CÓMO LOGRAR LA PAZ EN UCRANIA, Dr. Stephen Jones (GKM)

Fecha de publicación: 12/02/2025
Tiempo estimado de lectura: 6 - 7 minutos
Autor: Dr. Stephen E. Jones
https://godskingdom.org/blog/2025/02/how-to-have-peace-in-ukraine/

El camino hacia la paz en la guerra de Ucrania no es tan difícil como parece. El camino hacia la guerra comenzó en realidad en la era Clinton, cuando la OTAN rompió su palabra y empezó a expandirse hacia Europa del Este. Estados Unidos había dado garantías al presidente soviético Gorbachov de que la OTAN no se movería “ni un centímetro hacia el este”. A cambio, la Unión Soviética aceptó dejarse desintegrar en 1991 y empezar a occidentalizarse con una forma democrática de gobierno.

Además, millones de rusos étnicos de repente se encontraron siendo ciudadanos de otros países, aislados de la propia Madre Rusia.

Las repúblicas soviéticas obtuvieron entonces su independencia y Rusia fue reinstaurada como nación. Pero los presidentes Clinton y Bush Jr. violaron el acuerdo y en 2008 comenzaron a hablar de la incorporación de Ucrania a la OTAN. Esto alarmó a los rusos, porque esto pondría los misiles nucleares a un alcance de cinco minutos de la propia Moscú. En caso de cualquier aparente ataque de la OTAN, Rusia tendría sólo unos minutos para determinar si el ataque era real o un error. No es mucho tiempo y pondría al mundo entero en gran peligro de una guerra nuclear accidental.

En 2014, el Departamento de Estado de Estados Unidos le dio a Victoria Nuland un presupuesto de 5.000 millones de dólares para derrocar al presidente ucraniano. Lo logró, e inmediatamente el nuevo gobierno dominado por Estados Unidos comenzó a perseguir a sus ciudadanos rusos. El idioma ruso fue prohibido oficialmente y, con el tiempo, también lo fueron los partidos políticos rusos. La iglesia ucraniana rusa fue objeto de persecución.

Los ciudadanos rusos de Ucrania estaban alarmados, especialmente en la parte oriental, donde constituían la mayoría de la población. Tres de las provincias orientales se separaron y declararon su independencia. Rusia negoció el acuerdo de Minsk en 2015, garantizado por Rusia y Europa, pero el gobierno ucraniano sitió las provincias orientales y el acuerdo se vino abajo (un año después, la canciller alemana Merkel admitió en una conferencia de prensa que nunca tuvieron la intención de cumplir con el acuerdo que habían firmado, sino que lo utilizaron para ganar tiempo y armar a Ucrania contra Rusia).

Se elaboró ​​un segundo acuerdo, Minsk 2, pero éste también fracasó rápidamente. Durante los siguientes ocho años, Occidente armó y entrenó al ejército ucraniano, que se convirtió en el ejército más poderoso de Europa. Europa y el gobierno de Estados Unidos se negaron a abandonar su plan de incorporar a Ucrania a la OTAN, y Rusia reconoció que esto era una amenaza existencial.

La guerra

Finalmente, en febrero de 2022, cuando los ucranianos reunieron un ejército de 50.000 hombres para sitiar la República de Donetsk, Rusia finalmente no tuvo más opción que intervenir para salvar a los rusos étnicos de la extinción y/o la esclavitud. Así comenzó la guerra. Occidente la presentó como una “invasión no provocada”, pero Rusia, de hecho, había sido muy paciente durante ocho años.

Crimea celebró entonces un referéndum y votó abrumadoramente a favor de pasar a formar parte de Rusia. Rusia accedió, en gran medida, para salvar su base naval en el Mar Negro. Occidente denunció esta votación como ilegítima, por supuesto, pero no hay duda de que la población étnica rusa local quería pasar a formar parte de Rusia. Así que Rusia se anexionó Crimea.

Un mes después del inicio de la guerra, se rubricó otro acuerdo de paz en Turquía, que dejaba a las repúblicas separatistas en Ucrania, pero les otorgaba un cierto grado de autonomía. Boris Johnson fue enviado por el Reino Unido a Kiev para exigir que el presidente Zelenski renunciara al acuerdo a cambio de un respaldo militar ilimitado. Zelenski obedeció, y eso garantizó que la guerra continuara.

Las repúblicas separatistas celebraron un referéndum en septiembre de 2022 y votaron abrumadoramente a favor de pedir a Rusia que les permitiera convertirse en parte de Rusia. Rusia cumplió con la norma que otorga a los pueblos el derecho a la autodeterminación.

¿Cómo se logra la paz? 

Desde el comienzo de la guerra, Rusia ha declarado que tiene los siguientes objetivos: 1) Que Ucrania se mantenga neutral y no pase a formar parte de la OTAN; 2) Que Ucrania reconozca las provincias orientales (y Crimea) como parte de Rusia; 3) Que Ucrania se desmilitarice para que no siga siendo una amenaza para Rusia; 4) Que Ucrania adopte un programa de “desnazificación” para librarse de la poderosa facción nazi y de sus brigadas de Azov.

Estas condiciones no son negociables por lo que respecta a Rusia, salvo quizás la cuarta condición, que podría dejar de lado. Después de todo, si Ucrania quiere ser un régimen nazi, tal vez tenga ese derecho, siempre y cuando no represente una amenaza militar para Rusia.

Las sanciones

Antes daba más crédito al intelecto de los expertos estadounidenses, pero ahora los considero bastante estúpidos. Al imponer sanciones a Rusia, pensaron que podrían causar un caos económico que podrían usar para derrocar al presidente Putin. Pero en ésto el tiro les salió por la culata. Cuando a Rusia ya no se le permitió importar productos occidentales, comenzó a producirlos por sí misma. Cuando a Rusia ya no se le permitió exportar petróleo y gas baratos a Europa, fueron los europeos los que sufrieron.

El resultado fue que los precios del petróleo se dispararon y Rusia encontró nuevos mercados en Asia. Rusia empezó a acumular superávits financieros que le permitieron apoyar el esfuerzo bélico sin aumentar su deuda nacional. Al mismo tiempo, Rusia empezó a reindustrializarse a un ritmo acelerado, tanto que su economía se calentó demasiado rápido. Las empresas pidieron dinero prestado a los bancos para producir todo lo que ya no podían comprar en Occidente.

Esta creación de nuevo dinero generó cierta inflación, no porque se creara demasiado dinero, sino porque se estaba reindustrializando demasiado rápido. Mientras tanto, Alemania se estaba desindustrializando, porque su industria tenía que pagar mucho más por la energía, que Estados Unidos le vendía a un precio cuatro veces superior.

Ahora la economía de Europa se está reduciendo, mientras que la economía de Rusia se está expandiendo a una tasa del 4,1% (en 2024). Las sanciones occidentales, impuestas por las mentes brillantes de los políticos estadounidenses, le han hecho un gran favor a Rusia, al tiempo que han destruido la economía de Europa. Esto se analiza aquí:

https://www.youtube.com/watch?v=3iKFptuqVaM

Dios endureció el corazón del faraón

Se sabe que Dios endurece el corazón de aquellos a quienes quiere destruir. Vemos esto con mayor claridad en el caso del Faraón en su conflicto con Moisés. Dios podría haberles facilitado a los israelitas la salida, pero no lo hizo. Después de todo, Egipto se encontraba en un patrón de Tiempo Maldito (414 años), y por eso estaba destinado a ser destruido en ese momento (véase mi libro, Secretos del Tiempo).

Me parece que Dios está haciendo lo mismo con la Babilonia misteriosa y sus funcionarios gubernamentales occidentales. Sería fácil detener la guerra y la locura económica, simplemente garantizando que Ucrania nunca se unirá a la OTAN. Pero no, eso sería demasiado lógico. La intención de Dios es derrocar a la Babilonia moderna, utilizando a los Reyes del Oriente (Apocalipsis 16: 12).

Así que los que vivimos en Babilonia debemos prepararnos para una cierta cantidad de caos en el futuro cercano. Sobre todo, tengamos en cuenta que este caos no está diseñado para juzgarnos, sino para liberarnos de nuestros amos babilónicos, de la misma manera que el rey persa Ciro fue enviado para liberar al pueblo de Judá en el año 537 aC. Prepárense para el caos de cualquier manera que puedan, pero lo más importante es que se preparen para salir de Babilonia y reconstruir el Reino, la Nueva Jerusalén. 

Esta no es simplemente una guerra al otro lado del mundo. Es un cambio global y una nueva Edad de Paz para los próximos mil años.