DANIEL 6 (5): SUPLEMENTO Y PENSAMIENTOS FINALES, Dr. Stephen E. Jones

Daniel 6 (5): Suplemento y pensamientos finales 

4 de junio 2015

(Nota administrador: Para una mejor comprensión aconsejamos la lectura previa de un artículo precedente: http://josemariaarmesto.blogspot.com.es/2015/06/daniel-6-3-el-foso-de-los-leones-el.html).

En mi estudio de Daniel 6 , escribí sobre la primera y la segunda obra de Cristo y cómo la primera era una obra de "muerte", mientras que la segunda es una obra "viviente".

El tiempo en el que vivimos no es garantía por sí solo de que una persona vaya a vivir a través de la venidera experiencia del “foso de los leones”. Puede haber algunos que sean llamados a experimentar el martirio de la primera obra de Cristo, mientras que otros serán imposibles de matar.

En el libro de Hechos vemos ambos patrones en el contexto de la primera obra de Cristo, y esto ocurre uno al lado del otro. Recordemos de mis enseñanzas de audio en el libro de los Hechos que hay una serie de estos patrones en la primera mitad de los Hechos.

En primer lugar, en Hechos 3 vemos el patrón de Pedro y Juan, que fueron al templo a la hora novena del día, que es el momento de la ofrenda de la tarde. Los sacrificios de la mañana y de la tarde representan las dos obras de Cristo en esta opinión particular, por lo que la historia en Hechos 3 es un cuadro profético de la segunda obra de Cristo.

En la puerta del templo, Pedro levantó al cojo en Hechos 3: 6-8, y luego se usó eso como una ilustración de la resurrección de los muertos en el fin del mundo ( Hechos 4: 1, 2 ). Los guardias del templo vinieron y los arrestaron, pero al final, fueron puestos en libertad ( Hechos 4:23 ), así como la segunda paloma era ser liberada en Levítico 14: 7. Más tarde esa noche, el Espíritu Santo fue derramado por segunda vez (Hechos 4:31), que era el patrón profético de lo que pronto experimentaremos también.

Los apóstoles fueron nuevamente arrestados, azotados, y puestos en libertad en Hechos 5:40, 41. En este caso, mientras se alejaban, se veían como la segunda paloma después de haber sido sumergida en la sangre de la primera paloma ( Levítico 14: 6 ). Como tipos de la segunda obra de Cristo, no iban a se matados, pero fueron azotados. En otras palabras, que se identificaran con la segunda obra de Cristo no significa que uno irá necesariamente a escapar de la persecución. Sólo significa que una persona no va a sufrir la muerte en esa persecución.

Luego, en Hechos 6 y 7, vemos la historia de Esteban, conocido como "el primer mártir". Fue asesinado por su testimonio, porque él se identificó con Jesús en su obra de muerte. Esteban se yuxtapone luego con Felipe en Hechos 8, que fue arrebatado ( harpazo ) por el Espíritu ( Hechos 8:39, 40 ). No sólo era su llamado presentar una imagen de la segunda obra de Cristo, sino que él experimentó el arrebatamiento, que es el evento profetizado para ocurrir en el 8 º día de los Tabernáculos. Esteban y Felipe representan las dos palomas.

Luego, en Hechos 12 leemos de Santiago y Pedro, que también representan las dos obras de Cristo. Santiago fue asesinado ( Hechos 12: 2 ), pero Pedro fue liberado de prisión por el ángel de Dios ( Hechos 12: 7 ). Aquellos que no entienden la revelación de las dos obras de Cristo están a menudo perplejos de por qué Dios no salvó la vida de Santiago como lo hizo con la de Pedro. Algunos han encontrado fallos con Santiago, pero no hay ninguna justificación bíblica para ese punto de vista. Era necesario disponer de los dos hombres caminando por la revelación de las dos obras de Cristo, con el fin de ayudarnos a entender la revelación de las dos palomas.

El punto que quiero hacer es que si vemos que los mismos apóstoles representan las dos obras de Cristo en el inicio de la Edad de Pentecostés, entonces no hay razón para pensar que ambos patrones no pudieran manifestarse en nosotros así, al comienzo de la Edad de los Tabernáculos. La principal diferencia, creo yo, es que la segunda obra debe ser el patrón dominante para nosotros hoy, ya que vivimos en la época de la segunda obra de Cristo. De hecho, aquellos que en realidad se llaman para cumplir esta segunda obra, que es predicar la palabra bajo la unción de la segunda efusión del Espíritu podrían esperar que fuera imposible matarlos durante ese tiempo, a causa de su protección divina.

Sin embargo, en medio de esto, ya que la mayoría de los cristianos todavía no tienen ninguna revelación sobre las dos obras diferentes de Cristo, yo esperaría que Dios siga revelando esto de la misma manera que lo hizo en los primeros capítulos del libro de los Hechos. Yo esperaría a ver al menos unas pocas personas unidas en parejas con el propósito de la revelación.

De cualquier manera, la gente que se identifica con Cristo y será recompensada en consecuencia. Estamos todos juntos en esto, y la ley de la unidad significa que participamos de la recompensa de los que hacen diferentes funciones de siembra, riego y cosecha, en la cosecha de Dios.

La única cosa que no va a tener que repetirse será la muerte de Cristo en la cruz.

Así que, independientemente de nuestra función en particular en el plan divino, estamos entrando en la época de la predicación de la Palabra que va a construir el Reino de la Era venidera. Esto se ha visto en la historia de Jonás, cuyo llamado segundo se cumplió por su predicación de la Palabra a Nínive. Esto fue visto en el libro de los Hechos, donde los discípulos fueron puestos en libertad para predicar la palabra, por primera vez en Hechos 4: 18-20, 31, a continuación, en Hechos 5:42, luego en Hechos 8:40, y finalmente en Hechos 12:24.

Esta segunda obra de Cristo es lo que llamamos el Ministerio de Puertas Abiertas, porque éste es el modelo bíblico de Jonás y de nuevo con los apóstoles. Se basa también en el ángel abriendo la puerta de la prisión de Pedro a la libertad para predicar la Palabra. En ese entonces huyó a Cesarea y luego continuó hacia Antioquía y finalmente a Roma, muestra que la palabra debía ser predicada incluso a la ciudad capital de la bestia-nación que entonces existía.

Esta revelación de la segunda paloma en el libro de los Hechos muestra también cómo los mismos apóstoles tuvieron que cambiar su mentalidad cultural a fin de cumplir con la convocatoria de la segunda paloma. Hasta ese momento su origen cultural había causado que se centraran en "el Dios de Israel" o "el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob", lo que tendía a limitar las promesas de Dios a una cierta genealogía.

Pero el libro de los Hechos muestra cómo la revelación de Dios amplió su pensamiento. Causó que Felipe predicara la Palabra en Samaria ( Hechos 8: 5 ). Más tarde hizo que Pedro predicara la Palabra en la casa de Cornelio, el centurión romano ( Hechos 10:24 ). Pedro aprendió "que Dios no hace acepción de personas" ( Hechos 10:34 ).

Más tarde Pedro huyó a Antioquía, y Pablo fue comisionado para predicar la Palabra a las naciones, todo basado ​​en la ley de imparcialidad ( Levítico 19:34, 35, 36 ).

Hay dos niveles de cumplimiento que debemos considerar para comprender esta revelación en su totalidad. El primero es la experiencia personal, o individual; el segundo es el tiempo histórico en que se vive. Tomemos, por ejemplo, el hecho de que Pedro fue liberado de la cárcel con el fin de retratar la imagen de la segunda paloma en su experiencia personal. Sabemos que Pedro murió más tarde como un mártir, porque no podía escapar al momento histórico en el que vivió, que era el momento de la primera paloma. Históricamente, fue obligado morir por el patrón de propio martirio de Cristo en la cruz.

La primera paloma era el  patrón dominante de la Iglesia durante la Edad de Pentecostés, por lo que todos murieron, la mayoría de ellos como mártires. Pero ahora estamos entrando en un nuevo día, donde veremos la resurrección de los muertos y la entrada en la inmortalidad. Aquellos que logran la resurrección no morirán en absoluto, por lo que representarán la segunda paloma en el sentido último.

Sin embargo, incluso aquellos creyentes que no reciban la inmortalidad en este tiempo pueden vivir los patrones de la segunda paloma en sus particulares experiencias. En otras palabras, pueden escapar de la muerte en ciertos incidentes de sus vidas, mientras que aún permanecen mortales o incluso morir como mártires en un momento posterior. Esto es lo que sucedió con Felipe y Pedro.

Creo que el patrón de liberación personal de Daniel del foso de los leones se verá más a menudo en los próximos días que en el libro de los Hechos. Se convertirá en el patrón dominante de los acontecimientos en el momento de la caída de Babilonia, y Daniel fue librado de los leones con el fin de darnos este entendimiento y expectativa.

Sin embargo, después de la primera resurrección ( Apocalipsis 20: 4-6 ), algunos se identificarán plenamente con la segunda paloma -Cristo en su segunda manifestación. Éstos no podrán ser asesinados por sus enemigos en el nivel personal, ni podrán morir en el nivel histórico.

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