TÉRMINOS BÁSICOS DE LA ESCRITURA
Dr. Stephen Jones
1
¿QUÉ ES EL EVANGELIO?
Recientemente, me pidieron que hiciera una serie que definiera algunos términos básicos en las Escrituras. Como todos sabemos, aunque todos hablemos el mismo idioma, tendemos a definir los términos de manera diferente, y esto es un impedimento para la comunicación. Lo que una persona dice no es necesariamente lo que otra persona escucha.
Hoy definiremos el Evangelio.
Para la mayoría de los cristianos, el evangelio es la buena noticia de que Jesús murió en la cruz para pagar por los pecados de aquellos que lo aceptan como su Salvador. Si bien esto es ciertamente verdad, no es el cuadro completo, ni esta definición abarca todo el alcance del evangelio.
Muchos cristianos han aprendido que la palabra significa “buenas noticias”. Pero, ¿cuán tan buenas son esas noticias? ¿Son las buenas noticias de que Cristo salvará quizás al dos por ciento de la humanidad, o menos, considerando cuántas generaciones nunca escucharon el evangelio hasta los últimos 200 años?
La palabra hebrea para evangelio es basar. La palabra tiene un doble significado: “carne” y “buena noticia”. Su equivalente griego, usado en el Nuevo Testamento, es evangelion. Debemos entender que los escritores del Nuevo Testamento pensaban en hebreo, aunque las palabras nos hayan llegado en griego. Dicho de otra forma, las palabras griegas deben definirse de acuerdo con sus equivalentes hebreas. Por esta razón, debemos buscar la palabra hebrea basar para definir el evangelio.
A menudo es muy útil encontrar el primer uso de una palabra clave en las Escrituras. En este caso, la primera vez que la Biblia usa la palabra basar es en Génesis 2: 21, 23,
21 Y Yahweh Dios hizo caer sueño profundo sobre el hombre, y se durmió; luego tomó una de sus costillas y cerró la carne [basar] en ese lugar… 23 El hombre dijo: “Esto es ahora hueso de mis huesos y carne [basar] de mi carne [basar]; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada”.
Esta es una traducción precisa que describe el origen de la mujer que “fue sacada del hombre” (Génesis 2: 22). Pero en un nivel más profundo, podríamos traducir esto así: “Tomó una de sus costillas y cerró el evangelio en ese lugar”. En otras palabras, fue a través del evangelio que la mujer se convirtió en “hueso de mis huesos y carne de mi carne”.
Esto profetiza de la Novia de Cristo, que es llamado “el postrer Adán” (1ª Corintios 15: 45). Es a través del evangelio de la carne de Cristo que Su Novia es sacada. La propia interpretación de Jesús de esto se encuentra en Juan 6: 53-55,
53 Entonces Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo, que si no coméis la carne del Hijo del hombre y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros mismos. 54 El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y Yo lo resucitaré en el último día. 55 Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida.
Somos lo que comemos. Si comemos su carne [evangelio] y bebemos su sangre, Él nos reconoce como “hueso de mis huesos y carne de mi carne”. Esta es la verdadera unidad: convertirse en “una sola carne” (Génesis 2: 24). También se trata de que sea “un solo evangelio” (basar), que es tener un mensaje unificado, creer la misma verdad, hablar las mismas cosas y hacer las mismas cosas. Es ser un pueblo Amén. La Compañía Amén son los que dan testimonio de lo que Dios dice y hace. No exigen que Dios dé testimonio de sus propios puntos de vista sobre lo que Dios debe hacer.
Comer la carne de Cristo es creer (asimilar) el evangelio que Él enseñó. Beber su sangre es compartir su muerte en la cruz al crucificar el “viejo hombre” de la carne (Romanos 6: 6), para que podamos cambiar nuestra identidad al “nuevo hombre” que es engendrado por el Espíritu. Esto, por supuesto, está representado por la Comunión (Mateo 26: 26-29).
La palabra basar también se usa en Isaías 61: 1, “me ha ungido el Señor para traer buenas nuevas [basar] a los afligidos”. La palabra basar se traduce como “evangelio” en Lucas 4: 18.
Si examinamos basar más de cerca, notamos que una "b" (beth) delante de una palabra a menudo significa "en". La palabra sar significa “príncipe”. Por lo tanto, basar puede verse como “en el príncipe”. Al comer la carne del Príncipe de la Paz, entramos en su Cuerpo.
Nuevamente, la letra beth también es una casa/hogar, y basar, entonces, es “la casa del Príncipe”. Al comer su carne, nos convertimos en parte de “la familia de la fe” (Gálatas 6: 10). Allí nos sentamos a su mesa para que tener compañerismo (Comunión) con Él diariamente, discutir y asimilar la verdad y ser transformados a su imagen, hasta convertirnos plenamente en “hueso de sus huesos y carne de su carne”.
Este es el Evangelio del Reino. Es mucho más de lo que los hombres llaman el Evangelio de la Salvación, a menos, por supuesto, que uno tenga una comprensión más completa del significado de la Salvación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Agradecemos cualquier comentario respetuoso y lo agradecemos aún más si no son anónimos. Los comentarios anónimos no serán respondidos.