EL LLAMADO RETRASADO - Parte IX

 

Habiendo finalmente renunciado a la Red de Oración, entré en obediencia a la palabra del Señor que me fue dada en julio de 1986. Esto me permitiría dejar Memphis (“Egipto”) poco tiempo después, poniendo fin a mi experiencia de esclavitud egipcia.

Recordemos que un año antes (1988) me habían dado la Palabra de que regresaría pronto a Arkansas y que vendría de un barrio que no esperaba. La Palabra decía que recibiría una llamada telefónica de "Mi siervo" (es decir, un creyente) que me iba a ofrecer un trabajo.

Más tarde, cuando pregunté acerca de salir de Egipto, también recibí la revelación de "llamar a tu hijo", así como Dios había llamado a su hijo (Israel) fuera de Egipto (Oseas 11: 1), y nuevamente cuando José y María se llevaron a Jesús de Egipto de regreso a la tierra de Judea (Mateo 2: 15). Esa Palabra también confirmó el ciclo de ocho días del 21 al 29 de noviembre.

En realidad, esto se cumplió un año después, el 29 de noviembre de 1989, cuando un antiguo compañero de trabajo me llamó por teléfono y me ofreció un trabajo en Leachville (Traductor: Villa de Lixiviación, lixiviar: 1. tr. Quím. Tratar una sustancia compleja, como un mineral, con un disolvente adecuado para separar sus partes solubles de las insolubles), AR. Derek era un artista gráfico en Batesville (villa de bates) cuando yo era tipógrafo en la misma imprenta. Habíamos perdido el contacto cuando él se mudó a otro trabajo y cuando yo me mudé a Memphis.

Literalmente estaba esperando expectante la llamada telefónica del 29 de noviembre de 1989, porque tenía muy claro que alguien llamaría ese día. Aun así, me sorprendió escuchar la voz de Derek. Explicó que la empresa para la que trabajaba en Leachville necesitaba a alguien que administrara su departamento de artes gráficas y que enseñara a sus empleados a configurar la tipografía. Se disculpó por no haber pensado en mí antes, sin darse cuenta de que Dios lo había cegado hasta el momento señalado.

Supe de inmediato que debía aceptar ese trabajo, por lo que fui a una entrevista el 4 de diciembre, que era el aniversario del día en que los ancianos habían exigido mi renuncia en 1981. Es decir, en 1981 perdí mi trabajo como pastor, pero ocho años después, en 1989, me dieron un trabajo. Ese fue un paralelo interesante para mí.

Me tomó más de un mes encontrar un lugar para vivir en Leachville. Mientras tanto, alquilé una habitación en la ciudad y me trasladé al trabajo desde Memphis, volviendo los fines de semana para ver a mi familia. Finalmente, me dijeron de una casa que estaba a la venta, que tal vez el dueño podría estar dispuesto a alquilarme. Cuando hablé con él, decidió alquilarla, ya que llevaba mucho tiempo en el mercado sin compradores a la vista.

Después nos mudamos el sábado 27 de enero de 1990 y la dirección era Rt. 2, Box 76, Leachvile. Durante los siguientes nueve meses trabajé en Printers and Publishers, propiedad de Redbook Florists, cuya sede se encontraba en las cercanías de Paragould, MO.

Mi reposo jubilar

Trabajé muchas horas como gerente del departamento de artes gráficas. Nuestro trabajo principal era componer anuncios para el directorio telefónico de 2400 páginas de Redbook, que se publicaba cada dos meses. Teníamos cuatro tipógrafos que trabajaban en turnos de 12 horas las 24 horas del día. También teníamos otra docena de maquetistas.

La empresa estaba muy atrasada en su trabajo cuando llegué por primera vez. Los tipógrafos necesitaban formación, porque mi predecesor no había entendido el arte de la composición tipográfica. Había mucha redundancia incorporada, que pronto optimicé para hacerla más eficiente. En una reunión mensual de los jefes de departamento, me pidieron un informe, por lo que les conté lo que hice para agilizar el trabajo.

Pero no me di cuenta de que mi predecesora era la esposa del vicepresidente. No estaba satisfecho con mi informe, ya que hacía quedar mal a su esposa. Sin embargo, no me dijo nada (a mí), porque la empresa me necesitaba con urgencia para ponerse al día con el trabajo pendiente.

El 20 de agosto, el Señor me habló y dijo: "La obra de Restauración está lista para comenzar". No estaba seguro del significado de esa Palabra, ya que estaba trabajando febrilmente para ponerme al día con el trabajo a fines de septiembre. (La empresa publicaba una guía telefónica adicional para otra empresa de floristería una vez al año en septiembre, lo que nos generó una carga de trabajo doble).

El 25 de agosto, el Señor me habló de nuevo y me dijo: "Te redimí y te liberé de la esclavitud del mundo". Entonces supe que mi trabajo terminaría pronto, y comencé a capacitar a los tipógrafos para que ya no necesitaran que los instruyera. "No estaré aquí para siempre, ya sabéis", les dije.

El 24 de septiembre escribí en mis notas: “Decisión de mudarme pronto. Ahora sé que no estaré aquí más allá de un año".

El 27 de septiembre, mientras sacaba las últimas páginas del directorio telefónico por la puerta del departamento de impresión, el jefe se acercó a mi escritorio y me dijo: "Cuando termines, ven a mi oficina". Cuando llegué a su oficina, me dio una nota rosa, que me despedía. En el recibo estaba escrito el motivo: "Incapacidad para cumplir con las políticas de la empresa".

¿¿Qué?? Creo que la verdadera razón fue que el vicepresidente estaba resentido conmigo, pero se vio obligado a esperar hasta que estuviéramos al día con el trabajo pendiente. Entonces, cuando finalmente terminamos, ese fue el final de mi trabajo.

Pero el jefe fue lo suficientemente generoso como para pagarme un día extra de trabajo para terminar la semana. Me pagaron hasta el viernes 28 de septiembre. Esa noche fue el comienzo de Yom Kipur, el Día de la Expiación, y me di cuenta de que Dios me había redimido y liberado en Yom Kipur, el mismo día en que se tocaba la trompeta del Jubileo en tiempos bíblicos. Me habían dado mi Jubileo "de la esclavitud del mundo".

Seguí buscando trabajo, como se requería para obtener cheques de desempleo, pero no había nada disponible. El arte de la composición tipográfica estaba cambiando. Sabía cómo operar cuatro marcas diferentes de equipos de foto-composición, pero la auto-edición era el futuro. Así que mi carrera como tipógrafo terminó justo cuando llegaba la nueva tecnología. El momento fue perfecto.

El Jubileo de la Creación

Como parecía que no podía encontrar otro trabajo, dediqué mi energía a escribir el Jubileo de la Creación en mis boletines de Fundación para la Intercesión (FFI). Comencé a escribir este boletín mensual en abril de 1988 con el fin de sentar las bases de la enseñanza en preparación para la campaña de oración “Estas Piedras”.

Habiendo recibido una revelación del Jubileo en agosto, fui movido a escribir una serie de enseñanzas sobre el Jubileo. La primera de las series del Jubileo de la Creación se envió a finales de septiembre, justo cuando estaba a punto de perder mi trabajo. Entonces creí que esto era lo que Dios me había asignado que hiciera, ahora que tenía mucho más tiempo libre.

Sabía que mi formación de 12 años no terminaría hasta noviembre de 1993, pero también sabía que “la obra de Restauración está lista para comenzar” (20 de agosto de 1990). Dios me había dado un año de terapia de trabajo duro para reajustarme y estabilizarme después del trauma de renunciar a la NOP. Supuse que conseguiría otro trabajo, pero eso no iba a suceder. En cambio, comencé a prepararme para el trabajo ministerial de tiempo completo.

En febrero de 1991 decidí trabajar duro para terminar la serie sobre el Jubileo de la Creación, escribiendo muchos boletines de FFI antes de tiempo. (La Guerra del Golfo se libraba entonces en Irak). También comencé a dar formato a estos estudios en forma de libro. Finalmente terminé el 14 de marzo de 1991, y el mismo día llegó por correo un cheque por $ 2,000 que estaba destinado a gastos de impresión.

Así que al día siguiente conduje hasta Jonesboro y hablé con mi antiguo jefe, Preston Williams, propietario de la imprenta en la que había trabajado durante una temporada a finales de 1987. Aceptó imprimir 1.000 copias de Jubileo de la Creación por 2.000 dólares.

Ese mismo día, vi la entrevista de Barbara Walters con Normal Schwartzkopf en su cuartel general clandestino en Arabia Saudita. La guerra había terminado dos semanas antes. Se informó entonces que su cuartel general se llamaba "la mazmorra" y el general se llamaba "el oso". Cuando sonrió, vi su diente de oro y recordé las visiones que había tenido en 1986 de una mazmorra en Arabia Saudita y una bestia con forma de oso (el Príncipe de Persia) con un diente de oro. Eso confirmó las visiones y me dio la comprensión de todo lo que había visto.

El 16 de marzo recibí mi último cheque de desempleo.

El 31 de marzo finalmente recibí una idea de que la batalla espiritual entre Chuck y yo en octubre de 1989 estaba directamente relacionada con los eventos de la Guerra del Golfo en febrero de 1991 por un ciclo de 490 días. La guerra había terminado el 28 de febrero, precisamente 490 días después de que yo mismo llegara a una posición de "descanso" el 26 de octubre de 1989. Cuando nuestra batalla concluyó, la Guerra del Golfo terminó 490 días después. El ciclo de 490 días también sugirió que estaba entrando en Tiempo Bendito.

Cuando recibí otro cheque de $ 2,000 el 3 de abril de 1991, tomé la decisión de conducir hasta California para visitar a Lalo Cadona y aprender lo que él sabía sobre Tiempo Maldito, Tiempo Bendito y Tiempo de Juicio. Esto lanzó mi segundo proyecto después del Jubileo de la Creación, y al año siguiente iba a publicar Secretos del Tiempo en Profecía, que luego se expandió en un libro más grande llamado Secretos del Tiempo .

Mientras tanto, publicamos nuestra primera edición del Jubileo de la Creación en junio de 1991. Se convirtió en la enseñanza fundamental de Ministerios del Reino de Dios.

Una copia anticipada inesperada

En enero de 1991, cuando había escrito alrededor de un tercio del Jubileo de la Creación, Carlos y Shelly recibieron una copia anticipada del libro. No los conocería hasta abril de 2000, pero en 1991 estaban haciendo ministerio de música en una iglesia en Champaign, Illinois. Un hombre se acercó a Shelly y le ofreció un libro. Ella lo tomó y (como era su costumbre) miró la fecha de los derechos de autor. Decía, 1994, siendo la segunda edición del Jubileo de la Creación. Cuando buscó al hombre que le dio el libro, había desaparecido.

Ella puso los ojos en blanco y dijo: “¿Qué tipo de operación de dos bits es esta? ¡Ni siquiera pueden obtener la fecha correcta de los derechos de autor!" Le dio el libro a su esposo, Carlos, quien lo llevó a la oficina pero nunca lo leyó. Finalmente se mudaron a un suburbio al sur de Minneapolis en 1999, y los conocí un año después.

Compartimos la idea de la Restauración de Todas las Cosas con ellos durante los próximos meses. Finalmente, en agosto, Shelly estaba en su cocina orando: “Señor, solo soy uno de tus estúpidos hijos. Realmente creo en este mensaje de Restauración, pero me han engañado antes. Por favor, dame alguna señal o confirmación de que esto es realmente cierto".

Unos minutos más tarde, Carlos subió del sótano, donde había estado desempacando libros. Subió las escaleras, pálido como una hoja, sosteniendo el libro Jubileo de la Creación, que les habían regalado en 1991, y que nunca habían leído. Shelly se asustó al darse cuenta de que había recibido ese libro más de nueve años antes.

Sucedió que vine a visitarlos como media hora después. Ella me contó la historia. Bueno, por supuesto, mi primera pregunta siempre es: "¿Cuándo sucedió esto?" El tiempo es mi fetiche. Cuando me dijo que había recibido el libro a fines de enero de 1991, le dije que ni siquiera había terminado de escribir el libro en ese momento. La primera edición se imprimió en junio de 1991 y la segunda edición se publicó en 1994.

¿Alguien más sospecha alguna actividad angelical aquí?

He escuchado la historia muchas veces y he visto el libro real que el hombre le dio en 1991. Pero nunca pude contar la historia tan bien como ella. Ella es la Reina del Drama, y nunca nos cansamos de escucharla contar la historia como solo ella puede.

https://godskingdom.org/blog/2021/04/the-delayed-calling-part-9