Ago 25, 2017
El huracán Harvey se está moviendo hacia Corpus Christi, TX y probablemente llegará a la ciudad esta noche. Puesto que Corpus Christi significa "Cuerpo de Cristo", es una señal significativa de las cosas que vendrán pronto. Harvey significa "hierro candente", que debe ser interpretado como "batalla lista" o "batalla digna".
Muchos señales pueden ser interpretadas de más de una manera, y a menudo las señales sí tienen capas de significado. En este caso, cuando oraba, el Padre dijo que este huracán debía ser visto como una buena señal, un signo del diluvio del Espíritu Santo que estaba a punto de venir sobre el Cuerpo de Cristo.
Por supuesto, el Espíritu Santo normalmente interrumpe nuestros normales patrones de vida. Así también no hay duda de que Harvey hará lo mismo, no sólo a la ciudad de Corpus Cristo, sino también al Cuerpo de Cristo en general. Sin embargo, aquellos que estén en sintonía con el Espíritu Santo y que permanezcan cerca de Jesús y Su paraguas no serán afectados negativamente. Las cosas carnales que sean barridas serán para su bien, porque para ellos, "todas las cosas cooperan para el bien" (Romanos 8:28).
Historia de trasfondo
Hace más de 35 años, hubo profecías sobre un gran huracán que iba a afectar a Corpus Christi. Esto fue a menudo un tema de intercesión durante mis días con la Red de Oración en los años 80. Escribí sobre esto en los capítulos 18 y 19 de mi libro, Las Guerras del Señor (http://josemariaarmesto.blogspot.com.es/2014/06/libro-las-guerras-del-senor-dr-stephen.html). Fui a Corpus Christi en junio de 1989 para hacer frente a un huracán, saliendo de casa antes de que hubiera cualquier rastro de un huracán. Sin embargo, cuando llegué, se formó un huracán en el Golfo. En la orilla de Corpus Christi, lo reprendí y de repente un viento escarpado le cortó la cabeza (como dijo el meteorólogo), y murió en 24 horas sin golpear Corpus Christi.
Mi esposa y yo fuimos nuevamente a Corpus Christi en 1997 para establecer marcadores de límites a lo largo de la costa del Golfo de Padre Island (21 de agosto de 1997) todo el camino a Key West, Florida (26 de agosto de 1997). Este límite duró sólo un año, durante el cual no se permitió que ningún huracán golpeara la costa. Pero después de las fechas de vencimiento (en 1998), muchos huracanes comenzaron a golpear la costa.
Comenzó con la tormenta tropical Charley golpeando Corpus Christi (22 de agosto de 1998). Luego el huracán Bonnie golpeó Cape Fear, NC (26 de agosto de 1998). Luego el huracán Earl golpeó Ciudad de Panamá, FL (3 de septiembre de 1998).
Guerras del Dragón
Esta obra profética en particular fue diseñada para proteger al Cuerpo de Cristo del Dragón Rojo, que (en ese momento) era cómo se manifestaban estos huracanes. Hemos tenido muchas guerras contra el Dragón Rojo a través de los años, la mayoría de ellas de naturaleza defensiva, porque aún no había llegado el momento de derrocarlo. Sin embargo, en 1996-1999 tuvimos una serie de tres años de "Guerras Dragón", que resgistré con mayor detalle en los capítulos 18-21 de Las Guerras del Señor (http://josemariaarmesto.blogspot.com.es/2014/06/libro-las-guerras-del-senor-dr-stephen.html).
Estas guerras salieron de las señales en los cielos, cuando Virgo pareció para dar a luz a la luna, a partir de septiembre de 1996. Esto fue, por supuesto, en el momento en que fuimos llevados a declarar el 120ºJubileo de Adán (23 de septiembre, 1996). Esta señal en los cielos se repitió cuatro veces, que culminaron en septiembre de 1999, celebrando la fiesta en Port Austin, Michigan para conmemorar el 2.000º cumpleaños de Jesús, que nació en septiembre del año 2 aC.
Ahora, en 2017, estamos viendo otra señal en el cielo, que llegan el 21º aniversario de nuestro 120º declaración de Jubileo. El 23 de septiembre de 2017 Virgo (la Virgen) dará a luz a Júpiter (el Planeta del Rey).
En 1996-1999 fue la luna la que surgió. La luna significa la Iglesia. En 2017 es Júpiter que se está surgiendo. Júpiter significa el venidero Rey, Jesucristo. El nombre hebreo de Júpiter es Zedek, "justicia", y Jerusalén fue llamada la Ciudad de Zedek. De hecho, las naciones a lo largo de la historia han identificado sus propias capitales con Júpiter. Jerusalén no fue la excepción.
Por lo tanto, el nacimiento de Júpiter el 23 de septiembre, 2017 debe ser vista en el flujo general de la revelación que se inició ya en septiembre de 1996. El hecho de que Júpiter va a nacer precisamente 21 años después de que declaramos la 120º Jubileo es una coincidencia; puesto que 21 es el número de "angustia" en la Escritura; podríamos incluso ver esto como un tiempo a largo plazo de dolores de parto de la transición de una edad a otra. Así, el periodo de 1996 a 2017 nos lleva al presente y al final de los sistemas bestiales, como he explicado a menudo en escritos anteriores.
Derrocar al Dragón Rojo
A principios de esta semana, el 21 de agosto de 2017, oramos para derribar al Dragón Rojo y a los otros tres arquitectos de las naciones bestias.
Https://gods-kingdom-ministries.net/daily-weblogs/2017/08-2017/divine-court-work-today-and-its-results/ (http://josemariaarmesto.blogspot.com.es/2017/08/tribunal-divino-obra-de-hoy-y-sus.html)
¿Es sólo una coincidencia, entonces, que Harvey se convirtiera en un huracán tres días después el 24 de agosto y que hoy amenace al Corpus Christi?
Los huracanes son siempre asuntos serios desde un punto de vista terrenal. Pero Harvey es diferente de los huracanes pasados que amenazaron a Corpus Christi, porque ahora estamos en un nuevo día. Por lo tanto, el huracán debe ser visto en una nueva luz, de acuerdo con el flujo progresivo de la revelación que se nos ha dado.
Por un lado, el "hierro ardiente" podía verse como una amenaza para el Cuerpo de Cristo procedente del Reino de Hierro (Roma). Pero, por otra parte, el Hijo Varón nacido viene con una "vara de hierro" (Apocalipsis 12:5). Esta es la señal que está ahora ante nosotros. Los acontecimientos del 21 de agosto de 2017, con el eclipse solar y el juicio divino contra las cuatro bestias, apuntan ahora hacia el nacimiento del Hijo Varón el 23 de septiembre. Él viene con una vara de hierro.
Parte de los procedimientos judiciales divinos del 21 de agosto involucraron la reclamación de los cuatro metales para el tesoro de Dios (oro, plata, bronce y hierro). Esto fue de acuerdo con las instrucciones dadas a Josué cuando peleó la batalla de Jericó (Josué 6:19). La batalla de Jericó fue la principal señal del Antiguo Testamento de la caída de Babilonia en el libro de Apocalipsis. Así como Josué tomó el Reino hace mucho tiempo, así también el mayor Josué (Yeshua) está tomando el Reino otra vez en una escala mayor. Pero en ambos casos, los cuatro metales (reinos) deben entrar en su tesoro. Apocalipsis 11:15 dice: "El reino de este mundo se ha convertido en el reino de nuestro Señor y de su Cristo".
En otras palabras, cuando Cristo toma el poder, destruye el sistema de esclavitud para reclamar los bienes de las naciones bestias. No se trata de destrucción, sino de La Restauración de Todas las Cosas. Aquellos que no están de acuerdo son como Acán, cuyo destino no fue tan positivo. Escribí sobre la Doctrina de Acán en el capítulo 10 de mi libro, el Jubileo de la Creación (http://josemariaarmesto.blogspot.com.es/2014/04/el-gran-jubileo-de-la-creacion-o.html).
Así que creo que debemos considerar el huracán Harvey como un intento tardío del Reino de Hierro de Babilonia de destruir el Cuerpo de Cristo, pero en realidad, Dios ha gobernado contra las naciones bestias. Dios ha tomado la espada de hierro ardiente de Roma/Babilonia y la ha convertido en una vara de hierro por la cual el Hijo Varón gobernará a las naciones. Mientras que las naciones bestias están tratando de destruir el Cuerpo de Cristo con una espada de fuego ardiente, Dios ha convertido su arma contra ellos, y está bendiciendo el Cuerpo de Cristo con una efusión del Espíritu Santo.
Por esta razón, lo que viene a la Tierra no es una repetición del diluvio de Noé, que destruyó la Tierra, sino el Segundo Diluvio, el Diluvio del Espíritu Santo, que viene a interrumpir el orden existente. Cuando esta inundación esté completa, "la tierra será llena del conocimiento de la gloria del Señor, como las aguas cubren el mar" (Habacuc 2:14).
Categoría: Discernimiento Profético
Dr. Stephen Jones
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