónicas 21: 25). Los 50 siclos de plata nos hablan de Pentecostés y las arras del Espíritu.

La ofrenda de David difirió de la de Saúl. David llamó a Dios para que derramara su Espíritu en su altar (el corazón). Él se negó a encender Pentecostés con fuego extraño. Ésta es una de las diferencias mayores entre la Compañía de Saúl y la Compañía de David de hoy. Nosotros haríamos bien prestar nuestra atención a las lecciones que Dios nos ha dado en el Antiguo Testamento.

Pentecostés será siempre caracterizado por la levadura, porque ese es el decreto divino establecido en su Ley. Nuestra única esperanza es ir más allá de Pentecostés a Tabernáculos. Pero ese es otro tiempo señalado, y nosotros tenemos que correr "con paciencia la carrera que tenemos por delante".


NO INQUIETARSE, Devocionales e-Maná

 



eManá
La Palabra de Dios diariamente enviada por correo electrónico

21 de mayo de 2023

No inquietarse

Versículos de la Biblia

Lucas 12: 22-24 Dijo luego a Sus discípulos: Por tanto, os digo: No os inquietéis por vuestra vida, qué comeréis; ni por el cuerpo, qué vestiréis. Porque la vida es más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido. Considerad los cuervos, que ni siembran, ni siegan; que ni tienen despensa, ni granero, y Dios los alimenta. ¡Cuánto más valéis vosotros que las aves!

Lucas 12: 29-31 Vosotros, pues, no busquéis lo que habéis de comer, ni por lo que habéis de beber, ni os inquietéis. Porque todas estas cosas buscan con afán las gentes del mundo; pero vuestro Padre sabe que tenéis necesidad de estas cosas. Buscad, más bien, Su reino, y estas cosas os serán añadidas.

Palabras del ministerio

Comenzando desde Lucas 12 versículo 22, el Señor les recomendó a los discípulos que no se inquietaran por sus vidas. Puesto que nuestro Padre que está en los cielos cuida de nosotros, no tenemos que inquietarnos por el alimento ni por el vestido.

En 12:31 el Señor dice: “Buscad, más bien, Su reino, y estas cosas os serán añadidas”. Debemos buscar el reino de Dios, que es en realidad el jubileo neotestamentario. Si buscamos el jubileo, el Padre nos dará alimento y vestido por añadidura. El Señor nos dice que a nuestro Padre le complace darnos el reino (v.32). Ciertamente, Él nunca se olvidará de nuestras necesidades. El Señor dice claramente: “Vuestro Padre sabe que tenéis necesidad de estas cosas” (v. 30). Estamos aquí por causa del jubileo, el reino, y ya que al Padre le complace darnos el reino, sin duda cuidará de nuestras necesidades materiales. Por lo tanto, no necesitamos preocuparnos ni inquietarnos por ellas.

Algunos de ustedes habrán tenido la idea de servir al Señor con todo su tiempo. Si ustedes sienten una profunda inclinación por servir al Señor con todo su tiempo, les animo a que lo hagan. Sálganse de “la barca” de su trabajo y tírense al agua y vean si “se ahogan”. Mi experiencia fue que después de saltar de la barca, el Señor no dejó que me ahogara. Todo necesitamos ser rescatados de nuestras inquietudes acerca de la vida. No hay necesidad de que nos preocupemos por los alimentos ni por el vestido. La provisión de estas cosas depende de la fidelidad de Dios. Él es fiel, y nosotros debemos recurrir a Él en toda necesidad. (c) 2010 Living Stream Ministry.

VENGA TU REINO, Dr. Stephen Jones

 



INFORME DE MISIONES EN EL EXTRANJERO, GKM

 


NOTICIAS PERSONALES Y MUNDIALES, GKM

 


Noticias personales y unas pocas noticias mundiales.