Examinen todo y retengan lo bueno, especialmente eso de ordenar, declarar o decretar, cuando no estén ciertos de que han oído a Dios claramente al respecto. Puede que las palabras proféticas que publicamos sean palabras de Dios para alguno de los que hacemos o los que siguen este blog. Son palabras que a nuestro entender pueden encajar con el kairos (tiempo o sazón propicio) general y/o personal que nosotros pensamos que está aconteciendo. Puede que también sean oportunas para los kairos personales de sus propias vidas en el Señor. Pero seamos especialmente cautos en la apropiación personal de las palabras proféticas; sobre todo cuando sean muy complacientes con nuestros deseos y gustos carnales. Pidamos discernimiento para saber si Dios las está usando para confirmar lo que Él ya nos ha estado hablando/haciendo en nuestras vidas. Así evitaremos equivocaciones y frustraciones innecesarias con los tiempos de Dios, por tratar de escoger aquello que queremos oír en lugar de lo que necesitamos oír.
Igualmente, queremos dejar constancia de que hay veces, y desgraciadamente no pocas, en que los dones del profeta no van acordes con la maduración de su carácter; por esa razón, la publicación de palabras proféticas de diferentes personas en este sitio, no significa que forzosamente estemos de acuerdo con sus ministerios o prácticas ministeriales y/o personales.
JOSÉ
Irlanda: ¡Levantarse ahora está dando paso a Resplandecer!
“Levantarse ahora está dando paso a Resplandecer, ¡y Resplandecer está dando paso a una gran Manifestación de los Hijos de Luz!”
¡Amigos, quiero compartir algunos aspectos más destacados de nuestra Conferencia Arise, Shine de Irlanda!
“Levántate, resplandece, porque mi gloria ha nacido sobre ti… Las naciones serán atraídas al resplandor de tu amanecer”. Isaías 60: 1
“¡El Levantarse da paso al Resplandor, el Resplandor, da paso al Manto de Gloria, que es recibido y revelado a los hijos, y esa impartición del Manto de su Gloria da paso a los hijos que se Levantan con la manifestación de su Luz en la oscuridad!”
Es en el lugar de la intimidad que nos convertimos. ¡Es por llegar a ser (en plena estatua de madurez como Hijos), que calificamos para llevar el Manto de Gloria, porque el Peso de su Gloria se asienta sobre el fundamento de la Intimidad y la Pureza, y la Verdadera Filiación siempre dará paso a la plena manifestación y expresión de la Voluntad del Rey!
Si no nos levantamos (subimos más alto a través de la intimidad), ¡no brillaremos! (¡Porque nos convertimos en lo que contemplamos!)
La Autoridad y la Unción solo pueden fluir de una Identidad Establecida.
Y si no nos despertamos y nos levantamos,
- Nunca recibiremos la Revelación completa de nuestra Verdadera Identidad y Autoridad en Cristo;
- No nos convertiremos en aquellos que califican para Brillar con el Manto de Gloria;
- No calificaremos para llevar el Peso de su Gloria;
…. ¡porque no tendremos la capacidad, ni la Pureza, para llevar el Fuego y la Gloria!
¡Levántense! ¡Brillen guerreros! ¡Y reinen!
Escucho al Espíritu decir: “Llama a mi Pueblo al Altar en Arrepentimiento.
Llámalos al lugar de Fuego y Poder, porque esta es una hora crítica y estratégica. No hay tiempo que perder.
¡Escuchad! Porque hay un sonido de celebración en el campamento del enemigo, ya que anticipa mayores victorias.
¡Pero digo, no! Porque he preparado un Remanente para un tiempo como este, un Pueblo Santo y Apartado, Audaz, Valiente y sin Miedo, frente al enemigo.
Porque se han apoderado de los Cuernos del Altar, y el sonido de sus gritos en Verdadero Arrepentimiento, han llenado la Sala del Tribunal del Cielo.
Sus lágrimas han llenado los Cuencos Dorados, y sus Oraciones, día y noche, han llenado mis Fosas Nasales como un perfume de dulce olor.
Porque viene un punto de inflexión repentino y divino que frustrará las obras del reino de las tinieblas. Porque os digo la verdad, el sonido de las celebraciones del enemigo pronto será silenciado por el sonido del rugido del león de Judá.
¿No he dicho que la Guerra ya ha sido peleada y ganada?
¡Porque el enemigo fue derrotado antes de que se disparara un solo tiro, antes de que se desenvainara una espada, antes de que se levantara un escudo!
Amado, ¿no he puesto dentro de ti el Poder para Prevalecer contra tus enemigos que te persiguen sin descanso?
¿No he puesto dentro de vosotros la fuerza para manteneros firmes e inconmovibles, frente a cada embestida satánica y demoníaca que viene contra vosotros?
¡No temáis! ¡Mientras os entreguéis completamente a la obra de mi Reino, os mantendréis firmes y veréis la Salvación del SEÑOR cumplida para vosotros!
¡Ahora, aferraos a estas Verdades, mis Vencedores! Porque es vital para que la Victoria se manifieste en medio de vosotros.
Mientras permanezcáis sentados conmigo en los lugares celestiales, Satanás seguramente perderá la batalla en los lugares terrenales, porque estas luchas no son contra sangre y carne, sino contra los gobernantes, contra las autoridades, contra los poderes de este mundo tenebroso y contra las fuerzas espirituales del mal en el reino celestial.
Recordad siempre, mis Guerreros Intrépidos, Satanás sólo puede tomar lo que se le ha dado el derecho legal de tomar, porque cuando los Altares son descuidados y derribados, el devorador tiene pleno acceso para tomar terreno, ocupar territorio y establecer su reino de destrucción en la Tierra.
Satanás es el destructor y un torturador implacable, un viejo y traicionero adversario que odia a mis Justos y Redimidos.
Día y noche pone trampas y cava profundas zanjas para los pies de los Santos. Silenciosa y astutamente, se arrastra en las sombras, observando y esperando a aquellos que se han aislado y cortado del resto del Cuerpo, y como un león ahuyentado y expulsado de entre la manada, Satanás sabe que su fuerza no es rival contra él.
¡Así que levantaos Guerreros del Remanente! ¡Es hora de reinar, gobernar y rugir! Expulsarlo, y someter sus reinos terrenales y Reinar Victoriosos en el Reino de los Cielos.
¡Levantad vuestras voces como el sonido de muchas trompetas sonoras, y dejad que el Grito de Victoria en Batalla avance, y observad cómo los muros se derrumban!
¡Levántate! Es Hora, porque os he Coronado como Reyes y Sumos Sacerdotes, para que os sentéis en el Trono para compartir mi Autoridad y Poder, para que mi Gloria sea vista en toda la Tierra.
Esta es mi mayor Alegría, Amados, que podamos ser Colaboradores juntos, yendo a las Naciones para desmantelar fortalezas y destronar a los príncipes de las tinieblas.
Ciertamente, he invertido todo lo que tengo, y todo lo que YO SOY, en ti, para que la herencia que te he prometido, no se pierda ni sea robada.
Entonces, ¡tómala ahora! ¡No tienes que esperar! La riqueza de las Naciones te pertenece.
Mientras tú Reinas en Mí y Yo Reino en ti, mi Gloria se manifestará en la Tierra, y la Luz de mi Hijo disminuirá las tinieblas, y mi Voluntad se hará, y mi Reino vendrá a la Tierra, como es en el Cielo!”
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