04-03-2020
El
nombre de Isaías es una versión abreviada del hebreo,Yesha yahu,
"Yahweh salva". Así que su mensaje principal fue decirle a
Israel, como lo expresó Pablo, "todo Israel será salvo"
(Romanos 11: 26). Luego, Pablo cita Isaías 45: 25 en apoyo de esta
declaración. La cita de Pablo era parte de un pasaje más largo de
Isaías 45: 22-25,
22
Volveos a Mí y sed salvos, todos los confines de la tierra; porque
yo soy Dios, y no hay otro. 23 He jurado por Mí mismo, la palabra ha
salido de mi boca en justicia y no se volverá, que a Mí toda
rodilla se doblará, toda lengua jurará lealtad. 24 Ellos dirán de
Mí: "Solo en Yahweh hay justicia y
fortaleza". Los hombres vendrán a Él, y
todos los que estaban enojados con Él serán avergonzados. 25 En
Yahweh todos los descendientes de Israel serán justificados y se
gloriarán.
Más
que cualquier otro pasaje, esto encapsuló el mensaje de Isaías y
dio esperanza a través del voto del Nuevo Pacto de Dios mismo.
Debido a la "justicia" de
Dios, Él mantendrá Su Palabra. Debido a la
"fortaleza" de Dios, Él
puede cumplir Su palabra a pesar de cualquier oposición.
Estos dos conceptos clave son la razón del éxito del Nuevo Pacto.
La
mayoría de los cristianos de hoy no entienden la naturaleza de los
pactos. Se les dice que el Antiguo Pacto es condicional y el Nuevo
Pacto es incondicional. Esto es realmente cierto, pero no aclara el
asunto lo suficiente. El Antiguo Pacto está condicionado a la
respuesta y obediencia del hombre; el Nuevo Pacto es incondicional,
ya que depende totalmente de la voluntad y la capacidad de Dios de
mantener Su juramento.
El
concepto cristiano habitual de salvación hoy está esencialmente
basado en un pacto condicional: el Antiguo Pacto. ¿Por qué? Porque
para ellos las promesas de Dios no tienen efecto si no hay respuesta
del hombre. Como la mayoría de los hombres no responderán durante
su vida, se supone que la muerte es la gran fecha límite para la
salvación. Por lo tanto, solo un pequeño porcentaje de personas
puede salvarse a través de este método del Antiguo Pacto.
Por
otro lado, el Nuevo Pacto pone la responsabilidad incondicional de
salvar a cualquiera y a todos sobre Dios mismo. No se limitó a jurar
hacer posible que cumplamos nuestros votos del Antiguo Pacto. No,
Dios hizo un voto de salvar a toda la humanidad, y este voto está
potenciado en Su fortaleza y habilidad para cumplirlo en justicia.
"Toda
rodilla se doblará".
"Toda
lengua jurará lealtad".
¿Cuándo?
Obviamente, para la mayoría de las personas, esto ocurrirá en el
juicio del Gran Trono Blanco después de que hayan resucitado de
entre los muertos en la Resurrección General. Por lo tanto, la
muerte no es una fecha límite para la salvación; es solo una
fecha límite para calificar como vencedor y ser resucitado en la
Primera Resurrección y, por lo tanto, recibir "vida
eterna" (es decir, vida aioniana en la Edad del
Milenio).
Es
solo porque "Dios puede" que podemos tener confianza en el
Nuevo Pacto, ya que se basa totalmente en la soberanía de Dios. De
hecho, utilizando el principio del Espaciado Equidistante de Letras
(EEL), si comenzamos con la primera yod de Génesis 1: 1, cada
521º letras de ahí en adelante se escribe en hebreo, Yahshua es
capaz. Por lo tanto, la soberanía de Dios, es decir, la
capacidad de Dios para cumplir Su voluntad, es uno de los principios
más antiguos y fundamentales incorporados en las Escrituras.
Mientras
que el EEL en Génesis establece la fuerza y la capacidad de Yahshua
en la Creación, el juramento del Nuevo Pacto en Isaías 45 establece
la fortaleza y la capacidad de Yahshua para salvar no solo a Israel
sino a "todos los confines de la tierra". En otras
palabras, a pesar de todo el pecado, toda la rebelión y, sí,
incluso a pesar de todos los juicios divinos, Dios aún puede hacer
el juramento de que "cada rodilla se doblará, cada lengua
jurará lealtad".
En
otras palabras, puede salvar y restaurar todo lo que creó en Génesis
1: 1. El EEL de 521 que comienza con la primera yod de
Génesis 1: 1 también pone a Yahshua-Jesús en el cuadro "en
el principio". Juan 1: 2 confirma esto, diciéndonos que
Cristo, el Logos, "estaba en el principio con Dios".
Esto establece la preexistencia de Cristo.
El
significado del nombre 'Isaías'
El
profeta Isaías era un tipo de Cristo, incluso en su nombre y su
significado hebreo. Su libro de profecías muestra los juicios de
Cristo sobre Israel a causa de su pecado, así como la capacidad de
Cristo para restaurar la nación a causa de la justicia de Dios. El
profeta era simplemente un portavoz, portavoz a través del cual
Cristo habló juicio y salvación.
Es
obvio, entonces, que el juicio fue temporal y de naturaleza
correctiva. El juicio vino sobre ellos por violar su voto del Monte
Horeb (Éxodo 19: 8), un voto que llamamos el Antiguo Pacto. Al no
poder cumplir su voto, fueron juzgados. Pero Dios también hizo un
voto, que conocemos como el Nuevo Pacto, primero con Noé (Génesis
9: 9), luego con Abraham (Génesis 12: 2-3), y aún más tarde con
Moisés (Deuteronomio 29: 12-15) al final del viaje por el desierto
de Israel, un pacto que Josué (Yahshua) recibió el encargo de
implementar (Deuteronomio 31: 23).
Un
portavoz es esencialmente un agente. Entonces podemos llamar a Isaías
el agente de Cristo. Un buen agente no habla por iniciativa propia;
solo habla lo que oye de otro. Lo llamamos "inspiración",
y es por eso que creemos que toda la Escritura está inspirada (2ª
Timoteo 3: 16). Así como Cristo fue el Agente de Su Padre, también
Isaías fue el agente de Cristo. De hecho, todos los que son
inspirados por el Espíritu Santo son agentes de Cristo, comisionados
como embajadores del Reino.
El
mensaje de salvación de Isaías estaba fundado en el Nuevo Pacto,
a pesar de que él era un profeta en una época en que el Antiguo
Pacto dominaba. Pero como hemos visto, el Nuevo Pacto en realidad
precedió al Antiguo Pacto, y se expuso claramente tanto a Noé como
a Abraham. Por lo tanto, como Pablo nos dice en Gálatas 3: 17,
las promesas del Nuevo Pacto a Abraham no pueden ser invalidadas por
el pacto condicional que vino 430 años después en el tiempo de
Moisés. No, el Nuevo Pacto tiene mayor autoridad y el poder de
limitar la jurisdicción del Antiguo Pacto.
Introducción
al primer mensaje de Isaías
Isaías
1: 1 comienza,
1
La visión de Isaías, hijo de Amoz, acerca de Judá y Jerusalén,
que vio durante los reinados de Uzías, Jotam, Acaz y Ezequías,
reyes de Judá.
Lo
primero que aprendemos es que Isaías era hijo de Amoz, que
significa "fuerte". Ya hemos mostrado cómo el corazón del
mensaje de Isaías era el Nuevo Pacto y cómo Dios es justo y
fuerte. Por lo tanto, vemos que Isaías mismo representa la
salvación, y su padre es lo suficientemente fuerte como para salvar.
En
segundo lugar, Isaías era de Judá, así como Yahshua-Jesús era de
Judá. ¿Es posible que Isaías también fuera de Belén? No se nos
dice; sin embargo, sabemos que tuvo un largo ministerio que se
extendió a través de cuatro reyes en Jerusalén, y la tradición
dice que fue puesto en un tronco y aserrado en pedazos durante el
reinado de Manasés, el hijo de Ezequías.
La
primera "visión" de Isaías comienza en Isaías 1: 2,
2
"Oíd, cielos, y escucha tú, tierra, porque Yahweh habla: 'Crié
hijos y los engrandecí, pero ellos se han rebelado contra mí' ".
Isaías
trata esto como una declaración en un tribunal de justicia, llamando
al Cielo y a la Tierra a presenciar lo que se dice. Dios luego habla,
refiriéndose al nacimiento de Israel de Egipto, llamándolos
"hijos". Así también Oseas 11: 1 dice:
1
Cuando Israel era joven, lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.
La
misma revelación fue dada a Moisés en Éxodo 4: 22,
22
Entonces le dirás a Faraón: "Así dice Yahweh: 'Israel es mi
hijo, mi primogénito' ".
Estos
eran "hijos" porque Dios era su Padre celestial. Su madre,
por supuesto, era Egipto, convirtiéndolos en ismaelitas
espirituales, o asnos (Génesis 16: 12), que necesitaban
redención para ser legalmente ovejas de Su pasto (Éxodo 13:
12-14). El cordero de la Pascua los redimió y logró esa maniobra
legal, y esto profetizó lo que vendría cuando Jesucristo, nuestro
Cordero de la Pascua, viniera a hacerlo de una manera mayor.
El
problema en los días de Isaías era que aquellos que se suponía que
eran "hijos" de Dios no estaban actuando como hijos. Se
habían vuelto a la condición rígida (una voluntad rebelde) de
asnos espirituales. Jeremías 2: 24 se quejó de lo mismo un
siglo después. El apóstol Pablo más tarde interpreta a esas
personas como hijos de la carne (Romanos 9: 7-8; Gálatas 4:
29). En otras palabras, su posición de "filiación" se
basaba en la genealogía carnal y el nacimiento natural, en lugar de
ser engendrados por el Espíritu.
Dichos
hijos carnales, dice Pablo, no son herederos del Reino, sino que
deben ser "expulsados" con su "madre", la
Jerusalén terrenal (Gálatas 4: 25, 30). Aun así, debido al
Nuevo Pacto, sabemos que Dios al final volverá los corazones de
todos los hombres a Sí mismo, porque "toda rodilla se
doblará". Pero antes de que eso suceda, Agar debe ser
expulsada para demostrar a todos que nadie puede heredar el Reino por
afirmar que es un hijo carnal de Abraham. Deben renunciar a
Agar y reclamar a Sara como su madre espiritual. Deben dejar de
abogar por la Jerusalén terrenal como la verdadera madre del Reino.
Dios
ciertamente salvará todo Israel y toda la Creación. Sin embargo, no
lo hará hasta que se arrepientan, dobleguen sus rodillas a
Jesucristo y le profesen su lealtad. El Nuevo Pacto establece que
Dios es capaz de hacer que esto suceda. No simplemente salvará a
todos de su estado carnal de rebelión. No, Él además hará
que se arrepientan y doblen las rodillas, no por compulsión, sino
revelándose a ellos. Pablo interpreta a Isaías parafraseándolo
ligeramente en Filipenses 2: 11,
11
y toda lengua confesará [exomologeo] que Jesucristo es
el Señor, para la gloria de Dios el Padre.
Su
confesión (exomologeo) no se extraerá por la fuerza a
personas poco dispuestas. La palabra significa "reconocer
abierta y alegremente, profesar que uno hará algo, prometer,
aceptar, comprometerse".
En
el juicio del Gran Trono Blanco, cuando todos vean a Jesús como
quien realmente es, cuando todos finalmente sepan que Él es el Amor
personificado, que Su amor lo obligó a hacer un juramento de volver
cada corazón hacia Sí mismo, entonces quedarán impresionados por
la salvación que previamente habían ignorado o rechazado por falta
de comprensión o inspiración.
godskingdom.org/blog/2020/03/isaiah-prophet-of-salvation-part-2
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