Lo
dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite ... " Isaías
9:7
PRINCIPIO
MAESTRO # 10
Un
gobierno que funcione
bíblicamente es esencial para
la productividad.
bíblicamente es esencial para
la productividad.
Para
estudiar lo que es un buen gobierno, tenemos que examinar el gobierno
de Dios. Su gobierno es el estándar y modelo para nosotros a menos
que escojamos tomar nuestro propio camino. Dios (Padre, Hijo y
Espíritu
Santo) es un solo Dios en tres Personas, quien es y
gobierna
como Uno. La Trinidad no es solamente un hecho auto-revelado; es una
comunidad dentro de Él mismo. Como decían los antiguos, "Dentro
de Sí mismo, Dios es una dulce sociedad".
La
Trinidad es la suprema revelación de gobierno, de servicio mutuo,
del concepto de distribución del trabajo y del modelo completo de la
unidad. Todas las organizaciones de éxito deberían adaptar sus
principios de gobierno al modelo de Dios, a menos que piensen que
ellos tienen una mejor idea. Sin la vida de la Trinidad, el hombre no
tendría un modelo de gobierno exacto. Estudiar el gobierno de Dios
es estudiar cómo hacer que las cosas funcionen en forma apropiada, y
también estudiar nuestro futuro, porque realmente nuestro futuro es
llegar a estar unidos al gobierno de Dios en formas que aún no
podemos entender (Juan
17:21).
Dios el Padre ha determinado que en Dios el Hijo habitase la plenitud
de Dios (Colosenses
1:19)
y
todo el poder residirá en Él En Colosenses 1:13-18
Pablo declara lo siguiente:
"…
el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado
al reino de su amado Hijo, en quien tenemos redención por su sangre,
el perdón de pecados. El es la imagen del Dios invisible, el
primogénito de toda creación. Porque en el fueron creadas todas las
cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles
e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean
potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es
antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten; y él
es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, el que es el principio, el
primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la
preeminencia".
Está claro que Cristo es tanto el centro de todo gobierno, como Aquel en
quien reside todo el poder. Cualquier poder que ejerza cualquier
hombre o cualquier institución de gobierno ordenada por Dios, lo
ejerce porque Cristo les ha otorgado una parte de Su autoridad para
que la ejerzan dentro de su esfera designada. Debido a que la
Divinidad tiene distribución de responsabilidades y jurisdicciones
dentro de Si misma (Juan
5:22; 15:1; 16:7-16),
el
hombre y el orden creado deben emularlo (Génesis
1:26).
En otras palabras, lo
que vemos que Dios esta haciendo, debemos buscar hacerlo.
Todo
gobierno esta unido en Cristo; los gobiernos menores están limitados
y unidos entre sí en servicio y sumisión. Este es el modelo para
todos los negocios, naciones y familias. Alguien, o algún grupo, es
el más alto ejecutivo, y todos los gobiernos menores deben seguir
las directrices de la cabeza, e interrelacionarse entre sí según
los dirija la cabeza. Cuando
el modelo opera según el modelo bíblico, los resultados son orden,
creatividad y productividad. Cuando no ocurre así, los resultados
son confusión, dependencia y pobreza.
Esta no es sabiduría de la Escuela de Administración de Negocios de
Harvard; es el curso básico de gobierno bíblico que se toma en
primer grado. Los buenos gerentes entienden estas verdades y
desarrollan sus organizaciones de acuerdo con ello. Saben que un
gobierno bíblico claro es esencial para la productividad.
Dios
es la fuente de un gobierno sano y de
todos los derechos humanos
Como
ya lo hemos mencionado, todo gobierno humano es un legado de Cristo
para el hombre y lo mantiene bajo administración para Él. Un hombre
no puede hacer nada, como Cristo le recordó a Pilato (Juan
19:11)
a menos que Dios le permita hacerlo, y todos los gobiernos menores
deben responder a Cristo como Gobierno Supremo. De manera similar,
todos los derechos humanos se derivan de Él. Como usted sabe,
la Declaración de Independencia de los Estados Unidos, sobre la
cual se apoya la Constitución que rige al país, empieza con la
siguiente aseveración: "Consideramos estas verdades como
auto-evidentes, que todos los hombres fueron dotados por su
Creador con ciertos derechos inalienables ...". Los
derechos humanos vienen de Dios hacia el hombre, y no del hombre
hacia el hombre.
A
causa de la caída, la capacidad del hombre para gobernarse a sí
mismo quedó sujeta a corrupción y necesitó la redención en
Cristo. El gobierno humano, concedido por la Trinidad y organizado de
acuerdo al modelo de la Trinidad, fue establecido como un modelo de
revisión y balance, previendo el potencial para la corrupción que
el poder unificado produce en el hombre caído. La declaración de
Lord Acton que dice: “El poder corrompe, y el poder absoluto
corrompe absolutamente", es verdad para el hombre caído, aunque
obviamente no es verdad para Cristo ya que Él tiene el poder
supremo, y eso no lo ha corrompido.
Como
lo señalé en mi primer libro, "Ganando la Batalla par las
Mentes de los Hombres" (Páginas
18-27 de la versión en inglés: Winning the Battle jar the Minds of
Men),
Cristo ha separado Sus instituciones de gobierno humano, ordenadas
divinamente, en cinco esferas básicas. Todo gobierno humano, con sus
derechos y responsabilidades, se presenta en las Escrituras de
acuerdo con estas cinco jurisdicciones: 1- el auto-gobierno de los
individuos; 2- el gobierno de la familia; 3- el gobierno
eclesiástico; 4- el gobierno comercial o las asociaciones
voluntarias; y 5- el gobierno civil. Cada una tiene responsabilidades
y poderes específicos, y todas deben funcionar en sumisión mutua a
Dios y servirse unas a otras. Todas tienen poder limitado, y todas
tienen derechos que han sido ordenados por Dios. Sin entender estos
principios bíblicos, los creyentes no pueden funcionar
apropiadamente como parte del gobierno del Reino de Dios. Sin este
entendimiento, los creyentes no percibirán correctamente la unidad
organizacional, no funcionarían apropiadamente como ciudadanos de su
nación, y serán incapaces de dirigir apropiadamente tanto a su
familia como su vida profesional. El siguiente diagrama, tomado del
libro "Ganando la Batalla par las Mentes de los Hombres" p.
20 (Dennis
Peacocke, Winning the Battle for the Minds of Men, Santa Rosa,
Strategic Christian Services, 1987)
resultará muy útil:
Enseguida anotamos algunos extractos del libro para explicar este diagrama de una mejor manera:
Note
que la Iglesia está en el centro de este diagrama; que Cristo está
sobre la Iglesia, y que el Trono de Dios de justicia y rectitud
preside. La Iglesia debe ser la voz sacerdotal, de enseñanza y
profética para el mundo. Su responsabilidad es interpretar
correctamente la Palabra de Dios ante todas las formas de gobierno.
Su trabajo es presentar esta Palabra ante todas las demás
instituciones, incluyéndose a sí misma, como un cordón de plomada
para la conducta humana (p.
20 de la versión en inglés).
Una filosofía cristiana de gobierno en cada una de estas cinco esferas consiste en la capacidad de asegurar que el poder se utilice apropiadamente y se equilibre en forma proporcional para cada institución de gobierno. La Biblia nos proporciona estas directrices.
La
tiranía no es una figura oscura que surge de la noche y llega
brincando hasta estar en medio de la sociedad. La tiranía es abuso
del poder. La tiranía resulta de la acumulación inapropiada de
poder en una institución o esfera. Toda la cultura moderna está
avanzando hacia más y más profundidad dentro de la tiranía, bajo
el equivocado principio de la centralización. Las
fuerzas anti-Dios están continuamente transfiriendo más y
más
poder hacia el
gobierno
civil, de hecho castrando nuestra libertad individual, nuestras
familias, nuestras iglesias y
nuestra
economía. La centralización del poder en el Estado es la tendencia
más peligrosa en el mundo de hoy
(p.
2l).
Si
Cristo no está reinando, entonces, ya sea el individuo, la familia,
la Iglesia, el ámbito comercial o el Estado se levantarán como un
punto falso de enfoque humano. El hombre siempre deificará uno u
otro aspecto de la Creación. El hombre carnal no puede evitar adorar
lo creado en lugar de al Creador. Aun la Iglesia, aunque parezca
extraño, puede ser exaltada hasta llegar a ser un poder tiránico en
la vida de un cristiano, llegando a desequilibrarse tanto con el
Señor como con las otras instituciones de la sociedad humana (p.
22).
Cuando
el individuo
se convierte en el foco del gobierno humano, tenemos anarquía;
cuando la familia
se convierte en el enfoque central, tenemos tribalismo; cuando el
orden
eclesiástico
se convierte en el centro, tenemos guerras religiosas, cuando el
orden
comercial
se desequilibra, tenemos monopolios asfixiantes o
alguna
forma de fascismo, y cuando el gobierno
civil
se convierte en el centro de poder, obtenemos abuso del Estado.
Cuando cualquier esfera está fuera de lugar o de equilibrio, el
resultado es pérdida de libertad, incremento de la tiranía y
supresión del elemento humano del Cosmos de Dios.
Dado
que este no es un libro dedicado a entender el gobierno per-se,
debemos seguir adelante. Baste decir que para nosotros, como
profesionales cristianos de negocios, el comercio no opera en un
vacío. Emendar estas leyes básicas de la estructura bíblica y
gobierno no es solo esencial, en términos de administrar nuestras
vidas y organizaciones, sino que también es esencial en responder
correctamente a lo
que
está aconteciendo a nuestro alrededor a medida que nuestras
estructuras políticas/económicas continúan sumiéndose en la
crisis. Este libro no fue escrito para que usted se haga rico; está
escrito para incrementar su prosperidad y ayudarle a prepararse para
gobernar mejor en un mundo en el que se están llevando a cabo
importantes cambios.
¿Por
qué es nuestra filosofía de gobierno tan importante?
Nuestra filosofía de gobierno estimula o retarda la creatividad y productividad humanas. Los sistemas de pensamiento por los cuales organizamos a las personas y las cosas son como el software mediante el cual programamos el hardware de las computadoras modernas. El uso de la capacidad total del hardware esta limitado por las instrucciones que recibe del programa. Esta es exactamente la forma como funciona la "programación" de nuestra filosofía de gobierno; si la filosofía es débil, entonces la capacidad máxima de la organización queda sin ser utilizada. El corazón de un gobierno descansa en su manera de ver el poder. Quienes están en control, ¿tienen "poder sobre los demás"? o ¿tienen "responsabilidad" por los demás? Ya hablamos de esto en el capítulo cinco, pero requiere que le demos otro vistazo desde esta posición estratégica. Como vimos en el pasaje de Lucas 22:24-27, la verdadera autoridad en el Reino de Dios tiene la naturaleza de siervo. Cuando vemos la responsabilidad de liderazgo desde una perspectiva de "poder sobre los demás", además de abrirnos al orgullo, empezamos a poner a quienes están bajo nosotros en una modalidad en donde su botón de creatividad se "apaga". Su interés primario llega a ser el temor a la autoridad en vez de cumplir con la tarea que tiene a la mano. El temor o fracaso del hombre no es productivo y nos aprisiona, mientras que la fe (en que yo puedo hacer el trabajo y mis líderes están aquí para ayudarme a hacerlo), libera enormes cantidades de energía. Quienes están familiarizados con la situación en Europa Oriental saben exactamente lo que quiero decir, cuando digo que este es un ejemplo clásico de los efectos negativos de largo alcance, de la autoridad humanista del "poder sobre los demás", ya que mata la creatividad y la fe para producir. No puedo poner demasiado énfasis en este punto: la atmósfera espiritual que produce su líder en el lugar de trabajo es la clave principal hacia la productividad y creatividad.
La
filosofía de gobierno de "poder sobre los demás" proviene
del pensamiento evolucionista darwiniano, donde la supervivencia del
más fuerte justifica el poder, en vez de que el poder sea
justificado por su capacidad de extraer vida de quienes están
relacionados con él. El
gobierno que se apoya en la fuerza bruta o
la
intriga, produce muerte; mientras que un gobierno que se apoya en el
fuerte anhelo de liberar potencial, produce vida.
El amor está afianzado en la realidad de que todas las personas
tienen un valor intrínseco porque han sido creadas a la imagen de
Dios. Por otro lado, la evolución nos da una visión de la vida
donde las personas son, de hecho, "bolas de baba evolucionadas",
y no tienen valor intrínseco más allá de lo
que
escojamos darles. Los
líderes cristianos deben ver que la dignidad de cada persona debe
ser realzada y protegida en Dios, que sus dones deben revelarse y
desarrollarse. Esta es la fuerza motivadora detrás de toda
organización verdaderamente cristiana.
La
jerarquía, como vimos en el capítulo anterior, es un hecho de la
creación de Dios. No todos somos iguales. Aun cuando los miembros de
la Divinidad son ontológicamente "iguales", dichos
miembros de la Divinidad se relacionan bajo la autoridad jerárquica
del Padre, como un ejemplo universal para nosotros.
La jerarquía es esencial para el orden, protección y desarrollo de
humildad. Una jerarquía, para que pueda guiar de manera ordenada,
debe esforzarse en desarrollar a cada persona
bajo
su autoridad hasta su máximo potencial. En esencia, los líderes
deben colocarse "bajo" su gente y empujarlos hacia arriba,
hacia el éxito. ¿Puede usted imaginarse la revolución productiva
que podría llevarse
a
cabo si en el mundo de los negocios los creyentes empezaran a
organizar y dirigir de esta manera? En vez del modelo contrario de
antagonismo obrero/patronal, que es el estilo administrativo del
sistema del mundo, habría un verdadero gobierno de servicio. Hasta
que grado los creyentes experimentarían esto en la Tierra antes del
retorno de Cristo es aun incierto, pero de una cosa estamos seguros
las
relaciones de gobierno eterno de EL TODOPODEROSO E HIJOS operarán
con jerarquía y amor perfectamente equilibrados.
Todos necesitamos empezar a incrementar nuestras habilidades en este
tipo de liderazgo ahora.
Los
fracasos del gobierno se propagarán
Hemos
dicho que un
gobierno que opera con base en principios bíblicos produce orden,
iniciativa y productividad, mientras que un gobierno impío produce
confusión, dependencia y pobreza.
No hay mejor ejemplo de esta verdad que lo que ha estado
sucediendo con la debacle del sistema de educación pública en los
Estados Unidos. Habiendo sido líder mundial, nuestro sistema de
educación pública se ha degenerado (en muchos lugares), hasta
convertirse en una verdadera "jungla de pizarrones" donde
el temor, la rebelión y la confusión no han hecho otra cosa que
destruir una atmósfera donde sea posible el verdadero aprendizaje.
Los
maestros y las autoridades escolares han perdido su derecho a enseñar
porque los "derechos" de algunos estudiantes a actuar como
tontos, de alguna manera se han convertido en más importantes que
los derechos de los otras estudiantes para aprender. Los padres han
perdido el control, ebrios con el vino permisivo de la psicología
secular.
Como resultado, los
problemas no resueltos de gobierno en el hogar han sido transferidos
hacia la escuela, la cual a su vez termina transfiriéndolos hacia la
sociedad, el mundo de los negocios y los tribunales judiciales.
Lo que no se resuelve en el hogar se hace público de alguna manera.
Un fracaso en el gobierno humano nunca permanece totalmente
contenido.
A medida que vemos que el gobierno se derrumba a nuestro alrededor, sabemos esto: puede tardar derrumbarse económicamente por mucho tiempo. Por esta razón el evangelismo empresarial es perfectamente apropiado para impactar a todas las culturas; la supervivencia económica es la necesidad común que hará que el hombre se someta. Cuando el gobierno del mundo de los negocios funcione con el patrón bíblico, lo cual debe hacer para sobrevivir, su ejemplo obligará a un mandato hacia la redención de las otras esferas de gobierno que hayan llegado a ser tan corruptas y tan desequilibradas.
Hablando tontamente, ¿a quién le importa si el auto-gobierno es relajado? ¿A quién le importa si la unidad familiar se define como trece bisexuales, cuatro travestis y un caballo, y que todos viven juntos? ¿Quién realmente notará si la Iglesia se separa en dieciocho millones de denominaciones? Aún podríamos sobrellevar un gobierno civil pésimo por mucho tiempo, pero lo que no podemos permitir que suceda es que el mundo de los negocios se desmorone, porque con ello desaparecería nuestra capacidad para trabajar y proveer para nuestras propias necesidades. En el mundo moderno, ¿en cuál esfera de gobierno cree usted que las personas tienen mayor interés? Obviamente, la economía, y esta es precisamente la razón por la que debe convertirse, y se convertirá, en el enfoque clave para un avivamiento cristiano y un cambio en el mundo.
"El
gobierno que gobierna menos, gobierna mejor"
Abraham Lincoln
Abraham Lincoln
La
teoría política moderna, que fue mi campo académico de estudio, se
apoya en el
concepto Kantiano Hegeliano de que el Estado es "Dios caminando
sobre la Tierra".
El Estado y el proceso del gobierno civil han llegado a ser las
políticas de salvación para las masas. Esta
filosofía ha afirmado que el Estado resolverá nuestros problemas.
Como resultado de tal filosofía de gobierno, la responsabilidad de
cambio en el Estado moderno secular descansa en los de arriba, en
lugar de abajo, donde está la gente. Esta es la presunción tácita
de la sociedad moderna: el cambio viene de arriba hacia abajo. Sin
embargo, allá afuera, en el mundo real, hay un ejército creciente
de disidentes que están rechazando ese disparate. Ellos saben que el
cambio viene de abajo hacia arriba, a través de personas que toman
el control sobre sus problemas y su destino.
La
adoración de la democracia es una esperanza falsa
La
"voluntad del pueblo" y el "poder del pueblo" son
lemas de la sociedad global moderna, con pocas excepciones. La
democracia se ha convertido en nuestro nuevo ídolo de adoración,
especialmente desde la caída del Imperio Soviético. La
democracia esta siendo proclamada como la respuesta a los problemas
del mundo. Sin embargo, la
democracia por sí misma siempre ha sido una pesadilla para la
mayoría de los científicos e historiadores de la política, porque
ellos conocen el caos que el gobierno de las masas siempre ha
producido a lo
largo
de la historia. La Revolución Francesa es la Prueba "A".
"La democracia" puede convertirse en la forma mas cruel de
tiranía y, de hecho, nunca perdura. Siempre es reemplazada, ya sea
por un colapso cultural o por tiranos culturales de mano dura. En
contraste, el gobierno bíblico tiene la forma de República (Éxodo
18:13-26; Números 11:16-29; Hechos 6:2-6),
donde los líderes sabios son escogidos por el pueblo para gobernar
en representación de ellos y, hasta cierto grado, más allá de sus
intereses básicos.
Es por esta razón que Calvino y otros reformadores dijeron que el
gobierno civil era el llamado al ministerio más alto sobre la Tierra
para cualquier creyente, ya que es desde este puesto de servicio
público que toda una sociedad es pastoreada y gobernada. ¿Dónde
están hoy las iglesias que aspiran a tener líderes en el gobierno y
que
los estén entrenando para el futuro? ¿Dónde están las iglesias
que conscientemente están entrenando a futuros Directores Generales
en habilidades de administración bíblica? Esto es lo
que
la Iglesia debe hacer si realmente vamos a cambiar las cosas. Debemos
invertir nuestra energía en entrenar, y no en quejarnos.
El gobierno que gobierna con mayor efectividad y productividad en el mundo de los negocios o en una ciudad, generalmente pasa desapercibido y aparece con fuerza solo cuando es necesario. De no ser así, tiende a eclipsar y debilitar la resolución de quienes están dentro de la organización y que necesitan asumir la responsabilidad de SUS propias tareas. Una vez que esto haya sido entendido, quienes estén en posiciones de liderazgo se enfocaran en impartir la visión a largo plazo para su organización, a otros que estén trabajando en ella. La meta sería ayudar a cada individuo a hacer de la visión "su propia visión", y ayudarle a ver el importante papel que juega en el proceso. Las Escrituras nos dan exactamente esta clase de manual, si tenemos "ojos para ver". A medida que aprendemos los patrones de gobierno de Dios, estaremos experimentando la visión del Todopoderoso, y haciéndola "nuestra".
Un
claro gobierno bíblico es esencial para la productividad. Nuestra
filosofía de gobierno es crítica. ¿Cuál es su filosofía de
gobierno? ¿Está claramente definida para aquellos sobre quienes
usted tiene influencia o responsabilidad en el hogar, el trabajo, la
iglesia o la sociedad? Si no está clara para usted, ¿con qué
criterio está actualmente gobernando, y con qué principios
específicos? ¿Qué está haciendo para mejorar la productividad de
la gente, incrementar su nivel de habilidades, y capacitarlos para
prosperar en una atmósfera que reconoce los errores y los corrige,
pero que se enfoca primordialmente en el desarrollo de potencial?
Todos nosotros debemos responder en estos asuntos de auto-examen.
Éstas
no son nuevas ideas. La cuestión no es su novedad, sino ponerlas en
práctica. EL TODOPODEROSO E HIJOS es una organización de discípulos,
y esto significa ser personas que practican la verdad (Hebreos
5:14; 12:11; Filipenses 4:9; Proverbios 6:20-2).
Mi
anhelo es que nos convirtamos en practicantes de la verdad que
entendamos la relación entre un buen gobierno y la productividad
creativa. ¿Por qué deberían las escuelas seculares de
administración llevar a cabo el equipamiento de la Iglesia en lugar
de nosotros y hacerlo según sus términos seculares?
No
deberían. Dado que la gran mayoría de los integrantes de nuestras
congregaciones trabajan en el mundo de los negocios, deberíamos
estar equipándolos para que lo
hagan
en forma efectiva. Vamos, hermanos del 'TODOPODEROSO", veamos
mas allá de las cuatro paredes del templo; allí es donde esta la
acción.
¿Me
permitirían también sugerir que hagamos agregados sustanciales a
los programas de Escuela Dominical de nuestra iglesia y a los ternas
que predicamos desde el púlpito? Necesitamos esos foros para
instruir a nuestros creyentes sobre cómo funcionar en forma práctica
-a la manera bíblica- en el mundo real, en vez de inspirarlos a
"sentirse bien" con sermones que usualmente empiezan a
esfumarse para cuando llegamos al final del área de estacionamiento.
Si los creyentes han de ser reales, tenemos que volvernos reales. Y
recuerden, quien está diciendo estas cosas es un "pastor".
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Agradecemos cualquier comentario respetuoso y lo agradecemos aún más si no son anónimos. Los comentarios anónimos no serán respondidos.