HACIENDO NEGOCIOS A LA MANERA DE DIOS - Cap. 11: Cordones esenciales de tres dobleces que le llevarán al éxito, Dennis Peacocke

"Pero no hallándolos, trajeron a Jasón y algunos hermanos ante las autoridades de la ciudad, gritando: Estos que trastornan el mundo entero también han venido acá". Hechos 17:6

PRINCIPIO MAESTRO #11

Los cristianos deben vivir como
discípulos, renovar sus mentes y
juntarse en unidad para ejecutar el
plan de Dios para las naciones

Todos los principios que hemos comentado hasta ahora se quedarían relativamente sin poder, a menos que los apliquemos en forma sistemática y consciente. En otras palabras, el conocimiento de la verdad solo tiene poder cuando se aplica apropiada y sistemáticamente, acompañado de una explicación para quienes se ven afectados por su aplicación. A fin de multiplicar la verdad, debemos ser capaces de enseñar a otros tanto a entender como a usar la verdad. A menos que lo hagamos, esa verdad permanecerá solo disponible para nosotros mismos y, por lo tanto, no podemos esperar cambiar nuestro entorno inmediato, mucho menos una nación.

Para poder enseñar debemos descubrir lo que sabemos y también lo que no sabemos. Esto es un proceso porque es solo a través de enseñar que las preguntas de mis estudiantes y los diferentes estilos de aprendizaje me revelan mi capacidad o incapacidad para explicarles con claridad como algo realmente funciona. Estoy totalmente de acuerdo con la siguiente verdad, "la manera mas rápida de aprender es enseñar". Todo esto está poniendo un fundamento para esta sencilla premisa -el verdadero cristianismo tiene que ver con información que conduce a una transformación. La marca suprema que Cristo dejó sobre las personas o situaciones que El tocaba fue esta: después de dejarlas, las personas eran diferentes. Aunque este libro trata acerca de verdades bíblicas básicas y fundamentales sobre economía y prácticas comerciales, estoy apasionadamente comprometido con algo que va más allá de simplemente enseñar, anhelo ver a Cristo glorificado en este mundo a través de Su pueblo, y glorificado específicamente a través de las prácticas de creación de capital y de dar poder a las personas. Para ver que esto se logre, todos debemos hacer que estas tres prácticas básicas sean parte de nuestro estilo de vida:

1. Debemos convertirnos en aprendices disciplinados (discípulos) para que podamos llegar a dominar las verdades de Dios, para beneficio nuestro y para el beneficio de aquellos a quienes hemos sido llamados a enseñar.

2. Debemos desarrollar una verdadera cosmovisión cristiana bíblica, que empiece desarraigando los engaños que el Sistema del Mundo con mucho cuidado ha plantado en nuestros corazones y mentes.

3. Debemos buscar a otros que tengan pensamientos afines a los nuestros a fin de formar una red y edificar con ellos, con el propósito de extender y multiplicar las verdades de Dios en el mundo de los negocios, en la cultura en general y en los centros de toma de decisiones.

Entonces, el resto de este capítulo de fundamental importancia tiene que ver con nuestra responsabilidad personal en nuestras propias vidas, para desarrollar un sistema de implementación de las verdades y conceptos a los cuales hemos dicho, "Amén".

PRIMERA VERDAD

Solo los discípulos cambian el mundo.
¿Está usted viviendo como uno de ellos?

"Y Jesús se acercó y les habló diciendo: "Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén".

Mateo 28:18-20

Un discípulo es un aprendiz disciplinado; alguien que está en un viaje hacia el dominio de las verdades que verdaderamente han capturado su corazón. Aunque Cristo claramente llamó a todos los "cristianos" a ser y a hacer discípulos, muchos de nosotros no estamos viviendo como tales. El nombre "cristiano", un término que nos es aplicado por simples hombres, solamente se usa tres veces en las Escrituras. "Discípulos" se usa más de 250 veces. Amados lectores, creo que aquí hay una clave.

El discipulado, como estilo de vida (no como programa), es maravillosamente adecuado para el mundo de los negocios, porque los sistemas de retroalimentación de resultados son rápida y fácilmente revelados. Las leyes de sembrar y cosechar actúan con mayor rapidez en los negocios que en cualquier otro ámbito de actividad humana coordinada. Las ideas y las actividades de negocios generalmente tienen una rápida recuperación de la inversión, que pronto se traduce en resultados tangibles. Debido a esto, buscar, descubrir, aplicar y dominar los conceptos de Dios en el mundo de los negocios, lleva consigo enormes posibilidades a corto plazo para el fortalecimiento de nuestra fe en que la Palabra de Dios realmente funciona. De aquí fluirá el evangelismo, sorprendentes historias de éxito y toda una nueva perspectiva sobre el lugar y valor de los ministerios y asuntos en el mundo de los negocios. Sin embargo, todo esto está basado en el sistema de implementación que Dios nos permite desarrollar para Sus verdades. Si Dios hace un llamado a discípulos, entonces Él usará discípulos para llevar el corazón del poder transformador de Su mensaje.

Este no es un libro sobre "discipulado", pero permítanme describir lo que considero que son los elementos críticos del discipulado, que debemos personificar para llevar nuestras vidas efectivamente, hasta el punto de ser agentes de cambio para Cristo, en el mundo de los negocios o en cualquier otra esfera

• Un corazón cautivado. Los discípulos han sido cautivados a nivel del corazón por lo que consideran como verdad, belleza y justicia, o por lo que "sienten" por un conjunto de ideas o habilidades como usualmente las demuestra otra persona. (Por ejemplo, en los deportes, las artes, las verdades intelectuales, las habilidades para hacer dinero, las habilidades espirituales, las artes mecánicas, entre otras. Todos estos escenarios tienen elementos de verdad, habilidad, arte y recompensa que cautivan corazones).

• Un estándar de verdad. Los discípulos deben tener un estándar de verdad, de ética y de excelencia para medir su progreso, sin "bajar los estándares". Para los creyentes, obviamente estos estándares son las Sagradas Escrituras.

• Una fuente de poder motivacional. Los discípulos deben tener una convincente visión que les dé poder para entrenar, y también para manejar las dificultades, el desánimo y todos los demás obstáculos que se interponen entre un novato y su búsqueda por dominar lo que ellos aspiran a ser y conocer. Humanamente hablando, a esto se le llama el poder de una voluntad comprometida. Los creyentes necesitan tanto una voluntad comprometida como el poder del Espíritu Santo de Dios.

• Una fuente de instrucción y corrección. El auto-aprendizaje llega solo hasta cierto punto. Los verdaderos discípulos necesitan entrenadores, maestros y animadores que les "hablen la verdad en amor" (Ef. 4:15), aplicando corrección cuando sea esencial para aumentar su aprendizaje y progreso. Los discípulos genuinos deben ser suficientemente humildes para aceptar ser corregidos y suficientemente claros en cuanto a lo que la verdad realmente es, como para no ser desviados de su ruta por falsos maestros u opiniones infundadas.

• Una visión con lado "B". Muchos "cristianos normales" parecen vivir la vida primordialmente en el lado "A" de la motivación personal. Lo que quiero decir con esto es que la motivación y enfoque primarios en su vida giran alrededor de su propio bienestar y de quienes están más cerca de ellos. Un jugador con lado "B" es motivado por Cristo para ser usado para jugar en un nivel tal que su vida pueda ser usada para influir sobre muchos más. Su búsqueda por llegar a ser experto es motivada por una visión de glorificar a Dios y Su Reino, a expensas de su propia vida y conveniencia personal. Su vida es una vida en entrenamiento y su estándar de "éxito" es Jesús, Pablo y todos los demás hombres y mujeres de la Biblia, cuyas vidas fueron entregadas por el bien de otros. Los cristianos con lado "A" van al Cielo (Traductor: pero no al Reino Milenial, entendiendo el Cielo como la simple salvación del espíritu); los cristianos con lado "B" cambian la Tierra en el camino para llegar al Cielo.

Sin aprender como vivir la vida siendo un discípulo, la medida de cambio que podemos esperar en nuestras vidas probablemente será muy modesta (en términos de nuestra influencia sobre otros en el mundo de los negocios o en cualquier otra esfera). En contraste, los corazones encendidos llevarán la franquicia de EL TODOPODEROSO E HIJOS por toda la Tierra y hacia la eternidad. La verdad que no es encarnada ni se convierte en un modelo, es abstracta y, por lo tanto, relativamente inútil.

SEGUNDA VERDAD

Desarrollando una cosmovisión cristiana:
¿Ha comenzado usted la tarea?

"No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cual sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta". Romanos 12:2.

"Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne; porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo". 2 Corintios 10:3-5

"... sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo". Efesios 4:15

Como claramente lo señalan los versículos anteriores, el reordenamiento de nuestras mentes es una tarea esencial. No es una tarea fácil. Solamente los discípulos genuinos empezarán a escalar esta montaña, porque es una tarea difícil y a menudo requiere un trabajo arduo. El Sistema del Mundo ha visto esto. Después de todo, el Sistema Educativo "de Faraón", de una manera muy efectiva, nos ha lavado el cerebro a la mayoría de nosotros, derramando sobre nuestras mentes un universo espiritual, intelectual y moral diferente del que Dios creó (y en el que en realidad vivimos). Además de eso, "Faraón" constantemente refuerza ese universo falso, al influenciar sobre el gasto de miles de millones de dólares en los medios de comunicación, las artes, la industria del entretenimiento, los periódicos y las revistas.

Hubo un tiempo en el que me sentía orgulloso de mi educación avanzada en la Universidad de Berkeley, hasta que un día vi lo que verdaderamente había sucedido. Faraón me enseñó historia, economía, psicología, literatura, ciencias y todo lo demás. Hace unos veinticinco años empecé la ardua tarea de volver a entregar a Dios "una mente renovada" y aún lo sigo haciendo. Si usted viera mi biblioteca de libros cristianos, usted me creería.

Si por casualidad usted piensa que se "escapó" de Faraón porque asistió a una universidad más moderada que la de Berkeley, usted vive engañado, mi amigo. Habiendo educado a todos nuestros hijos en el hogar antes de enviarlos a la batalla, creo que sé algo de lo que estoy diciendo. A lo que fueran expuestos, aun en educación cristiana, tenía muchas áreas donde las presuposiciones del sistema del mundo se estudiaban con una muy bien intencionada ética cristiana. Yo soy un presuposicionalista incorregible. Eso significa que quiero conocer el origen y las presuposiciones que hay detrás de las ideas o las "verdades" antes de creerlas. Un punto de vista cristiano de la verdad requiere de los rigores de tal examen. Cualquier cosa menos que esto nos llevará al Cielo (Traductor: pero no al Reino Milenial, entendiendo el Cielo como la simple salvación del espíritu), por la gracia de Dios, pero no será un antídoto suficientemente fuerte en contra de las falsedades del Sistema del Mundo para cambiar la Tierra.

Este libro fue escrito (y todavía es una obra en proceso) sobre mi caminar para llegar a pensar bíblicamente en el campo de la economía, los negocios y la política social. Con la ayuda de Dios y la contribución sabia de otros, mi búsqueda de estos principios en las Escrituras, y cómo aplicarlos, ha sido un viaje maravilloso y, algunas veces, exasperante. Quizás una de las partes más difíciles haya sido observar a los medios de comunicación y escuchar a los comentaristas sociales, a la "gente de negocios", "economistas" y políticos cuando hablan elocuentemente sobre esta clase de temas, sabiendo que ni ellos ni sus auditorios están preparados para pensar con suficiente profundidad o fundamento bíblico, para llevar nuestras políticas económicas y sociales hacia algo que se parezca a la verdadera realidad. Por favor escuche mi corazón. No solo necesitamos ministerios cristianos en el mundo de los negocios que sean "validados" como espirituales, o cristianos que ganen toneladas de dinero por aplicar las Leyes de Dios; lo que necesitamos es cristianos con una cosmovisión bíblica que reeduquen a millones de personas, una esfera de influencia a la vez. Mi primer libro Ganando la Batalla por la Mente de los Hombres, surgió de esa motivación y también es una obra en proceso.

Necesitamos alguna forma de grupos de estudio educacionales a nivel local, regional, nacional e internacional para cristianos llamados al mundo de los negocios, quienes realmente quieran desarrollar una cosmovisión que funcione y que sea útil para ellos y sus ministerios. En Servicios Cristianos Estratégicos hemos desarrollado la Escuela de Liderazgo en los Negocios que está empezando a llenar ese vacío, pero necesitamos mucho, mucho más. Cuando escucho a los políticos en Estados Unidos discutir sobre algunas reducciones de impuestos relacionados con negocios que "benefician a los ricos", quisiera arrancarme el pelo. Obviamente, ellos y muchos norteamericanos no tienen ni la más remota idea de cómo la inversión de capital da inicio a empresas comerciales y crea empleos. Desesperadamente necesitamos cristianos que tengan una cosmovisión bíblica que se relacione con el mundo de los negocios. Nosotros los creyentes debemos hacer algo al respecto, y debe empezar en nuestras iglesias locales y en los negocios donde los cristianos son dueños o administradores.

TERCERA VERDAD

Trabajando juntos en forma estratégica para ejecutar el Plan de Dios
para las naciones, ¿empezará usted donde usted tiene influencia?

Una vez pregunté en un seminario, ¿cómo se come un elefante? En medio de la risa y la consternación les di mi respuesta: un bocado a la vez. Así es como se puede cambiar el mundo, un bocado a la vez. Dios se mueve de un círculo concéntrico a otro círculo concéntrico, cada vez más grande en tamaño e influencia. No estoy pidiendo a la gente que se afilie a una organización; les estoy pidiendo que se afilien a un movimiento. Ese "movimiento" consiste en lograr que las verdades de Dios tengan influencia, de una manera estratégica y a largo plazo, dentro de su esfera particular de influencia. Recuerde, el Plan de Dios de extender Su gobierno sobre toda la Tierra comenzó con solo dos personas en un jardín.

Estoy seguro que usted está intentando aplicar todo lo que sabe donde usted tiene influencia general, y donde trabaja en particular (al menos cuando usted se mantiene alerta). Lo que todos necesitamos es hacerlo más sistemáticamente, con mayor autorreflexión y en una manera mas efectiva. Ser sistemático tiene que ver con nuestros hábitos y aclarar nuestra mente lo suficiente como para salir de la tiranía de lo inmediato y de lo urgente, y entrar a la realidad de como construir nuestro camino diariamente, para llegar al destino que Dios tiene para nosotros. Hacer una autorreflexión significa que sabemos qué estamos haciendo, por qué lo estamos haciendo y cómo saber si está siendo efectivo. Aunque hay mucho que podríamos decir acerca de vivir en forma sistemática y con autorreflexión, por causa del tema que estamos tratando, prefiero enfocarme en cómo "desarrollar más efectivamente".

El juego del cambio es un juego de apalancamiento. Los jugadores inteligentes encuentran personas, ideas, organizaciones o recursos que pueden ser apalancados, para multiplicar, no solo sumar, un cambio deseado. Con un punto de apoyo (fulcro) bien colocado y una palanca suficientemente larga y suficientemente fuerte podría, como se dice que afirmó Arquímedes, "levantar el mundo". Lo mismo sucede para poder producir cambios; necesitamos encontrar los verdaderos puntos de apalancamiento.

¿Me permite decirle dónde están esos puntos de apalancamiento en su familia, iglesia, negocio o en cualquiera otra organización? Están en los verdaderos líderes o los verdaderos influenciadores. Algunos de ellos tal vez ni siquiera hayan sido reconocidos oficialmente como líderes, pero de hecho lo son. Su tarea es ayudarlos a captar la visión legítima de la organización.

Allí es donde verdaderamente se inicia el crecimiento exponencial en una organización ¿Cómo lo sabemos? ¿Será parte de los programas de Maestría en Administración de Negocios de Harvard? En realidad no. Nosotros, como discípulos cristianos, deberíamos esperar que se encuentre por todas las Escrituras. La Palabra de Dios es la fuente de nuestras verdades fundamentales. La "Prueba A" de la búsqueda de un modelo de apalancamiento es Jesús y la forma en que buscó a los doce discípulos, los enseñó y entrenó, y luego los liberó para el ministerio con Su corazón.

Desde una perspectiva de liderazgo, su tarea es encontrar a quienes escuchen su visión, la que Dios le ha dado. ¿Quiénes son esas personas? Son aquellos que le piden un consejo y opinión y luego lo ponen en práctica. En realidad es así de sencillo. Las personas que hacen lo que les sugerimos son los que nos están demostrando que pueden ser entrenados y, por lo tanto, son personas que son un punto de apalancamiento para la visión. No se trata de posición. La verdadera pregunta es: ¿son las personas que están en esas posiciones las personas apropiadas? Las "personas apropiadas" necesitan tres cosas para calificar y estar en esa posición:

1. Honestidad--es decir, ellos le han entregado sus "conversaciones del corazón", no solo lo externo que está diseñado para complacer a la gente.

2. Competencia--es decir, poseen el anhelo de superación que corresponde a su llamado. Ese anhelo es aún más importante que su base de conocimiento actual. La base del conocimiento actual tiene un límite; la búsqueda de superación no. Si ellos no anhelan la superación, entonces no tienen el corazón de un discípulo.

3. La capacidad para ser entrenados--es decir, esa maravillosa cualidad de tener la humildad para aprender de otros, y el carácter para unirse al sueño de otro sin envidia y sin la necesidad de tener el control.

Una vez que usted empiece a edificar de esta manera, avanzará por un buen camino.

El juego se convierte entonces en enfocar su tiempo de mayor calidad en esas personas que son punto de apalancamiento, y desechar cualquier otra cosa que pueda ser desechada. Todos nosotros sabemos que la mayoría de las cosas, y muchas personas, demandan atención rápida e inmediata. Ellos constituyen la tiranía de lo urgente, pero no lo que es estratégico. Una organización de éxito se desarrolla de esta manera, y sus líderes y administradores están entrenados para buscar a nuevas personas que sean punto de apalancamiento y edificar apoyándose sobre ellas. Esta es la forma en que los empleados llegan a ser propietarios, y los propietarios llegan a ser puntos de apalancamiento. Las organizaciones que son puntos de aplacamiento llegan a ser organizaciones sanas, y las personas y las organizaciones sanas buscan relacionarse con esferas más grandes que van más allá de ellos mismos. Ahora estoy listo para describirles el punto final de este estratégico capítulo.

Lo que es verdaderamente saludable siempre buscará interactuar con unidades saludables más grandes. Como una vez dijo un hombre sabio que yo conocí: "Este es el principio de integridad interna e integración externa". El universo de Dios está lleno con esta verdad: la unidad. Y la capacidad para trabajar juntos surge de unidades saludables más pequeñas que se unen para formar unidades saludables más grandes. Observe el cuerpo humano. Es un ejemplo perfecto de esta verdad. Las células se integran a grupos comunes de células; los grupos de células se integran a órganos; los órganos se integran a sistemas; y los sistemas se integran al liderazgo de la cabeza. Lo que no se integra es aislado hacia los nódulos linfáticos, se elimina o es canceroso. Las personas y las organizaciones sanas se integran; las no sanas no lo hacen.

Obviamente, cuando hablamos acerca de integración en el mundo de los negocios, no estamos necesariamente hablando sobre fusiones o negocios independientes que buscan compañías más grandes para unirse a ellas o que ellas los compren. Tampoco estamos hablando acerca de la integración vertical ni de la efectividad de la economía de escala. Lo que estoy diciendo es que los individuos sanos se integran a departamentos sanos, que a su vez se integran a divisiones sanas, que a su vez se integran a organizaciones sanas. Ya sea una empresa grande o pequeña, la capacidad de las unidades pequeñas para buscar agregar su fuerza a unidades más grandes, que son parte de la misma organización, es una señal esencial tanto de la salud personal como de la organizacional.

Los individuos, departamentos o proyectos que no se integran apropiadamente son causa no solo de gran preocupación para los líderes, sino también de importantes pérdidas, tanto en la productividad como en la rentabilidad. Mientras mejor sea nuestra capacidad personal para integramos a los planes de la organización más grande, más perceptiva será nuestra propia capacidad para discernir entre quienes tienen esta habilidad y quienes no la tienen.

Esta ley funciona en familias, iglesias, negocios y naciones. Nuestra meta es llegar a ser sanos para poder integramos al Plan de Dios para todo Su Cuerpo -una vida, una familia, una iglesia, un negocio, una industria a la vez. ¿Estoy pensando demasiado en grande a soy demasiado irrealista? Lea otra vez la oración de Cristo al Padre en Juan 17, y dígame si lo soy. Quienes pueden oír el sonido de EL TODOPODEROSO E HIJOS, pueden oír lo que yo oigo y ver lo que yo veo. Hacer negocios a la manera de Dios trata de los tres puntos esenciales de este capitulo:

• Convertirse en un aprendiz disciplinado

• Reentrenar su mente bíblicamente

• Buscar establecer redes en forma estratégica mientras sigue edificando a través de personas que son puntos de apalancamiento.

Estas tres habilidades para edificar son esenciales para ponerle pies a las verdades que hemos comentado -verdades que de otra manera se quedarían solo en el mundo de los conceptos "abstractos" o "religiosos".